Momento de decisiones y oportunidades

Voy a reunirme hoy en Viena con mis colegas de Am¨¦rica Latina, el Caribe y la Uni¨®n Europea para impulsar un proyecto ambicioso. Cuando nos reunimos por primera vez en 1999 en R¨ªo de Janeiro, est¨¢bamos convencidos de que hab¨ªa llegado la hora de institucionalizar el di¨¢logo entre dos regiones ligadas por una convivencia rica en historia, pero tambi¨¦n en potencialidades y expectativas. Nac¨ªa un intercambio de acercamiento de visiones del mundo que se refuerzan y complementan: el fortalecimiento del multilateralismo, el respeto a la diversidad y la defensa de la democracia. ?stas son nuestras respuestas a los desaf¨ªos de un mundo interdependiente y globalizado.

La agenda de la Cumbre de Viena es tan vasta como nuestras aspiraciones: vamos a profundizar en el debate sobre cuestiones que afectan directamente al bienestar de nuestros ciudadanos. Este es el caso, por ejemplo, de las migraciones. La b¨²squeda permanente de mejores condiciones de trabajo debe ser un factor de acercamiento y entendimiento jam¨¢s de discordia entre nuestros pueblos. La aspiraci¨®n inalienable de la integraci¨®n social moviliza hoy a todos los segmentos de la sociedad civil de los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina y el Caribe. Los Gobiernos de la regi¨®n se est¨¢n enfrentando con determinaci¨®n a la pobreza, el desempleo y la falta de acceso a los servicios b¨¢sicos. Me llena de satisfacci¨®n comprobar que ese imperativo encuentra eco en diversas iniciativas europeas orientadas a la promoci¨®n de la cohesi¨®n social. Juntos podemos dar un ejemplo de solidaridad, que acorta la distancia entre personas y traspasa oc¨¦anos.

En Viena profundizaremos el debate sobre cuestiones que afectan al bienestar de nuestros ciudadanos

Con la misma confianza, aunamos esfuerzos en pro de la construcci¨®n de un gobierno global verdaderamente amplio y democr¨¢tico. Solamente as¨ª seremos capaces de implementar estrategias eficaces y coordinadas para cuestiones cruciales de la agenda internacional, tales como la lucha contra el crimen internacional, la protecci¨®n del medio ambiente y la transferencia de conocimientos y tecnolog¨ªa.

Cincuenta y ocho pa¨ªses participan en este ejercicio birregional, m¨¢s de un cuarto de todos los Estados del mundo. La presencia de un n¨²mero tan representativo de l¨ªderes mundiales, as¨ª como del secretario general de la ONU, Kofi Annan, ofrece una oportunidad singular para traducir los principios y valores que compartimos en acciones concretas.

Pienso, por ejemplo, en el desaf¨ªo de transformar la misi¨®n de paz en Hait¨ª en el nuevo paradigma de la solidaridad internacional. Concluida la primera fase de estabilizaci¨®n del pa¨ªs con las fruct¨ªferas elecciones del pasado febrero, la comunidad internacional est¨¢ llamada ahora a contribuir a la efectiva reconstrucci¨®n nacional, sin la que no ser¨¢ posible una paz duradera. En Viena, convocar¨¦ a nuestros socios europeos para participar de forma comprometida en la conferencia de donantes que se celebrar¨¢ en Brasilia a finales de este mes.

Tambi¨¦n invitaremos a nuestros amigos de Europa para que se impliquen en la tarea de identificar mecanismos innovadores para financiar la batalla contra los principales males que aquejan al mundo en desarrollo. Varios pa¨ªses que estar¨¢n representados en Viena ya est¨¢n contribuyendo con la Acci¨®n Internacional contra el Hambre y la Pobreza, cuyo primer fruto ha sido la creaci¨®n de una contribuci¨®n solidaria impuesta sobre la venta de billetes de avi¨®n. Es preciso aumentar el n¨²mero de participantes para garantizar el nivel de recursos necesarios para dar al programa un alcance verdaderamente global y para hacer viables nuevas alternativas.

Los l¨ªderes reunidos hoy dispondr¨¢n de una de sus ¨²ltimas oportunidades para dar un impulso decisivo a las negociaciones comerciales multilaterales en curso. En la Ronda de Doha de la OMC, est¨¢n en juego intereses econ¨®micos importantes con consecuencias directas para nuestros empresarios y consumidores. S¨®lo llegaremos a buen puerto si los jefes de Estado y de Gobierno adoptan decisiones valientes. No podemos correr el riesgo de que las negociaciones en Ginebra queden paralizadas, perdidas en los laberintos de las dificultades t¨¦cnicas. La cuesti¨®n es eminentemente pol¨ªtica. Si hablamos de manera franca, estoy convencido de que alcanzaremos un acuerdo beneficioso para todos.

La Uni¨®n Europea siempre ha servido de ejemplo e inspiraci¨®n para nuestro proyecto de unidad regional. Tengo la intenci¨®n de llevar a Viena un mensaje de optimismo sobre el proceso de integraci¨®n en curso en Am¨¦rica del Sur y con los dem¨¢s socios de Am¨¦rica Latina y del Caribe. La integraci¨®n regional se ha convertido en el eje articulador del desarrollo y de la inserci¨®n internacional de nuestros pa¨ªses. A trav¨¦s del Mercosur, de la Comunidad Andina y del Mercado Com¨²n Centroamericano, estamos yendo m¨¢s all¨¢ del simple aumento de nuestros intercambios comerciales y creando un aut¨¦ntico espacio integrado mediante la unificaci¨®n de las infraestructuras de transporte, comunicaciones y energ¨ªa. Ya hemos empezado a construir las carreteras, los puentes, los gasoductos y las redes el¨¦ctricas que aumentar¨¢n la eficiencia de nuestra industria y nuestra agricultura, la agilidad de nuestro comercio y la competitividad de nuestros productos.

De esos esfuerzos nacen nuevas perspectivas para inversiones y negocios entre los dos bloques. El Foro Empresarial, que se celebrar¨¢ paralelamente a la Cumbre de Viena, ser¨¢ la ocasi¨®n para explorar esas posibilidades. Los proyectos de cooperaci¨®n energ¨¦tica, sobre todo respecto a los combustibles renovables, simbolizan el potencial estrat¨¦gico de nuestra alianza.

Adem¨¢s de la relaci¨®n global entre Am¨¦rica Latina-Caribe y la Uni¨®n Europea, el encuentro de Viena permitir¨¢ abordar igualmente las relaciones espec¨ªficas de Mercosur con el bloque europeo. Pasaremos revista a las diferentes dimensiones del diversificado proceso Mercosur-UE. Pretendemos especialmente reafirmar el significado estrat¨¦gico del acuerdo de asociaci¨®n que, en la actualidad, est¨¢ siendo objeto de negociaci¨®n entre ambas partes.

Viena fue siempre un punto de encuentro de civilizaciones, ideas y culturas. No concibo un lugar m¨¢s apropiado para que nuestras dos regiones renueven su compromiso colectivo con un mundo m¨¢s justo y solidario, fundado en el di¨¢logo, la diversidad y la tolerancia.

Luiz In¨¢cio Lula da Silva es presidente de Brasil.