Decisi¨®n judicial controvertida

La decisi¨®n judicial de dejar en libertad a Abraham Fern¨¢ndez, de 22 a?os, detenido en 14 ocasiones por agresiones xen¨®fobas, y a Carlos. H. M., de 24, ambos neonazis, ha suscitado indignaci¨®n en Castellar del Vall¨¨s y sorpresa en determinados sectores de la judicatura y la abogac¨ªa.

A los dos se les imputan sendos delitos de lesiones y atentado contra la autoridad. Presuntamente, el s¨¢bado por la noche dieron una brutal paliza a Fernando U., un portugu¨¦s de origen guineano de 42 a?os que est¨¢ ingresado en el hospital Parc Taul¨ª de Sabadell. La v¨ªctima ha tenido que pasar por el quir¨®fano porque le fracturaron la zona orbital del ojo izquierdo. Los puntapi¨¦s de los agresores fueron tan salvajes que lo dejaron inconsciente. El titular del Juzgado n¨²mero 3 de Sabadell decidi¨® que no era necesaria la prisi¨®n provisional para los neonazis porque ninguno de ellos tiene antecedentes penales y no hay riesgo de fuga. La reacci¨®n del Ayuntamiento de Castellar fue el anuncio de un recurso para pedir la prisi¨®n provisional y porque la libertad de Abraham provoca "alarma social".

Sorprende que Abraham, viejo conocido de la polic¨ªa por su afici¨®n a golpear y armar trifulcas, nunca haya pisado una prisi¨®n pese a sus 14 antecedentes policiales, que hasta ahora tan s¨®lo le han comportado visitas a los juzgados.

El letrado Llu¨ªs Batll¨®, presidente de la secci¨®n penal del Colegio de Abogados de Barcelona, opina que la decisi¨®n del juez es "controvertida". Los antecedentes penales son motivo para decretar la prisi¨®n provisional, pero hay otros, como "la alarma social", se?ala. "Ha sido muy purista [el juez] con la presunci¨®n de inocencia. Los antecedentes policiales no computan como los penales, pero s¨ª pueden informar al juez de la peligrosidad del detenido", a?ade.

Si Abraham ha sido arrestado 14 veces y no tiene antecedentes penales, es que "algo falla", opina Batll¨®. Seg¨²n el letrado, el problema es que este tipo de agresiones racistas se realizan "en grupo y al final s¨®lo acaban imputados uno o dos, y los otros se salvan por falta de testimonios o de pruebas". En este tipo de delitos se puede aplicar la agravante de racismo, lo que eleva la pena al m¨¢ximo. En opini¨®n de Batll¨®, "es muy complicado demostrar que el motivo de la agresi¨®n ha sido racista si no lo reconoce el agresor, algo dif¨ªcil porque son conscientes de que con la agravante pueden ir a prisi¨®n".

Igual que Batll¨®, Gregorio Mar¨ªa Callejo, magistrado de la Audiencia de Barcelona y coordinador de Jueces para la Democracia, precisa que los antecedentes penales no son el ¨²nico motivo para decretar el ingreso en prisi¨®n. Al de alarma social, hay que a?adir otros, como "la reiteraci¨®n" de los delitos y la peligrosidad de la persona. El hecho que "estos individuos se diviertan dando palizas de forma reiterada" justificar¨ªa, en opini¨®n de Callejo, la prisi¨®n provisional. Seg¨²n el magistrado, "hay falta de sensibilidad en el cuerpo judicial" hacia este tipo de agresiones. "El otro problema", a?ade, es que se deber¨ªa "investigar a fondo este tipo de organizaciones y qui¨¦n las financia, porque es sorprendente lo bien que est¨¢n conectadas las unas con las otras". Este tipo de agresiones contra todo aquel que es distinto por color, raza u orientaci¨®n sexual, o simplemente opina de diferente manera, se producen con "demasiada frecuencia". Y concluye: "Hay excesiva impunidad".