Pujol alienta a CiU a reivindicar el Estatut aprobado en el Parlament

Converg¨¨ncia i Uni¨® reuni¨® ayer en Barcelona a un centenar de ex dirigentes de la formaci¨®n en un acto en defensa del nuevo Estatuto y para demostrar que toda la familia nacionalista, la hist¨®rica y la actual, considera fundamental votar s¨ª en el refer¨¦ndum. El ex presidente Jordi Pujol defendi¨® el texto que se someter¨¢ a votaci¨®n, porque supone un "gran avance" para Catalu?a, pero alert¨® de que CiU debe tener como "referente" de sus aspiraciones de autogobierno el Estatuto aprobado en el Parlament. Miquel Roca asegur¨® que votar¨¢ s¨ª con "entusiamo", pero admiti¨® que dud¨® sobre la conveniencia de la reforma.

El eslogan de campa?a de Converg¨¨ncia i Uni¨® reza ?1979 o el futuro? y en sus carteles aparecen im¨¢genes del a?o en que se aprob¨® el nuevo Estatuto: un Seat 600, un billete de 100 pesetas con el retrato de Manuel de Falla, una vieja m¨¢quina de escribir... Y ayer, como lo defini¨® el propio Jordi Pujol, CiU reuni¨® a esa "quinta del seiscientos", m¨¢s de 250 dirigentes y ex dirigentes de la federaci¨®n nacionalista, agrupados en torno del que fue su presidente durante 23 a?os y de su actual l¨ªder, Artur Mas. Y el mismo d¨ªa en que Pujol cumpl¨ªa 76 a?os.

Un acto de autoafirmaci¨®n y de reivindicaci¨®n para hacer patente que CiU, durante las m¨¢s de tres d¨¦cadas al frente de la Generalitat, nunca dijo no a cualquier avance del autogobierno catal¨¢n. Y este Estatuto supone, subrayaron todos los oradores, una "mejora sustancial", sobre todo, afirm¨® Pujol, en "competencias, lengua y financiaci¨®n".

A pesar de cantar las excelencias de la reforma, el ex presidente defendi¨® el texto original aprobado el 30 de septiembre en el Parlament. Un Estatuto que, si bien apunt¨® que "debe durar unos cuantos a?os", ha de ser el "referente" de autogobierno para la federaci¨®n nacionalista. "Una cosa es lo que conseguimos y otra es la meta que nos marcamos", se?al¨®.

Jordi Pujol defendi¨® la estrategia que aplic¨® Artur Mas de aprobar un Estatuto "ambicioso" en Catalu?a para despu¨¦s ser "recortado en Madrid" y, de esta manera, no cometer, dijo, "el mismo error que con el Estatuto de Sau que lo recortamos nosotros mismos".

Aunque el ex presidente centr¨® su discurso en el refer¨¦ndum, no faltaron cr¨ªticas veladas al tripartito catal¨¢n y a la necesidad de que Artur Mas y CiU vuelvan a dirigir la Generalitat tras las auton¨®micas de oto?o. As¨ª, advirti¨® del "rid¨ªculo y desprestigio como pa¨ªs" en el que caer¨ªa Catalu?a si ganase el no el 18-J despu¨¦s, dijo, del "coste importante que ha tenido la negociaci¨®n y de algunos hechos e im¨¢genes que han dado algunos". "Ser¨ªa un batacazo tremendo para nuestra autoestima", a?adi¨®.

Pujol acab¨® su intervenci¨®n instando a la actual direcci¨®n de CiU a continuar asumiendo el liderazgo de la pol¨ªtica catalana y aconsej¨®: "Catalu?a ha de encontrar a alguien, una propuesta, un proyecto y un estilo que utilice el instrumento que supone el nuevo Estatuto y que le permita dar un salto adelante. Pero primero hay que votar s¨ª".

El discurso del ex secretario general de Converg¨¨ncia y ex presidente del grupo de CiU en el Congreso, Miquel Roca, fue sin duda el que m¨¢s ovaciones recibi¨®. Admiti¨® que ten¨ªa dudas sobre la idoneidad de la reforma pero que, una vez conocido el contenido del Estatuto, votar¨¢ s¨ª "con convicci¨®n, ilusi¨®n y entusiasmo" porque, apunt¨®, "toda la vida" ha querido "votar s¨ª a Catalu?a". Roca se convirti¨® en el ariete contra Esquerra Republicana, a cuyos dirigentes anim¨®, ir¨®nicamente, a conseguir "la independencia de Catalu?a de la mano del PP".

Y meti¨® a la formaci¨®n en el lado de los partidos catalanes de la "esquizofrenia", frente a los "sensatos". "Est¨¢n donde est¨¢n gracias a todo lo que se ha hecho hasta ahora, y este orgullo no nos lo van a sacar".

Entre los asistentes destacaron Maci¨¤ Alavedra, Arcadi Calzada, Llibert Quatrecasas, Josep Gomis, Jona Rigol, Antoni Subir¨¤, Llu¨ªs Alegre, Josep Manuel Bas¨¢?ez y Josep Llu¨ªs Vilaseca. Faltaron, por ejemplo, Josep L¨®pez de Lerma, Josep Maria Cullell y Josep Mir¨® i Ard¨¨vol, que reclama el no desde la asociaci¨®n E-cristians.