Zapatero y Kirchner intentan normalizar la relaci¨®n entre Madrid y Buenos Aires
Los dos mandatarios ver¨¢n hoy en privado el partido de Argentina en el Mundial de f¨²tbol
El presidente argentino, N¨¦stor Kirchner, inici¨® ayer una visita a Espa?a -la cuarta en tres a?os- que est¨¢ llamada por las dos partes a consolidar la normalizaci¨®n de unas relaciones muy condicionadas en tiempos recientes por el hundimiento del peso y los sucesivos cambios del marco econ¨®mico y legal asociados a los relevos del poder en Argentina. El presidente Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero espera ahora que su hu¨¦sped reconozca que la crisis est¨¢ superada y flexibilice, en consecuencia, su actitud hacia los empresarios espa?oles.
Kirchner no oculta que quiere una moratoria para el pago de la deuda de su pa¨ªs con Espa?a, cercana a los 800 millones de euros, y m¨¢s inversiones. Se lo dijo a Zapatero en Viena, el pasado mes de mayo, durante la Cumbre UE-Am¨¦rica Latina. Repsol acababa de anunciar que quiere reducir su participaci¨®n en la argentina YPF, y Kirchner reaccion¨® reafirmando su inter¨¦s en esta empresa espa?ola y sugiri¨¦ndole a Zapatero que est¨¢ dispuesto a ofrecerle nuevas prospecciones.
Ahora est¨¢ previsto que la petrolera presente nuevos planes en Argentina, durante esta visita presidencial que tiene un contenido eminentemente econ¨®mico. Con una inversi¨®n acumulada cercana a los 30.000 millones de euros, Espa?a es el segundo inversor en el pa¨ªs austral, tras EE UU.
M¨¢s all¨¢ de los problemas de contratos y tarifas derivados de esa situaci¨®n, por la que las principales empresas espa?olas de servicios operan para los argentinos, entre Zapatero y Kirchner no hay problemas pol¨ªticos. Pero est¨¢ claro que las vicisitudes de la vida econ¨®mica tienen que influir en sus relaciones.
En julio de 2003, cuando el presidente argentino visit¨® por primera vez Espa?a, ech¨® una bronca innecesariamente despectiva a la flor y nata de nuestras multinacionales. Dej¨® un mal sabor de boca, que corrigi¨® en enero de 2004, sin regatear elogios y expresiones de agradecimiento.
Al d¨ªa de hoy, algunos de los contenciosos, como el de Aguas de Barcelona, son ya un pasado negativo, pues la empresa perdi¨® sus negocios en Buenos Aires. Otros, como la subida de tarifas que Gas Natural pide desde hace a?os, parecen pr¨®ximos a ser resueltos, mientras que a las nuevas tarifas de Telef¨®nica y Endesur (filial de Endesa) en la zona, s¨®lo les falta la firma. Los empresarios espa?oles no acaban, sin embargo, de sentirse c¨®modos en un marco que hasta ahora ha tenido mucho de imprevisible.
Todo ello ser¨¢ abordado entre hoy y ma?ana, en un programa algo at¨ªpico para este tipo de encuentros. El presidente argentino lleg¨® ayer acompa?ado de su esposa, su jefe de gabinete y cuatro ministros (de Exteriores, Econom¨ªa, Planificaci¨®n y Educaci¨®n) con la idea de permanecer en Madrid hasta el domingo para realizar una agenda que incluye dos citas esenciales: la entrevista, hoy, con el rey Juan Carlos, seguida de un almuerzo en el Palacio Real al que tambi¨¦n asistir¨¢ Zapatero, y la reuni¨®n de trabajo de ma?ana de ambos presidentes, previa a una cena en La Moncloa, con sus esposas y s¨¦quito.
En el escalaf¨®n oficial de estas visitas de l¨ªderes extranjeros -que pueden ser de Estado, oficiales, de trabajo o privadas- esta Kirchner, acordada durante la Cumbre Iberoamericana de Salamanca en octubre pasado, ha quedado clasificada entre lo oficial y lo privado. Y no ha sido el Gobierno espa?ol el que ha escatimado medios para darle m¨¢s realce protocolario, sino el visitante argentino, que ha pedido la flexibilidad adecuada a un periodo en el que la actualidad internacional parece dominada por el f¨²tbol.
M¨¢ximo rango
Como parte de su programa m¨¢s privado, Kirchner es esperado, de hecho, esta noche en La Moncloa, a la hora en que normalmente se hace la cena de gala, para ver con Zapatero el partido entre Argentina y Holanda. El ex canciller alem¨¢n Gerhardt Schr?der ya utiliz¨® esta diplomacia de pies sobre la mesa, cerveza, televisor y f¨²tbol, con el ex presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, durante los d¨ªas m¨¢s tensos de la invasi¨®n de Irak. Cabe recordar que no tuvo mucho ¨¦xito.
Tras el paso por las Cortes y el Ayuntamiento de Madrid, que completa el programa oficial habitual de los visitantes extranjeros, Kirchner dedicar¨¢ a los empresarios el grueso de sus actividades privadas. Hoy recibir¨¢ en el palacio del Pardo, donde se le ha asignado la residencia que corresponde a las visitas de m¨¢ximo rango, al presidente de Repsol, Antonio Brufau, y probablemente a alg¨²n otro jefe de alguna multinacional. Tambi¨¦n ir¨¢ a visitarle la comisi¨®n ejecutiva de la CEOE.
Ma?ana, intervendr¨¢ en un almuerzo organizado por el consejo superior de C¨¢maras de Comercio, en el que se espera a un centenar de empresarios espa?oles y a dos docenas de argentinos, que han venido para el evento.
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