Eurovincis

No ha gustado en Cannes la pel¨ªcula sobre El c¨®digo Da Vinci, pero todos siguen hablando de la obra de Dan Brown y sus secuelas. Localia ofreci¨® el jueves por la noche una especie de docudrama ingl¨¦s bastante pl¨²mbeo para mostrar el lado alqu¨ªmico del gran Leonardo. M¨¢s interesante, horas despu¨¦s, la trama de misterio esbozada por Joaqu¨ªn Leguina en Noche Hache (Cuatro) al presentar su libro Las pruebas de la infancia. La novela es criminal e inmobiliaria, dos palabras que a veces se confunden, y, por lo que cont¨® Leguina, su investigaci¨®n policiaca le lleva hasta los despachos de Gallard¨®n y Esperanza Aguirre, "tan majos ambos en la vida real", dijo ante la mirada at¨®nita de Eva Hache. Los pol¨ªticos, que son todos unos diplom¨¢ticos cuando no hay una urna cerca.

Sufr¨ª una placentera regresi¨®n infantil, casi s¨¢dico-anal, viendo en La 2 la selecci¨®n de finalistas del Festival de Eurovisi¨®n, que se juega en campo griego hoy s¨¢bado. (Y envidio a mi admirado compa?ero de parrilla Sergi P¨¤mies, que podr¨¢, si lo desea, escribir sobre la gala final y cobrar por ello con toda justicia). Yo s¨®lo puedo hablar aqu¨ª de eliminatorias, con la nostalgia de quien en su juventud fue adicto a este concurso e inocul¨® su tele-dependencia a otros. Y ha cambiado tanto Eurovisi¨®n con el acceso de nuestros hermanos del Este. Me gust¨® la canci¨®n de Moldova, que no s¨¦ qu¨¦ pa¨ªs es, e impon¨ªa respeto la de Belarus, que no es el nombre de un h¨¦roe gal¨¢ctico sino Bielorrusia en ingl¨¦s. Porque los cantantes ser¨¢n eslavos, islandeses o indo-europeos, pero todo est¨¢ en ingl¨¦s, incluso el Bloody Mary de nuestras salseras Ketchup.

He de decir que en el campo de las coreograf¨ªas nada de lo visto el jueves iguala las ¨²ltimas actuaciones del PP en sede parlamentaria: el numerito de las esposas en la Asamblea de Madrid y, anteayer, los diputados valencianos todos en pie al ritmo de sus grabadoras. El a?o que viene hay que mandar a Eurovisi¨®n al coro de portavoces del PP, con un castigo (para sacarnos la vieja espina): cantar en catal¨¢n.