Vaidisova, el nuevo fen¨®meno femenino
La checa, de 17 a?os, causa sensaci¨®n y se clasifica por vez primera para las semifinales de un torneo del Grand Slam
Cuesti¨®n de opiniones, pero son muchos los que afirman que Nicole Vaidisova es incluso m¨¢s guapa que Mar¨ªa Sharapova. A pesar de tener s¨®lo 17 a?os, esta tenista checa de inacabables piernas, rubia melena, vestidos cortos -en Wimbledon le conminaron a ponerse una falda m¨¢s larga- y ajustados..., est¨¢ dispuesta a invadir un territorio que parec¨ªa reservado a la rusa tras la desaparici¨®n de su compatriota Ana Kurnikova.
Para los dirigentes del Sony-Ericsson WTA Tour, es una gran noticia porque parecen cada d¨ªa m¨¢s preocupados por la promoci¨®n de sus figuras en el contexto social y de la fama que en el deportivo. Y, probablemente, no andan equivocados. Gracias a Kurnikova, Sharapova, las hermanas Williams, Daniella Hantuchova y ahora Vaidisova, han conseguido levantar un negocio que parec¨ªa destinado a ser engullido por el circuito masculino tanto en las audiencias como en el inter¨¦s de los aficionados.
Sin embargo, eso no es todo. Para poder lanzarse, una estrella tiene que serlo. Y es conveniente que, adem¨¢s de su belleza, logre buenos resultados. La norma se rompi¨® con Kurnikova, cuyo mayor m¨¦rito fue alcanzar las semifinales de Wimbledon con 16 a?os. Pero la explosi¨®n de Sharapova se produjo cuando se convirti¨® en campeona en la cita brit¨¢nica, en 2004 -tambi¨¦n se anot¨® el Masters-, con 17.
Vaidisova est¨¢ en la l¨ªnea de Sharapova. Lo que m¨¢s le preocupa en estos momentos es su tenis. Y lo demuestra jugando con una garra que la lleva a veces a perder los nervios y adoptar actitudes que ofuscan su personalidad. Pero esta tenista, nacida en N¨²remberg (Alemania) porque sus padres se hab¨ªan desplazado all¨ª a trabajar, pero que regres¨® a Praga con s¨®lo seis a?os empu?ando ya una raqueta y con su padrastro, Alex Kodat, como entrenador, ha demostrado muchas veces su genio.
Hija de la hermana de Daniel Vacek, 27? del mundo en 1995, Vaidisova se mir¨® en el espejo de Steffi Graf mientras vivi¨® en Alemania y en la potencia de las Williams cuando se estaba entrenando ya en Praga. "Graf me parec¨ªa formidable dentro y fuera de las pistas. Ten¨ªa mucha clase. Pero en la Rep¨²blica Checa, con 11 y 12 a?os, ve¨ªa por televisi¨®n a Venus y jugaba con su misma raqueta: me maravillaba su rev¨¦s, su estilo y su saque", confiesa.
Lo que realmente cambi¨® su destino fue que una vez estaba jugando en Florida con el equipo de su pa¨ªs y vio a Nick Bollettieri por el club. Se le acerc¨® y le dijo: "Si busca una buena jugadora, venga a verme, yo lo ser¨¦". El t¨¦cnico estadounidense, que ha trabajado con varios de los mejores tenistas, se la tom¨® a broma, pero le envi¨® a uno de sus t¨¦cnicos. Y al d¨ªa siguiente fue ¨¦l mismo. "Me pareci¨® parca en sus movimientos, pero con un potencial tremendo", dice, pero la introdujo en su organizaci¨®n, en la que se puli¨® y sigue. Ahora se prepara con su padre, pero Bollettieri le corrige los defectos cuando est¨¢n en Florida.
Que Vaidisova apunta alto no lo discute nadie. Y no s¨®lo porque es ya la 16? del mundo, sino porque en Par¨ªs ha alcanzado su primera semifinal de un grand slam y vencido a la n¨²mero uno, la francesa Amelie Mauresmo, y a la ex n¨²mero uno, Venus Williams.
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