El Poder Judicial revela "grav¨ªsimas carencias" en centros de menores canarios
La inspecci¨®n del Consejo detecta fallos de "seguridad, higiene, habitabilidad y control"
Once meses despu¨¦s de que el Gobierno canario anunciara un plan de choque para paliar los graves problemas de sus centros de reforma de menores -fugas, motines, incendios, consumo de drogas, violaciones y dos muertes-, ¨¦stos siguen teniendo, seg¨²n un informe de la inspecci¨®n del Consejo General del Poder Judicial, "grav¨ªsimas carencias en cuanto a higiene, control, seguridad, habitabilidad y n¨²mero de plazas". En la comunidad aut¨®noma hay cuatro centros de reforma y 257 j¨®venes privados de libertad, en r¨¦gimen cerrado y semiabierto, por haber cometido alg¨²n delito.
La inspecci¨®n del Consejo General del Poder Judicial ha detectado graves deficiencias en los centros de reforma de Canarias, en los que se interna a los j¨®venes que han cometido delitos siendo menores de edad. Los inspectores expresan que estos centros "carecen de medidas de seguridad adecuadas" y que existe "una falta de higiene total en sus instalaciones", seg¨²n lo que les han relatado los responsables de los juzgados y el fiscal coordinador de la fiscal¨ªa de menores.
No hay plazas suficientes. Ni centros para ejecutar las medidas de internamiento terap¨¦utico para trastornos mentales o las de deshabituaci¨®n para drogodependientes. Se critica tambi¨¦n la falta de programas que sirvan realmente para educar y resocializar a los menores y que "con frecuencia se manda a los menores a una isla distinta a la de su residencia habitual, lo que dificulta su vinculaci¨®n familiar".
A lo largo del a?o pasado se registraron en los centros de internamiento canarios 20 incendios, dos intentos de mot¨ªn, centenares de agresiones, numerosas violaciones, palizas, consumo de drogas, intento de quemar a compa?eros y dos muertes. Veinti¨²n educadores ten¨ªan antecedentes penales. La situaci¨®n fue calificada en junio de 2005 como "insostenible" por el Diputado del Com¨²n canario (figura hom¨®loga al Defensor del Pueblo), quien pidi¨® una "intervenci¨®n urgente" del Gobierno auton¨®mico. Tambi¨¦n en junio, el Defensor del Pueblo espa?ol, tras visitar los centros, pidi¨® el cierre inmediato del situado en G¨¢ldar (Las Palmas de Gran Canaria) por su deficiente estado de conservaci¨®n y limpieza (filtraciones en los ba?os; cristales sustituidos por cartones y orinales con pis en las habitaciones a las seis de la tarde, entre otras cosas), el excesivo n¨²mero de menores que all¨ª se encontraban, su estructura "penitenciaria" y su ubicaci¨®n. El centro est¨¢ al lado de una granja av¨ªcola, lo que provoca malos olores y que el lugar est¨¦ plagado de moscas. Tras las denuncias, el Gobierno canario anunci¨® de inmediato un plan de choque.
En la comunidad canaria hay m¨¢s de 1.000 ni?os y j¨®venes delincuentes sometidos a medidas judiciales, De ellos, 257 est¨¢n en cuatro centros de r¨¦gimen cerrado o semiabierto. Hab¨ªa seis, pero dos se cerraron el a?o pasado tras la crisis. Personal del juzgado y algunos empleados de centros que han exigido el anonimato se?alan que en estos reina a¨²n "el imperio del miedo y la displicencia", que "los agentes de seguridad se siguen comportando como la mafia siciliana" y que "se han seguido produciendo motines y fugas, s¨®lo que no aparecen en los peri¨®dicos; que no se hable de ello no significa que no pase", informa Juan Manuel Pardellas.
Calabozo de tres por tres
La inspecci¨®n del Poder Judicial cuestiona tambi¨¦n otros aspectos del funcionamiento de la jurisdicci¨®n de menores en la comunidad aut¨®noma. Pide que se dote de inmediato al juzgado de una "dependencia adecuada" para custodiar a los menores cuando est¨¢n a disposici¨®n judicial. Ahora este lugar es un calabozo de aproximadamente tres metros de largo por tres de ancho que "no re¨²ne las condiciones m¨ªnimas exigibles de habitabilidad, higi¨¦nicas y de capacidad".
El informe califica el n¨²mero de visitas de los jueces a los centros, s¨®lo cuatro a lo largo de 2005, como "totalmente insuficientes" y propone que las visitas sean quincenales. Critica, finalmente, el funcionamiento de la entidad p¨²blica de protecci¨®n de menores. Cuando se detiene a un chico, para acordar medidas cautelares el juzgado de guardia tiene que ponerse inmediatamente en contacto con dicha entidad, que tiene que designar el recurso en el que se va a ejecutar la medida. En Canarias, este organismo cierra desde las 15 horas de los viernes hasta las 9 horas de los lunes. Tampoco abre los festivos. Los menores que son detenidos un viernes a las 6 de la tarde, por ejemplo, permanecen retenidos sin que pueda realizarse la comparecencia judicial hasta el lunes. Si hay varios festivos seguidos, esta situaci¨®n se puede prolongar durante d¨ªas.
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