Prodi muestra su disgusto porque teme que la uni¨®n sea una venta de la firma italiana a la espa?ola

A Romano Prodi, pr¨®ximo presidente del Gobierno italiano, no le gust¨® nada el anuncio de la fusi¨®n entre Abertis y Autostrade. "?sta no puede ser la primera gran operaci¨®n financiera de mi mandato", coment¨®. Prodi tem¨ªa que la fusi¨®n fuera en realidad una venta. Y tem¨ªa sobre todo por su prestigio personal. Fue ¨¦l quien, como presidente del Gobierno en el bienio 1996-1997, inici¨® el proceso de privatizaci¨®n del monopolio estatal de las autopistas italianas, y fue ¨¦l quien tuvo la idea de ceder a la familia Benetton la gesti¨®n de la sociedad. Il Professore se sent¨ªa ayer traicionado por los Benetton (que ganar¨ªan con la fusi¨®n unos 600 millones de euros, gracias al dividendo extraordinario), hasta el punto de cancelar una cena con Gilberto Benetton. Tambi¨¦n parec¨ªa contagiado por el esp¨ªritu proteccionista que ¨¦l mismo critic¨® con severidad durante las batallas bancarias del pasado a?o.

Una delegaci¨®n del consejo de Autostrade se reuni¨® el s¨¢bado con Gianni Letta, principal asesor econ¨®mico de Romano Prodi, para tratar de convencerle de que la fusi¨®n se realizar¨ªa en t¨¦rminos paritarios y ayudar¨ªa a incrementar las inversiones en Italia. Letta, sin embargo, no se dej¨® convencer. En primer lugar, por el momento, "hay un Gobierno saliente y un Gobierno que a¨²n no ha asumido funciones, estamos en una fase de transici¨®n, y me parece inaceptable que en esta situaci¨®n (de parcial vac¨ªo de poder) se decida el destino de la mayor sociedad italiana de infraestructuras", declar¨® Letta al diario La Repubblica. En segundo lugar, porque las condiciones le resultaban sospechosas, sobre todo "los enormes beneficios para los accionistas italianos", que parec¨ªan indicar una venta disfrazada de fusi¨®n; por el hecho de que la sede del holding resultante estuviera en Barcelona y por la "poca claridad" de las condiciones estipuladas para el nombramiento de los principales cargos ejecutivos.

En las filas berlusconianas no exist¨ªan recelos, sino aprobaci¨®n. Y entre los inversores italianos la fusi¨®n suscitaba algo cercano al entusiasmo. Assicurazioni Generali, propietario del 6,7% de Schema28, holding que posee el 51% de Autostrade, anunci¨® su prop¨®sito de incrementar su porcentaje en el holding fusionado.