"La Mafia est¨¢ m¨¢s fuerte que nunca"
Rita Borsellino (Palermo, 1945), farmac¨¦utica y madre de familia, encabeza desde hace a?os la lucha de la sociedad siciliana contra la Mafia. Su hermano, el juez Paolo Borsellino, fue asesinado por Cosa Nostra en 1992. En mayo ser¨¢ candidata del centro-izquierda a la presidencia de Sicilia. Su rival, el actual presidente, Tot¨® Cuffaro, est¨¢ procesado por favorecer a la Mafia. Rita Borsellino lamenta el silencio con el que las dos grandes coaliciones nacionales han pasado por encima del problema del crimen organizado en la campa?a electoral y asegura que "la Mafia es m¨¢s fuerte que nunca".
Pregunta. Usted recorre Sicilia desde hace tiempo para despertar a los sicilianos de su resignaci¨®n.
"El centro-izquierda tampoco ha querido abrir un debate nacional sobre la Mafia, pero s¨¦ que Romano Prodi tiene voluntad de combatirla"
"El ¨¦xito del crimen organizado ha sido infiltrarse en la pol¨ªtica y en la econom¨ªa y adormecer el debate mientras hace m¨¢s negocios que nunca"
Respuesta. Desde hace a?os. Y ahora percibo entusiasmo, ganas de participar. La gente se da cuenta de que hay mucho que hacer y est¨¢ despertando.
P. ?C¨®mo se anim¨® a dar el paso y ser candidata?
R. Durante 13 a?os, como vicepresidenta de la asociaci¨®n Libera, he viajado por la isla y por el resto de Italia para hablar de una Sicilia diferente, libre de la Mafia. Despu¨¦s de los atentados de 1992 [en los que murieron, entre otros, su hermano Paolo Borsellino y el tambi¨¦n juez Giovanni Falcone], Sicilia reaccion¨®. Luego recay¨® en la resignaci¨®n. He intentado mantener vivos el recuerdo de mi hermano y el ¨¢nimo de lucha de los sicilianos. He acudido a tantas escuelas, a tantos centros c¨ªvicos... Sicilia es potencialmente rica, tiene enormes posibilidades por su posici¨®n geogr¨¢fica, su belleza y por su clima, y creo que ahora hemos recuperado una fuerte voluntad de cambio. Cinco a?os de gobierno de Silvio Berlusconi en Roma y de Tot¨® Cuffaro en Palermo han servido para que la gente se d¨¦ cuenta de qui¨¦nes son. Los partidos del centro-izquierda me parec¨ªan, sin embargo, resignados a perder en las regionales y pensaban presentar al menos dos candidaturas distintas. Eso me molest¨®. En anteriores ocasiones me hab¨ªan ofrecido cargos pol¨ªticos y los hab¨ªa rechazado. Esta vez me pareci¨® que deb¨ªa dar el paso adelante. Aunque no milito en ning¨²n partido, me present¨¦ a unas primarias, las gan¨¦ y el 28 de mayo ser¨¦ candidata ¨²nica del centro-izquierda.
P. Hace cinco a?os, Berlusconi venci¨® en 61 de los 61 colegios electorales sicilianos. El centro-izquierda se qued¨® en cero.
R. Aquello se debi¨® al sistema mayoritario, que ya no existe. Pero es cierto que mucha gente crey¨® en las promesas de Berlusconi y quiso ensayar la novedad. Lo peor de todo fue el colapso del centro-izquierda. Durante cinco a?os hemos sido efectivamente un cero, no nos hemos hecho o¨ªr. Ahora hay rabia, sensaci¨®n de que nos han tomado el pelo, y yo hablo siempre del cero en mis actos pol¨ªticos: no debe volver a suceder.
P. El pasado 21 de marzo se celebr¨® en Tur¨ªn una manifestaci¨®n multitudinaria contra la Mafia. Pero en la campa?a de las elecciones generales casi no se ha hablado del problema.
