La Tierra y su clima
La producci¨®n editorial constituye, especialmente en el dominio del ensayo y la historia, un magn¨ªfico indicador de los intereses y preocupaciones de una ¨¦poca. Manifestaci¨®n de este hecho es un desplazamiento que se ha producido en los ¨²ltimos a?os: de una mayor¨ªa de libros centrados en la f¨ªsica y la astrof¨ªsica, a otra de textos dedicados a las ciencias biom¨¦dicas y biol¨®gico moleculares, una circunstancia que se puede entender f¨¢cilmente si tenemos en cuenta que la f¨ªsica, que domin¨® la mayor parte del siglo XX, ha tenido que ceder una parte muy importante de su protagonismo ante el vigor y repercusiones sociales de la biomedicina.
Este mundo biom¨¦dico prosigue su marcha hacia nuevos territorios, en una exploraci¨®n que algunos temen y otros aguardan con ansiedad, con la esperanza de que llegue a tiempo para aliviar los sufrimientos que padecen bien ellos mismos o algunos de los suyos. No es, por tanto, previsible que disminuya el n¨²mero de novedades editoriales que exploren este ¨¢mbito cient¨ªfico. Pero hay otros dominios, que tambi¨¦n tienen que ver con la ciencia, que han irrumpido con fuerza. Con una fuerza, de hecho, que no procede del mero -y maravilloso- deseo de conocer c¨®mo funciona la naturaleza, sino que tiene que ver con el temor a un futuro, acaso muy pr¨®ximo, en el que la naturaleza nos golpee en formas brutales, produciendo cambios sociales de tal calibre que la m¨¢s violenta epidemia o revoluci¨®n pol¨ªtica del pasado parezca una amable y benigna an¨¦cdota. Me estoy refiriendo, claro est¨¢, a la cuesti¨®n, al problema, del cambio clim¨¢tico que, todo parece indicar, est¨¢ afectando a nuestro h¨¢bitat, la Tierra. ?Aumentar¨¢, disminuir¨¢ o se mantendr¨¢ la temperatura de la atm¨®sfera terrestre, y cu¨¢les ser¨ªan las consecuencias en los dos primeros casos? ?Se mantendr¨¢, por ejemplo, la Corriente del Golfo, sin la cual el mundo ser¨ªa muy diferente? ?Sobrevivir¨¢n las pluvisilvas del Amazonas? Son preguntas fundamentales, en las que nos va, por decirlo de alguna forma, la vida, o al menos el futuro.
Los libros objeto de la pre-
sente rese?a forman parte del, cada vez m¨¢s patente, movimiento editorial protagonizado por obras que se ocupan de lo que se sabe en la actualidad sobre la din¨¢mica pasada, presente y futura del clima y de los efectos que tal historia ha tenido, tiene y tendr¨¢ en la Tierra y en la vida, animal y vegetal, que acoge.
El calentamiento global, del historiador de la f¨ªsica Spencer Weart, reconstruye los esfuerzos que se han dedicado a comprender la historia y din¨¢mica del clima terrestre. Su punto de partida son los trabajos del f¨ªsico brit¨¢nico John Tyndall, quien a mediados del siglo XIX se dio cuenta de la importancia que para la temperatura de la atm¨®sfera pod¨ªan tener productos como el gas de hulla, un producto industrial que se utilizaba entonces en el alumbrado. Y del gas de hulla pas¨® al hoy tan conocido -y temido- di¨®xido de carbono. En realidad, lo que Tyndall pretend¨ªa era explicar por qu¨¦ se hab¨ªan producido en el pasado las "eras glaciales" que los ge¨®logos hab¨ªan puesto de manifiesto, en las que grandes regiones de la Tierra hab¨ªan estado sepultadas bajo inmensas capas de hielo. Cuestiones como "efecto invernadero" no le importaban o, mejor dicho, no exist¨ªan para ¨¦l. Pero ya se sabe que los resultados cient¨ªficos poseen vida propia, y aquellas investigaciones de Tyndall resultar¨ªan a la postre el inicio de una carrera cient¨ªfica, pol¨ªtica y social que Weart explica con rigor en su libro. Una carrera larga y complicada, presidida por cuestiones tan complejas que con frecuencia no se dispon¨ªa inicialmente de los instrumentos matem¨¢ticos o experimentales para resolverlas.
