Espa?a renuncia al cementerio nuclear y apuesta por un almac¨¦n temporal
El Plan Nacional admite la posibilidad de enviar los residuos radiactivos al extranjero
El Gobierno contempla el env¨ªo de residuos nucleares al extranjero y descarta construir un cementerio nuclear en profundidad. El borrador del Sexto Plan General de Residuos Radiactivos, que sustituye al de 1999, se?ala que tener un almac¨¦n para varios pa¨ªses "ofrece ventajas claras desde el punto de vista econ¨®mico, t¨¦cnico e incluso de seguridad", pero reconoce que actualmente hay "problemas socio-pol¨ªticos". La Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa) apuesta por un almac¨¦n en superficie para 60 a?os para ver c¨®mo evoluciona la tecnolog¨ªa. El texto afirma que antes de 2007 hay que tener elegido un emplazamiento, porque en 2011 regresan los residuos de Vandell¨°s I enviados a Francia.
El borrador del Plan general de residuos radiactivos, de 170 folios, que Enresa ha enviado al Ministerio de Industria contiene cambios relevantes sobre el vigente, de 1999. El objetivo es solventar la gesti¨®n de las 160 toneladas de residuos de alta actividad que cada a?o producen las nucleares espa?olas. Aunque estos residuos tienen actividad durante miles de a?os, son menos del 1% de los residuos peligrosos que se producen.
- Almac¨¦n temporal. El plan apuesta por un almac¨¦n en superficie (Almac¨¦n Temporal Centralizado, ATC), que define como "objetivo prioritario". Actualmente, Enresa puede almacenar los residuos de baja y media actividad, activos durante d¨¦cadas, en El Cabril, C¨®rdoba. Sin embargo, no tiene almac¨¦n para los de alta actividad, y cada nuclear almacena sus residuos en piscinas. A finales de 2005, las piscinas guardaban 3.272 toneladas de estos desechos m¨¢s 98 en el almac¨¦n en superficie en Trillo. Si las centrales funcionan 40 a?os, el almac¨¦n tendr¨¢ 6.640 toneladas de uranio gastado.
El plan argumenta que este almac¨¦n centralizado es mejor que mantener los residuos en las centrales porque permite retrasar la decisi¨®n definitiva sobre los residuos; da "capacidad de maniobra ante posibles imprevistos"; "reduce el n¨²mero de instalaciones"; "permite liberar los emplazamientos de las nucleares clausuradas", y es m¨¢s barato que construir un almac¨¦n en cada central, entre otras cosas. El texto destaca que el almac¨¦n recibir¨ªa entre dos y tres transportes al mes, por lo que pide que se construya una l¨ªnea de tren "hasta la propia instalaci¨®n".
Enresa advierte de que el plazo para elegir un lugar se agota, porque en 2011 regresan los residuos de Vandell¨°s I, enviados a Francia tras el incendio que oblig¨® a cerrar la central. El contrato establece una penalizaci¨®n de 49.545,17 euros cada d¨ªa que pase (m¨¢s la inflaci¨®n). Por eso, Enresa necesita saber antes de 2007 d¨®nde construir¨¢ el almac¨¦n y pide a Industria que agilice la elecci¨®n.
- "Residuos compartidos". El borrador contempla la posibilidad de enviar los residuos nucleares al extranjero para el almacenamiento definitivo. Hasta ahora, la postura oficial era que cada pa¨ªs deb¨ªa gestionar sus residuos y que exportarlos ser¨ªa poco ¨¦tico. El nuevo texto afirma que las "soluciones compartidas, planteadas por algunos pa¨ªses, mediante el desarrollo de repositorios [almacenes, en la jerga] internacionales o multinacionales, ofrece ventajas claras desde un punto de vista econ¨®mico, t¨¦cnico e incluso de seguridad".
Fuentes de Enresa afirmaron ayer que en los planes para los pr¨®ximos a?os no est¨¢ enviar los residuos al extranjero, sino en el almac¨¦n temporal. Estas fuentes afirmaron que Enresa no participa en un proyecto europeo de b¨²squeda de un emplazamiento y que la idea de compartir residuos es de otros pa¨ªses y de la organizaci¨®n internacional de la energ¨ªa at¨®mica. El presidente de Enresa, Jos¨¦ Alejandro Pina, ha declarado en el Senado que no ser¨ªa l¨®gico que B¨¦lgica y Holanda tuvieran cada uno un almac¨¦n nuclear, cuyo coste es incalculable. El plan admite que el env¨ªo al extranjero es, por el momento, complicado porque "los problemas sociopol¨ªticos asociados a este planteamiento son todav¨ªa muy notables".
Hasta 1984, Espa?a enviaba los residuos al extranjero para ser reprocesados (extracci¨®n de uranio y plutonio para reutilizarlos). Espa?a ha pagado 34,5 millones al Reino Unido para retrasar la vuelta de los residuos de Garo?a, prevista para 2008. En 2000, Espa?a rechaz¨® la oferta de Rusia de enviar all¨ª los residuos.
- Cementerio nuclear.
El anterior plan postpon¨ªa hasta 2010 la decisi¨®n sobre si se constru¨ªa un cementerio nuclear en profundidad (Almacenamiento Geol¨®gico Profundo, AGP). El actual descarta por el momento construir este silo. El plan afirma que "actualmente no hay en el mundo ninguna instalaci¨®n de este tipo" y que en el mejor de los casos Finlandia y EE UU tendr¨ªan uno en 2010 y 2020. La obra es fara¨®nica y su coste es incalculable.El plan se?ala que en Espa?a existen "abundantes formaciones gran¨ªticas, arcillosas y en menor medida salinas, susceptibles de albergar" este AGP, pero seg¨²n Enresa no es viable antes de 50 a?os.
13.018 millones hasta 2070
El plan de residuos calcula que el coste de tratar todos los residuos y de cerrar todas las nucleares ser¨¢ de 13.018 millones de euros entre 1985 y 2070, de los cuales ya se ha gastado la cuarta parte. Lo que cueste a partir de entonces es incalculable.
Este es el dinero necesario "hasta que el ATC se encuentre plenamente disponible". El c¨¢lculo no incluye la construcci¨®n de un cementerio en profundidad.
Enresa obtiene el dinero de un 0,8% de los recibos de la luz entre 1984 y abril de 2006. A partir de ese momento, el Gobierno oblig¨® a las nucleares a pagar la gesti¨®n de sus residuos a 0,221 c¨¦ntimos de euro por kilowatio producido. Las el¨¦ctricas pagar¨¢n 2.699 millones.
El coste de los residuos radiactivos es uno de los temas que m¨¢s lastran la energ¨ªa nuclear. Cuando los defensores de la energ¨ªa at¨®mica dicen que es rentable, los ecologistas contestan que tengan en cuenta el tratamiento de los residuos durante miles de a?os.
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