Barcelona ensaya en Sant Andreu un plan para limitar la velocidad a 30 km / h

Prohibido circular a m¨¢s de 30 kil¨®metros por hora. Este mensaje se ver¨¢ en las calles de Barcelona a partir de este verano a medida que se implanten las llamadas zonas 30. Sant Andreu ser¨¢ el primer distrito en el que se probar¨¢, y la medida se establecer¨¢ antes de las vacaciones de verano. A partir de septiembre, se ampliar¨¢ a otras zonas, en especial en los cascos antiguos de los distritos. La implantaci¨®n de las zonas 30 pretende ser uno de los proyectos importantes en la recta final del mandato del actual equipo de gobierno, aunque su desarrollo necesitar¨¢ cuatro a?os m¨¢s.

Limitar la velocidad es una forma de pacificar el tr¨¢fico, cuando no de disuadirlo. El plan de implantaci¨®n de las zonas 30 es, en principio, muy ambicioso y se pretende extender en el 80% de las calles de la ciudad que no forman parte de la red b¨¢sica. "El objetivo no es s¨®lo reducir la velocidad, sino rebajar los niveles de contaminaci¨®n ambiental y ac¨²stica", apunta Imma Mayol, tercera teniente de alcalde y promotora del Plan de Acci¨®n 21, que agrupa las pol¨ªticas de sostenibilidad del Ayuntamiento de Barcelona para el decenio 2002-2012.

"Acordamos con el ¨¢rea de V¨ªa P¨²blica elaborar un plan pormenorizado e implantarlo entre 2006 y 2010", a?ade Mayol. La reducci¨®n de la velocidad comporta una disminuci¨®n de los accidentes mortales por atropello de peatones y facilita que los ciclistas circulen por la calzada sin necesidad de carril bici. Esta nueva experiencia se ha dejado para el final del mandato, tras la implantaci¨®n del ¨¢rea verde de estacionamiento. "Supone continuar con el objetivo de pacificar el tr¨¢fico", afirma Xavier Casas, primer teniente de alcalde. Esta pol¨ªtica se completa con las experiencias de dar prioridad a los peatones en zonas de los barrios G¨°tic, la Ribera y Gr¨¤cia.

El distrito que estrenar¨¢ la zona 30, el de Sant Andreu, ya tiene buena parte de su centro hist¨®rico con la prioridad invertida. Por ejemplo, la calle del Doctor Santpon? y sus perpendiculares, que adem¨¢s conservan el adoquinado en su secci¨®n central al mismo nivel que la acera. Lo mismo ocurre en la calle de Pons i Gallarza, que empieza en la avenida Meridiana y llega hasta Gran de Sant Andreu. Los cambios en los viales ya comenzaron en el anterior mandato -los cercanos a la plaza de Orfila, por un lado, y los alrededores del mercado municipal, por otro- y han continuado en el actual, a medida que el presupuesto y la disponibilidad de aparcamientos lo ha permitido y una vez superadas las resistencias de los comerciantes.

De momento, la limitaci¨®n de velocidad a 30 kil¨®metros por hora se implantar¨¢ en un espacio comprendido entre las calles de Gran de Sant Andreu, Concepci¨® Arenal, Fabra i Puig y Moss¨¨n Clap¨¦s. El Ayuntamiento no ha querido concretar la delimitaci¨®n exacta de la zona argumentando que el alcalde, Joan Clos, lo explicar¨¢ en conferencia de prensa. De momento, no se observan se?ales de limitaci¨®n de velocidad. "La medida no puede limitarse a poner se?ales de tr¨¢fico advirtiendo de la prohibici¨®n, porque eso no sirve de nada. Hay que aplicar medidas disuasorias de verdad, como cambiar la forma f¨ªsica de los viales", opina Pau Noi, presidente de la Plataforma del Transporte P¨²blico. Mayol se?ala que para conseguir una zona 30 hay varias opciones: una nueva urbanizaci¨®n de los viales, colocar elementos disuasorios en la calzada o regulaci¨®n semaf¨®rica. "De lo que se trata es de evitar la presencia de veh¨ªculos de paso", insiste.