"Es imposible asegurar que un sello se revalorizar¨¢ siempre"

Francisco, cliente de F¨®rum Filat¨¦lico, pag¨® m¨¢s de 1.500 euros por 11 sellos de la serie Europa 62 que seg¨²n el cat¨¢logo oficial de la Asociaci¨®n Nacional de Empresarios de Filatelia y Numism¨¢tica de Espa?a (Anfil), valen menos de 200 euros. Pablo L¨®pez, secretario de la asociaci¨®n y propietario de una filatelia desde 1967, ten¨ªa ayer siete de esos 11 sellos en su tienda. Estaban en una ficha de cart¨®n. Juntos val¨ªan poco m¨¢s de 16 euros.

"Se ve¨ªa venir. Es incomprensible que los sellos est¨¦n dando tanto dinero durante tanto tiempo y a tanta gente". Pablo L¨®pez Baza, de 70 a?os, propietario de una filatelia en la Plaza Mayor de Madrid, tiene en su tienda siete de los 11 sellos que Francisco, un cliente de F¨®rum Filat¨¦lico, compr¨® a principios de este a?o a trav¨¦s de la entidad. Corresponden a la serie Europa 62, cuyo valor total (39 sellos) es de 210, 40 euros. Francisco pag¨®, s¨®lo por 11 de ellos, 1.502 euros.

Las estanter¨ªas de la filatelia L¨®pez Baza est¨¢n repletas de ¨¢lbumes lujosamente editados, acolchados y con tapas de piel que guardan valiosas estampitas en su interior. Los sellos que buscamos, los de Francisco, no est¨¢n en esos ¨¢lbumes. Est¨¢n en una ficha de cart¨®n. "El valor de un sello se lo da la escasez. Si se tiraron muchos en su d¨ªa, son m¨¢s baratos. Los de Europa no son especialmente raros. Cada a?o hay alguno que es m¨¢s caro, pero nunca m¨¢s de 200 euros. El m¨¢s valioso de la serie Europa 62 es Chipre - Francisco pag¨® 709.74 euros por ¨¦l- y cuesta 120 euros", explica Pablo.

El precio de Chipre 62 es un poco m¨¢s alto en el prestigioso cat¨¢logo Anfil que edita la Asociaci¨®n Nacional de Empresarios de Filatelia y Numism¨¢tica de Espa?a, con m¨¢s de 200 miembros, pero en cualquier caso, es mucho m¨¢s bajo que el que fij¨® F¨®rum Filat¨¦lico. Seg¨²n el cat¨¢logo, Chipre 62 vale 175 euros.

"En las filatelias el precio suele bajar un poco, porque tienen mucha competencia y a veces les compensa venderlo un poco m¨¢s barato", explica Pedro Ayala, directivo de Anfil. "Lo que s¨ª que es imposible es asegurar que un sello se va a revalorizar siempre, porque esto va por ciclos y nadie te puede garantizar que dentro de un tiempo vaya a valer m¨¢s, igual, o menos".

"Yo rara vez le he vuelto a comprar un sello vendido a un cliente. No vale la pena. S¨®lo en alg¨²n caso especial" comenta Pablo mientras vuelve a depositar en su sitio un cat¨¢logo con sellos que s¨ª alcanzan las cantidades manejadas por F¨®rum Filat¨¦lico: sellos de espa?oles del Reinado de Isabel II, por ejemplo, que rondan los 4.000 euros.

A Pablo le pic¨® el gusanillo de la filatelia en p¨¢rvulos. Un cura les ofrec¨ªa caramelos a cambio de lavar sellos; "Yo me quedaba los que me gustaban", dice, "y as¨ª empec¨¦". Ahora est¨¢ convencido de que los sellos "hablan", pero s¨®lo para algunos: "No es lo mismo el coleccionista que el inversionista. Al coleccionista, el sello le habla de historia, de cultura... El inversionista no sabe lo que tiene y le da lo mismo que sean jamones que sellos. S¨®lo quiere obtener un inter¨¦s", explica.

"El coleccionista puede pensar que a largo plazo recuperar¨¢ su inversi¨®n, pero ¨¦l, lo que est¨¢ haciendo es una colecci¨®n y por eso coloca el sello de que vale unos c¨¦ntimos al lado del que vale 3.000", comenta Ayala. La mayor¨ªa de los clientes de F¨®rum Filat¨¦lico nunca vieron sus sellos, ni los tuvieron en sus manos. Lamentablemente, tampoco los tasaron.