C¨¢lmense
No perdamos la calma. Pensemos que lo que pidi¨® do?a Esperanza fue que Zapatero le rogara perd¨®n por un gulash h¨²ngaro demasiado picante al que la invit¨® junto a la c¨¦lebre artista Sara Mago; y no, en absoluto, por lo que el camarada Stalin hizo un poco despu¨¦s de que Zhivago y Lara tuvieran que separarse.
Pensemos en la Visa, en American Express, en Master Card, en la posibilidad de endeudarnos m¨¢s y salir de viaje. Ya lo s¨¦, no es f¨¢cil, pero no hagan n¨²meros, por favor.
Lean a Santiago Segurola, ese cronista bals¨¢mico que ve el arte y la inteligencia del f¨²tbol. P¨®nganse al d¨ªa con el Mundial, no se pierdan el estupendo documental de Canal Plus sobre la historia del balompi¨¦ en Italia; entret¨¦nganse con Maradona y sus comentarios. Ag¨¢rrense al doctor House. Va cojo y drogado, ya lo sabemos, pero es m¨¢s sensato que los energ¨²menos que nos rodean. Perd¨®n, que intentan rodearnos. Rel¨¢jense admirando a la protagonista de The Closer.
Sonr¨ªan aunque no tengan ganas. Sonr¨ªan hasta que les vengan las ganas. Escuchen a Mozart. Dicen que mejora la vista, a lo mejor es verdad, pero lo cierto es que mejora la vida. Despierten con Mozart o con Bach: piensen en la de cosas que han ocurrido desde que ellos echaron a volar y dejaron atr¨¢s sus m¨²sicas para nuestro consuelo.
Miren hacia adentro. Lean historia. Cuando, leyendo historia, bajo sus ojos se deslice la frase caceroladas de la derecha chilena contra Allende, traten de no asociar esos m¨¦todos con otros, m¨¢s puestos al d¨ªa por los hijos de FAES, que intentan cercar a Zapatero aunque para ello tengan que arrastrarnos a todos. Para luego volver: de salvapatrias, como siempre.
C¨¢lmense, pero no se conviertan en equidistantes. No olviden que los diputados del Partido Popular que ovacionaron el martes a las v¨ªctimas del terrorismo etarra son los mismos que jalearon la invasi¨®n de Irak hace tres a?os, decisi¨®n que ha producido alrededor de 100.000 v¨ªctimas iraqu¨ªes. Seg¨²n la administraci¨®n de medicina forense iraqu¨ª, durante los ¨²ltimos cinco meses han recibido 6.000 cad¨¢veres. Cada d¨ªa, unas 100 familias buscan a sus hijos desaparecidos, secuestrados o muertos en aquel ovacionado infierno. Toma gulash calentito, mona.
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