El 'tuning' triunfa en el Jarama

David Mar¨ªa est¨¢ nervioso. Se agita, da vueltas, coloca todo. Tiene 12 a?os, es de Sotillo (Segovia) y est¨¢ a punto de presentar su bicicleta en la concentraci¨®n de tuning (veh¨ªculos transformados) Maxituning Show, celebrada este fin de semana en el circuito de velocidad del Jarama, en Madrid. El chico ha enganchado un carrito-sidecar en la parte de atr¨¢s de su bici -completamente tuneada, las ruedas, el manillar, los manguitos-, para colocar un enorme equipo de m¨²sica que lleva rodando a todas partes, y escuchar, principalmente, "bacalao".

El fen¨®meno de personalizar el coche (u otro veh¨ªculo) hasta l¨ªmites inimaginables, tuning, mueve unos 450 millones de euros anuales, emplea a unas 8.000 personas y se ha convertido en un espect¨¢culo que atrae a gente m¨¢s all¨¢ de los 200.000 tuneros que hay en Espa?a (el 1% del parque m¨®vil, se calcula). Aparte del perfil cl¨¢sico de joven entre 20 y 30 a?os, que trabaja pero vive con sus padres, por lo que puede invertir mucho dinero en su coche (desde 1.200 euros hasta 18.000 o lo que den el presupuesto y el entusiasmo), ayer disfrutaban de la exhibici¨®n padres de familia arrastrados por la pasi¨®n de sus hijos. La familia Carrera se ha desplazado a Madrid desde Valencia con su hijo, ?scar (20 a?os), que a¨²n no tiene coche tuneado, pero es "irremediable" que lo tenga, dicen sus padres, "cuando se saque el carn¨¦". Tambi¨¦n hab¨ªa apasionados del motor, de todas las edades, que no se plantean tunear nada porque es muy caro, pero disfrutan de los colores chillones, las llantas imposibles, las tapicer¨ªas de peluche, los neones y de los espect¨¢culos de derrapes y aceleraci¨®n que se han visto en el Jarama. Los t¨®picos, como los peinados rapados con flequillo de punta, camisetas de manga corta remangadas, tatuajes, mujeres exuberantes ligeras de ropa contratadas por la organizaci¨®n, conviven con multitud de familias, curiosos y alg¨²n tunero a punto de arrepentirse. Iv¨¢n Rodr¨ªguez, administrativo madrile?o (30 a?os) y su mujer han gastado 6.500 euros en transformar su coche. Les encanta, pero no es nada pr¨¢ctico: "No podemos llev¨¢rnoslo de viaje. Es un sufrimiento dejarlo en la calle, siempre pendientes, que si te lo rayan...".

Ram¨®n Castell¨¢ es director de la revista Maxituning, organizadora del encuentro: "Ya es un fen¨®meno popular, ya no somos una secta". En este cuarto encuentro de Madrid esperan unos 800 coches tuneados y alrededor de 30.000 visitantes. "Son, simplemente, personas que buscan ser diferentes", explica Castell¨¢. "Me gusta llamar la atenci¨®n", admite C¨¦sar Fern¨¢ndez (22 a?os), que se desplaz¨® desde Colindres (Santander). Se ha gastado unos 7.000 euros en tunear su coche y lo explica: "Otros tienen el vicio de fumar, yo tengo el del coche".