Otro libro magn¨ªfico, que todos deber¨ªan leer para comprender que el tiempo se nos agota es el de Tim Flannery, La amenaza del cambio clim¨¢tico. Historia y futuro. Con claridad y buena prosa, en ¨¦l se explican los principales procesos f¨ªsicos que determinan la estructura y din¨¢mica de la atm¨®sfera, y c¨®mo algunas actividades humanas est¨¢n influyendo en ella conduci¨¦ndonos a un m¨¢s que probable cambio clim¨¢tico, que no s¨®lo se manifiesta en aumentos de temperatura sino tambi¨¦n en fen¨®menos, cada vez m¨¢s frecuentes e intensos, del tipo de sequ¨ªas, huracanes (recordemos el reciente Katrina) o p¨¦rdida de ecosistemas oce¨¢nicos como, por ejemplo, los arrecifes de coral. Preocupado no s¨®lo por esbozar la historia del cambio clim¨¢tico y c¨®mo se desarrollar¨¢ ¨¦ste presumiblemente en el futuro sino tambi¨¦n por lo que se puede hacer al respecto, Flannery se ocupa asimismo de cuestiones ¨ªntimamente ligadas al clima como son los medios de transporte y de producci¨®n de energ¨ªa o los convenios internacionales (Protocolo de Kioto).
Y cuando se habla de ener-
g¨ªa, inmediatamente vienen a la mente cosas como poblaci¨®n mundial, reservas de combustibles de origen f¨®sil (el petr¨®leo, por ejemplo) o desarrollo sostenido. Estas cuestiones son ahora lugares comunes, ignoradas por pocos. No lo era as¨ª hace 34 a?os cuando se public¨® un libro que muchos recordamos todav¨ªa (con agradecimiento): Los l¨ªmites del crecimiento, el informe del Club de Roma que anunciaba un futuro sombr¨ªo, en el que escasear¨ªan algunos de los recursos naturales en los que los humanos basamos mucho de nuestro bienestar. Los l¨ªmites del crecimiento 30 a?os despu¨¦s, de Donella Meadows, Jorgen Randers y Dennis Meadows, es una actualizaci¨®n (la tercera de hecho) de aquel informe revolucionario y estremecedor. Una actualizaci¨®n necesaria, que adem¨¢s de revisar datos sobre yacimientos o din¨¢micas del crecimiento hace hincapi¨¦ en la importancia de utilizar todos los recursos de la tecnolog¨ªa moderna para maximizar el rendimiento de nuestros consumos de energ¨ªa.
Homenaje a Gaia, de James Lovelock, es un libro muy diferente a los anteriores. Se trata de la autobiograf¨ªa de un cient¨ªfico e inventor ingl¨¦s muy conocido, que ha dedicado una buena parte de su carrera al estudio de procesos que tienen lugar en la superficie y atm¨®sfera de la Tierra. Especialmente importante en este sentido es el detector de captura de electrones que invent¨® en 1957, y que fue utilizado por Rachel Carson para medir el nivel de pesticidas presentes en la naturaleza, medidas en las que bas¨® su c¨¦lebre libro Primavera silenciosa (1962), al que tanto deben los movimientos ecologistas. De hecho, el propio Lovelock utiliz¨® su instrumento para medir la presencia de clorofluorocarbonos en la atm¨®sfera, siendo los resultados que obtuvo b¨¢sicos para la identificaci¨®n de la aparici¨®n de agujeros en la capa de ozono. Sin embargo, por lo que Lovelock es m¨¢s conocido es por la teor¨ªa que desarroll¨® en la d¨¦cada de 1960, y que, siguiendo el consejo de su amigo el novelista Willian Golding, bautiz¨® como "Gaia", la diosa griega de la Tierra. Seg¨²n esta teor¨ªa, la Tierra se comporta como si fuese un organismo vivo capaz de regular su temperatura y los procesos f¨ªsico-qu¨ªmicos que tienen lugar en ella, para lograr un estado constante y confortable (lo que significa que ante agresiones, como pueden ser emisiones excesivas de gases de efecto invernadero, puede reaccionar de formas que a los humanos resulten "inconvenientes").
