La polic¨ªa mantiene abierta la operaci¨®n que dio lugar a la detenci¨®n de Provenzano

Cuando los helic¨®pteros comenzaron a sobrevolar Corleone, los habitantes de esta localidad siciliana supieron que algo importante ocurr¨ªa. R¨¢pidamente los rumores empezaron a correr por las estrechas y empinadas calles de esta ciudad, cansada de ser identificada con la Mafia. "L'hanno preso" ("Lo han capturado"): no hac¨ªa falta decir de qui¨¦n se trataba. Tras 43 a?os de fuga, el capo dei capi, el jefe de la Mafia siciliana, Bernardo Provenzano, hab¨ªa sido capturado en una granja a s¨®lo unos kil¨®metros del pueblo, donde viv¨ªa "como un pastor".

Tres personas m¨¢s fueron detenidas ayer dentro de una operaci¨®n policial que todav¨ªa segu¨ªa en marcha. Se trata de tres habitantes de Corleone que llevaban al jefe provisiones, ropa y, sobre todo, recados, los pizzini, los papelitos con los que se comunicaba con el mundo exterior. "Le hac¨ªan llegar paquetes y le daban asistencia log¨ªstica", indic¨® el jefe de la divisi¨®n m¨®vil de la polic¨ªa de Palermo, Giuseppe Gualtieri. Se trata del pastor Bernardo Riina y de Calogero y Giuseppe Lo Bue, padre e hijo. No se trata, en cualquier caso, de dirigentes mafiosos, sino de humildes soldados. Provenzano fue trasladado a una prisi¨®n de alta seguridad, lejos de Sicilia.

Bajo un cielo nublado, Corleone, donde han vivido la mujer y los hijos del capo mafioso durante su larga fuga, se preparaba ayer para la Semana Santa, ajeno al imprevisto movimiento que hab¨ªa generado la captura de Provenzano. Los hombres, todos con gorra, contemplaban el constante trasiego sentados en la plaza principal de la localidad, construida sobre la falda de una ladera. Como ocurre en tantos lugares de Sicilia, la localidad de 12.000 habitantes ha sido afeada por las construcciones modernas de varios pisos, tiradas por todas partes y mucho m¨¢s visibles que las tradicionales viviendas de piedra de una sola planta. No se puede olvidar que el cemento ha sido uno de los negocios que m¨¢s beneficios han reportado a Cosa Nostra.

Un equipo de expertos de la polic¨ªa cient¨ªfica italiana analizaba minuciosamente el lugar donde fue detenido Provenzano, en busca de huellas e indicios, aunque es m¨¢s que posible que un fugitivo tan experto haya dejado muy pocos rastros que permitan tirar del hilo en busca de su red. M¨¢s c¨®modo que el escondrijo que sirvi¨® de refugio a Sadam Husein en Irak, el caser¨ªo no es desde luego la vivienda en la que las fuerzas de seguridad esperaban encontrar a uno de los hombres m¨¢s poderosos del crimen organizado.

M¨¢quina de ricota

Se trata de dos casuchas, situadas en una zona agreste conocida como Montagna dei Cavalli. En una dorm¨ªa y estaban el cuarto de ba?o y la cocina (mejor dicho, una habitaci¨®n con un hornillo); en la otra ten¨ªa su despacho y una m¨¢quina para hacer la ricota, el queso blanco siciliano muy similar al reques¨®n. De hecho, tras la detenci¨®n, la polic¨ªa descubri¨® varios recipientes con ricota reci¨¦n hecha en el Seat Panda de Giovanni Marino, el pastor que albergaba al capo mafioso.

Provenzano, que inmediatamente despu¨¦s de su captura fue llevado a Palermo, durmi¨® anoche en una prisi¨®n de alta seguridad de Terni, en el centro de Italia. Sus movimientos eran controlados en todo momento y se encontraba aislado. Como corresponde a un mafioso de otros tiempos, el capo se ha negado a declarar. "Bernardo Provenzano no ha dado ninguna se?al de que tenga la intenci¨®n de ponerse a hablar, ha mostrado una extrema compostura", ha declarado el jefe de la Direcci¨®n Anticriminal Central de la Polic¨ªa, Gilberto Calderozzi.

Muchos interrogantes en torno a la captura de un hombre que llevaba 43 a?os huyendo de la justicia y que, por lo menos en los ¨²ltimos tiempos, parec¨ªa que se le estaba buscando en serio, segu¨ªan abiertos. Sobre todo uno: ?Por qu¨¦ ahora? Las primeras declaraciones de los jueces, fiscales y polic¨ªas que han dirigido la operaci¨®n parec¨ªan indicar que la respuesta era la m¨¢s sencilla de todas: ha sido capturado en el momento en que su escondite ha sido localizado.

"Hasta el ¨²ltimo momento no ten¨ªamos la certeza de que Provenzano se encontrase en el caser¨ªo", ha explicado el fiscal nacional antimafia, Piero Grasso, a la cadena de televisi¨®n La 7. "Una serie de peque?os indicios son los que nos han llevado a esperar que el capo se escondiese all¨ª; pero no ten¨ªamos ninguna certeza hasta el martes por la ma?ana", agreg¨® Grasso.

Uno de los fiscales antimafia de Palermo, Michele Prestipino, asegur¨®, por su parte, que en enero de 2005 "se rompi¨® la red" que proteg¨ªa a Provenzano y que desde entonces han ido estrechando el cerco en torno al capo de los capos. "Hab¨ªa regresado a Corleone hace bastante tiempo, seguramente a finales del a?o 2004", a?adi¨® Prestipino, quien cree que la mayor parte de estos 43 a?os de fuga los ha pasado en los alrededores de la provincia de Palermo.