R. S¨®lo se habla de la Mafia para restarle importancia, para decir que no es algo tan grave. Es cierto, el centro-izquierda tampoco ha querido abrir un debate nacional sobre la Mafia, pero s¨¦ que Romano Prodi tiene voluntad de combatirla. Ha dicho que si no se impulsa el desarrollo siciliano, Italia no podr¨¢ recuperarse, y que Sicilia no puede crecer econ¨®micamente si sigue soportando el peso de la Mafia. La actividad policial y judicial es muy importante, aunque haya quien quiera desacreditar a los jueces, pero no es la ¨²nica. En mi programa, la Mafia es omnipresente porque lo es en Sicilia y afecta toda nuestra vida. Debemos devolver la moralidad a la pol¨ªtica.
P. El actual presidente regional, Tot¨® Cuffaro, que ser¨¢ su oponente en mayo, est¨¢ procesado por favorecer a la Mafia.
R. Eso no es normal. Como no es normal que alguien como Silvio Berlusconi presida el Gobierno italiano. Cuffaro ha sido procesado dos veces por favorecer a la Mafia. A¨²n no le han juzgado, pero s¨®lo el hecho de que se le impute un delito tan grave convierte en un contrasentido su presencia al frente del Gobierno regional. Que despu¨¦s de tantos muertos nos gobierne un hombre bajo sospecha resulta ¨¦ticamente insoportable.
P. Ya no hay tantos muertos. En Calabria s¨ª, pero en Sicilia ha bajado la violencia: en 1992, s¨®lo en la ciudad de Palermo hubo 130 asesinatos mafiosos. El a?o pasado fueron dos.
R. Es cierto. La Mafia sabe que no le conviene matar porque aparece en los peri¨®dicos y obliga a que se hable de ella. Su ¨¦xito, tras las matanzas de 1992, ha consistido en infiltrarse en la pol¨ªtica y en la econom¨ªa y en adormecer el debate, mientras hace mejores negocios que nunca. La justicia descubre continuamente enormes patrimonios ilegales. La Mafia es m¨¢s fuerte que nunca.
P. Y la polic¨ªa no consigue detener al jefe de Cosa Nostra, Bernardo Provenzano, en busca y captura desde hace 40 a?os.
R. Eso es injustificable. La Mafia cuenta con tantos c¨®mplices en la justicia y en la polic¨ªa que su jefe es intocable. Provenzano conoce con antelaci¨®n todos los movimientos de la polic¨ªa y no ha tenido problemas para viajar a Marsella y operarse en una cl¨ªnica francesa con cargo a la Seguridad Social italiana.
Condenada al subdesarrollo
En el centro de Palermo a¨²n hay casas da?adas por los bombardeos de la II Guerra Mundial. Cruzar Sicilia desde Trapano a Catania, una distancia de 300 kil¨®metros, supone en tren o autom¨®vil un viaje de m¨¢s de cuatro horas. La isla es una de las m¨¢s bellas y ricas en monumentos del mundo, pero cuenta con menos plazas hoteleras que Malta. Sicilia parece condenada al subdesarrollo. En 2001 se convirti¨® en s¨ªmbolo del cambio berlusconiano: el centro-derecha gan¨® en los 61 colegios electorales. En estas elecciones, los aliados de Silvio Berlusconi vuelven a ser favoritos y los sondeos les auguran m¨¢s del 50%.
Sicilia vivi¨® un momento de optimismo a mediados de los noventa, cuando la violencia mafiosa provoc¨® una masiva reacci¨®n ciudadana y surgi¨® el movimiento pol¨ªtico La Rete, de Leoluca Orlando. Aquella efervescencia se evapor¨® en poco tiempo y la Democracia Cristiana retom¨® las riendas del poder. El retorno a la normalidad
conservadora dio en 2001 a Berlusconi un mont¨®n de parlamentarios y permiti¨® a Francesco Cuffaro, Tot¨®, hacerse con la presidencia regional.
La inercia de la restauraci¨®n deber¨ªa bastar para que la Casa de las Libertades se alzara a partir del lunes con una victoria c¨®moda. En las pr¨®ximas elecciones regionales del 28 de mayo se prev¨¦, sin embargo, un vuelco. Rita Borsellino es popular¨ªsima y el propio centro-derecha calcula que su prestigio personal y el hecho de ser ajena a la pol¨ªtica la convierten en un rival dif¨ªcil de batir. Los procesamientos de Cuffaro por sus presuntos v¨ªnculos con la Mafia tampoco ayudan a la derecha siciliana, que sopesa la posibilidad de buscar un candidato de historial m¨¢s limpio para medirse contra Borsellino.
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