?Detengan a ese germen!

El Instituto Nacional de Evaluaci¨®n y Calidad del Sistema Educativo (Inecse), dependiente del Ministerio de Educaci¨®n, es el encargado de organizar los ex¨¢menes PISA en Espa?a. Env¨ªa la lista de centros educativos y el consorcio internacional de PISA, radicado en Australia, hace la selecci¨®n.

El m¨ªnimo de institutos que se eligen por pa¨ªs son 150 centros y 4.500 alumnos. Pero este a?o, 10 comunidades han decidido ampliar la muestra para contar con sus propios datos estad¨ªsticos y ser¨¢n 707 centros los examinados en total, 403, p¨²blicos, y 304, privados.

Las preguntas que contestan los alumnos son fruto de un largo proceso de elaboraci¨®n y revisi¨®n donde participan los representantes de los pa¨ªses, los grupos de expertos en las distintas materias y el personal t¨¦cnico del consorcio.

"No se tiene en cuenta para nada el temario espa?ol ni el de ning¨²n pa¨ªs, y s¨®lo se toman en consideraci¨®n las costumbres espa?olas si las preguntas resultan por ello de una dificultad especial para nuestros alumnos, en cuyo caso se eliminan", explican en el Inecse. Algo que no ha ocurrido en esta ocasi¨®n.

Lo que s¨ª hacen en cada pa¨ªs es traducir con mucho cuidado las cuestiones del examen, un proceso que despu¨¦s verifica el consorcio.

Hay preguntas con respuesta cerrada que no plantean dificultad de correcci¨®n. Cuando se trata de una respuesta abierta, "la correcci¨®n sigue unos criterios internacionales con instrucciones pormenorizadas para cada una de ellas".

La puntuaci¨®n oscila entre 0 y 3 puntos. La mayor parte de ellas tienen una puntuaci¨®n m¨¢xima de un punto. Una parte de las preguntas abiertas recibe una puntuaci¨®n m¨¢xima de dos puntos, llegando en otras hasta tres puntos en funci¨®n de la riqueza de la respuesta.

He aqu¨ª un ejemplo

de antiguos cuestionarios:

?Detengan a ese germen!, se titula.

Y comienza: "Ya en el siglo XI, los m¨¦dicos chinos manipulaban el sistema inmunitario. Al soplar polvo de costras de un enfermo de viruela en los orificios nasales de sus pacientes, a menudo pod¨ªan provocar una enfermedad leve que evitaba un ataque m¨¢s grave posterior. Hacia 1700, la gente se frotaba la piel con costras secas para protegerse de la enfermedad. Estas pr¨¢cticas primitivas se introdujeron en Inglaterra y en las colonias americanas. En 1771 y 1772, durante una epidemia de viruela, un m¨¦dico de Boston llamado Zabdiel Boylston puso a prueba una idea que ten¨ªa. Ara?¨® la piel de su hijo de seis a?os y de otras 285 personas y frot¨® el pus de las costras de viruela en las heridas. Sobrevivieron todos sus pacientes a excepci¨®n de seis".

Atenci¨®n, pregunta:

"?Qu¨¦ idea estaba tratando de poner a prueba Zabdiel Boylston?"

-"Inocular a alguien con viruela le proporciona cierta inmunidad".

-"Al ara?ar la piel, la viruela pasa al flujo sangu¨ªneo".

Si los alumnos hacen referencia a esas dos ideas recibir¨¢n un 2. Si s¨®lo mencionan una, un 1. Si ninguna, un 0.