De Australia al Bar?a
Neeskens, ayudante de Hiddink, regresa al Camp Nou como asistente de Rijkaard
Vio el lunes en Francfort c¨®mo Australia goleaba en los ¨²ltimos minutos al Jap¨®n de Zico y ayer por la ma?ana vol¨® en un viaje rel¨¢mpago a Barcelona para rubricar su futuro. Johan Neeskens, ayudante del seleccionador de Australia Guus Hiddink, firm¨® ayer un contrato con el Bar?a por tres temporadas como ayudante de Frank Rijkaard, a quien le une una estrecha amistad desde que coincidieron ambos en la selecci¨®n oranje en el periodo 1998-2000. Considerado uno de los mitos azulgrana desde que abandon¨® el Camp Nou en 1979, el holand¨¦s asumir¨¢ la funci¨®n que dej¨® vacante su compatriota Henk ten Cate, ahora nuevo entrenador del Ajax. "Cuando recib¨ª la oferta del Bar?a no tuve que pensarlo mucho", revel¨® Neeskens, que tambi¨¦n fue tentado tanto por la federaci¨®n australiana para seguir con su actual relaci¨®n despu¨¦s del Mundial como por Hiddink, que ser¨¢ nombrado al t¨¦rmino del torneo seleccionador de Rusia.
Hiddink es un trotamundos dispuesto a vivir en Se¨²l, Sydney o dentro de poco en Mosc¨². Pero a Neeskens, que tiene un hijo, Christian, economista, que reside en Barcelona, le han tirado m¨¢s las ganas de "volver a casa". "Aqu¨ª pas¨¦ cinco a?os que fueron los mejores de mi carrera deportiva. Estoy content¨ªsimo. Cualquier persona quiere trabajar aqu¨ª", se?al¨® despu¨¦s de llegar sobre las 18.00 horas al Camp Nou, acompa?ado de un sonriente Joan Laporta, con hora y media de retraso sobre el horario previsto. Ten¨ªa el tiempo justo para tomar el avi¨®n de vuelta a Alemania, que part¨ªa a las 19.20.
El club achac¨® las prisas a que ambas partes, que acudieron a comer a un restaurante del centro de Barcelona, ten¨ªan que acabar de perfilar y revisar la documentaci¨®n del nuevo contrato. Fue casi un visto y no visto. Neeskens se hizo las fotograf¨ªas oficiales al mediod¨ªa, asisti¨® a la comida con los dirigentes del club, estuvo unos minutos ante la prensa y se fue corriendo de vuelta a Francfort. Un autom¨®vil del club le aguard¨® ante la sala VIPS para conducirlo en un veh¨ªculo con los cristales ahumados hasta el aeropuerto de El Prat de Llobregat. La prisa no dej¨® lugar a la nostalgia. La figura de Neeskens, un ¨ªdolo azulgrana en la d¨¦cada de los 70, inconfundible por su entrega, su melena rubia y sus medias blancas, siempre quedar¨¢ asociada en el imaginario azulgrana a la plaza de Sant Jaume y a la celebraci¨®n de la final de la Recopa ganada por el Bar?a en Basilea en 1979. Todo el mundo sab¨ªa que el holand¨¦s, cuya llegada supuso que Hugo Cholo Sotil tuviera que dejar su plaza en el equipo, iba a abandonar el club y ¨¦ste no pudo reprimir las l¨¢grimas en el balc¨®n de la Generalitat cuando miles de aficionados gritaron Neeskens s¨ª, N¨²?ez no. Su marcha desatar¨ªa despu¨¦s la primera crisis del entonces nuevo presidente, elegido solo un a?o antes. "No quiero pensar en aquellos momentos, aunque fue duro y triste. Pero esas cosas pasan en el f¨²tbol. El club quer¨ªa que siguiera un a?o y yo, que tengo la cabeza muy dura, quer¨ªa tres. No nos pusimos de acuerdo y ya est¨¢. Pero nadie tuvo la culpa", dijo sin mostrar rencor alguno.
Nadie le ahorr¨® elogios. Rijkaard felicit¨® a su compatriota por la victoria sobre Jap¨®n y le tild¨® de "aut¨¦ntico crack". "Tiene una mentalidad ganadora y prueba de ello son los t¨ªtulos que ha conseguido", dijo en alusi¨®n a sus ¨¦xitos en el Ajax. "Funcionamos muy bien juntos cuando estuvimos juntos en la selecci¨®n holandesa". Laporta dio la bienvenida al holand¨¦s y, posiblemente, en las pr¨®ximas horas har¨¢ lo propio con Gudjohnsen, el delantero island¨¦s del Chelsea que est¨¢ a un paso de firmar por el Bar?a por las pr¨®ximas cuatro temporadas y cuya llegada vendr¨ªa a ocupar la plaza que deja vacante el goleador sueco Larsson, que regresa a su pa¨ªs.
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