En su autobiograf¨ªa, Lovelock explica estos logros, pero tambi¨¦n otros, ya que su carrera -la mayor parte como profesional independiente- ha sido muy diversa y estimulante, cient¨ªfica al igual que personalmente, circunstancia esta que hace que Homenaje a Gaia se lea, no obstante su extensi¨®n, con inter¨¦s, ayudando, al mismo tiempo, a deshacer algunos malentendidos acerca de las aportaciones de su autor.
En cuanto a Ecocidio, de
Franz Broswimmer, y El cambio clim¨¢tico, compilado por Jim Motavalli, son tambi¨¦n obras interesantes, pero de otra clase, no tan "¨²nicas" como las anteriores; esto es, para las que es posible encontrar en la bibliograf¨ªa actual otras alternativas. El mejor es Ecocidio, centrado en la cuesti¨®n de la extinci¨®n de las especies, tal y como ¨¦sta se ha producido en el pasado y se est¨¢ produciendo en el presente. Los datos que ofrece Broswimmer son estremecedores, y deber¨ªan servir de recordatorio a todos que al vivir en una ¨¦poca crucial para el futuro tambi¨¦n tenemos una obligaci¨®n especial con ¨¦l. En otras palabras, con los que vendr¨¢n despu¨¦s de nosotros.
?Tendr¨¢n ¨¦stos, nuestros hijos y los hijos de ¨¦stos, la oportunidad -que nosotros tuvimos- de disfrutar contemplando las maravillas que a¨²n hoy alberga la Tierra? No lo s¨¦, francamente. ?Se ha perdido ya tanto! La Tierra vista desde el cielo, centrada en una serie de fotograf¨ªas a¨¦reas tomadas por Yan Arthus-Bertrand, a las que diversos autores han a?adido textos muy relevantes a todo aquello de lo que estoy hablando aqu¨ª, constituye un magn¨ªfico instrumento para apreciar los cambios que se han y est¨¢n produciendo en nuestro peque?o y querido planeta. Es un libro hermoso, s¨ª, pero no s¨®lo eso. Es, adem¨¢s, una obra que muestra la gran variedad de los medios naturales y de las formas de vida que existen en la Tierra, al igual que el impacto que la actividad humana ha producido ya en ella. Merece la pena leer sus textos y admirar sus fotograf¨ªas.
El calentamiento global. Spencer Weart. Traducci¨®n de Jos¨¦ Luis Gil Arista. Revisi¨®n t¨¦cnica de Alfredo Rueda y Bosco Imbert. Laetoli. Pamplona, 2006. 261 p¨¢ginas. 16,34 euros. La amenaza del cambio clim¨¢tico. Historia y futuro. Tim Flannery. Traducci¨®n de Dami¨¢n Alou. Taurus. Madrid, 2006. 393 p¨¢ginas. 20,64 euros. Los l¨ªmites del crecimiento 30 a?os despu¨¦s. Donella Meadows, Jorgen Randers y Dennis Meadows. Traducci¨®n de Sergio Pawlowsky. Galaxia Gutenberg/ C¨ªrculo de Lectores. Barcelona, 2006. 514 p¨¢ginas. 34,62 euros. Homenaje a Gaia. James Lovelock. Traducci¨®n de Jos¨¦ Luis Gil Aristu. Revisi¨®n de Pilar Gil Ruiz. Laetoli. Pamplona, 2005. 550 p¨¢ginas. 21,15 euros. Ecocidio. Franz J. Broswimmer. Traducci¨®n de Francisco P¨¢ez de la Cadena. Revisi¨®n de Joandom¨¨nec Ros. Laetoli. Pamplona, 2005. 318 p¨¢ginas. 19,23 euros. El cambio clim¨¢tico. Jim Motavalli (compilador). Traducci¨®n de Yolanda Fontal. Paid¨®s. Barcelona, 2005. 271 p¨¢ginas. 14,42 euros. La Tierra vista desde el cielo. Yan Arthus-Bertrand y otros. Lunwerg Editores. Barcelona/Madrid, 2006. 439 p¨¢ginas. 71,22 euros.
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