Peter Handke asegura que no es "negacionista"
El dramaturgo austriaco Peter Handke ha declarado al diario Le Monde que ¨¦l nunca ha "defendido posiciones negacionistas" respecto a la responsabilidad criminal de los serbios en determinados momentos de la guerra de los Balcanes. Pero defiende su derecho a "escribir sobre las v¨ªctimas serbias porque nadie lo hac¨ªa, aunque piense tambi¨¦n en las v¨ªctimas croatas o musulmanas".
?sas son las ¨²nicas palabras de Handke sobre un affaire que le enfrenta a la Com¨¦die-Fran?aise desde que el administrador general de la misma, Marcel Bozonnet, ha decidido desprogramar su obra Voyage au pays sonore ou l'art de la question, prevista para enero y febrero de 2007. Bozonnet se indign¨® al descubrir que, el pasado 18 de marzo, Handke acudi¨® a Prozovac para asistir al entierro del dictador serbio Slobodan Milosevic.
Algunos intelectuales, entre ellos los escritores Elfriede Jelinek, Pierre Michon, Patrick Modiano, Paul Nizon y Josef Winkler; los cineastas Michael Haneke y Emir Kusturica, y los directores de teatro Bruno Bayen, Jean-Luc Bondy y Claus Peymann han protestado ante la decisi¨®n de Bozonnet, que equiparan a "un acto de censura", cuesti¨®n que niega Bozonnet, quien reivindica "que el teatro es la libertad, la libertad de programar o no una obra, a un autor. Yo no proh¨ªbo que otros lo hagan".
Para Bozonnet, su decisi¨®n al retirar del programa de enero-febrero 2007 la obra de Handke es fruto de una larga reflexi¨®n. "Durante un periodo de guerra uno puede equivocarse. Peter Handke pod¨ªa equivocarse, como todo el mundo. Pero luego Milosevic fue detenido y delante del Tribunal de La Haya quedaron probados sus cr¨ªmenes, no queda lugar para la duda. Peter Handke dice que ¨¦l no sabe d¨®nde est¨¢ la verdad. Pone en duda el testimonio de los periodistas y el trabajo de los historiadores. Se burla de ellos. Todo eso me hac¨ªa imposible acoger a esa persona en un teatro y darle la mano".
El administrador general de la Com¨¦die-Fran?aise conoc¨ªa de mucho antes la voluntad de Handke de interesarse por las v¨ªctimas serbias, de salir en defensa de la desaparecida Federaci¨®n Yugoslava y del dictador Milosevic, condici¨®n esa -la de dictador- que Handke niega, pues, afirma, "fue elegido por sus conciudadanos", circunstancia que el serbio comparte con otro dictador c¨¦lebre, Adolf Hitler, pero que no afecta al punto de vista del dramaturgo y escritor austriaco, quien critica "las hordas de agitadores a distancia, que confunden su trabajo de escritura con el de juez e incluso con el de un demagogo".
"Ultraje a las v¨ªctimas"
El affaire Handke ha ocultado el resto de la actualidad referida a la Com¨¦die-Fran?aise, incluido el hecho de que una obra de Lope de Vega -Perib¨¢?ez y el comendador de Oca?a- pase a formar parte del repertorio de la instituci¨®n. Los ataques contra Bozonnet han ocupado el debate. Si para Jelinek y otros intelectuales, "estamos ante una forma de censura", para el fundador del Parlamento Internacional de Escritores, Christian Salmon, Bozonnet "da argumentos a todos aquellos que, por conformismo, estupidez o cobard¨ªa van a sentirse m¨¢s libres a la hora de dictar sus opciones en materia cultural", y habla de "censura de Estado". Como si quisiera darle la raz¨®n, el ministro de Cultura, Renaud Donnedieu de Vabres, se ha desmarcado tambi¨¦n de Bozonnet, de quien dice "comprender y respetar su actitud como ciudadano", pero ya no tanto como responsable de la Com¨¦die, circunstancia que le llevar¨¢ a recibir, el pr¨®ximo domingo, a Handke en los salones del ministerio.
Lo cierto es que el administrador general es el ¨²nico responsable de la programaci¨®n de dos de las tres salas de la Com¨¦die-Fran?aise, y entre ellas la que deb¨ªa acoger la obra de Handke. La tercera depende de un comit¨¦ del que forma parte el propio Bozonnet y al que, a t¨ªtulo consultivo, ¨¦ste pidi¨® opini¨®n. "Comprendieron la gravedad del problema. Dejaron que tomase mi decisi¨®n en conciencia. Si otro optase por programar la obra, yo no le criticar¨ªa, pero no puedo olvidar la presencia de Handke en el entierro de Milosevic. Es un ultraje a todas las v¨ªctimas".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Dominique de Villepin
- Escritores
- Censura
- Slobodan Milosevic
- Nicolas Sarkozy
- Declaraciones prensa
- Philippe Rondot
- Peter Handke
- Libertad expresi¨®n
- Francia
- Europa occidental
- Europa
- Literatura
- Corrupci¨®n
- Gente
- Gobierno
- Administraci¨®n Estado
- Delitos
- Medios comunicaci¨®n
- Pol¨ªtica
- Administraci¨®n p¨²blica
- Cultura
- Justicia
- Sociedad
- Comunicaci¨®n