Un museo para amar el arte
Cuenca celebra los 40 a?os de la colecci¨®n de Z¨®bel en las Casas Colgadas
Con champa?a y langostinos se abri¨® el 30 de junio de 1966 el Museo de las Casas Colgadas en Cuenca. Una inauguraci¨®n oficial de 15 minutos con seis personas, entre ellas el alcalde, el gobernador civil y los pintores Fernando Z¨®bel, que aportaba su colecci¨®n de artistas espa?oles de los a?os cincuenta, y Gustavo Torner, los nombres que hab¨ªan hecho posible la aventura de mostrar arte contempor¨¢neo en la Espa?a franquista de los sesenta. Antes de la cena, unos setenta invitados, entre artistas, galeristas y amigos, se hac¨ªan una foto de familia en las escaleras que daban acceso a las 36 piezas de artistas como Sempere, Millares, Rueda, Torner, T¨¤pies, Z¨®bel, Saura, Momp¨®, Chillida, Guerrero, Feito, Rivera, Chillida, Palazuelo, Chirino, Cuixart.
Gustavo Torner cree que el museo actual "est¨¢ mejor que nunca"
Javier Gom¨¢ destaca la originalidad de la propuesta en tiempos de "sordidez" cultural
La fotograf¨ªa de Fernando Nu?o figura en la exposici¨®n documental La ciudad abstracta. 1966, el nacimiento del Museo de Arte Abstracto Espa?ol, inaugurada ayer en las salas temporales del museo para conmemorar el 40? aniversario de la creaci¨®n de un museo unido a la ciudad de Cuenca, donde lleg¨® a vivir una docena de artistas de nombre internacional, y al conocimiento del arte actual.
Gustavo Torner se mov¨ªa ayer entre los 300 invitados que durante todo el d¨ªa recorrieron la colecci¨®n permanente, que ya tiene 123 obras entre pinturas y esculturas y tres vitrinas con libros de apuntes de Z¨®bel, tras la ampliaci¨®n de 1978 y la donaci¨®n de la misma por parte de Z¨®bel a la Fundaci¨®n Juan March (www.march.es), que desde 1980 gestiona y ampl¨ªa sus fondos y organiza exposiciones en su circuito de Madrid-Cuenca-Palma de Mallorca.
"Fernando [Z¨®bel] no quer¨ªa un museo hist¨®rico, sino un museo para amar el arte", declara Torner, que al saber la decisi¨®n del pintor en 1962 de reunir en un centro su colecci¨®n de artistas espa?oles de los cincuenta y sesenta, y tras un primer intento fallido de situarlo en Toledo, logr¨® que se utilizaran las Casas Colgadas, un conjunto de edificios medievales sobre la hoz del r¨ªo Hu¨¦car que en aquellos momentos estaba rehabilitando el Ayuntamiento.
Al proyecto se unieron Gerardo Rueda, Eusebio Sempere y Antonio Lorenzo, hasta ver montada la colecci¨®n de Z¨®bel, un personaje singular, nacido en Manila, educado en Suiza y Harvard, viajero, que compraba obras a los artistas y en galer¨ªas, con preferencia por las gentes de El Paso y otros artistas abstractos e informalistas. Materiales originales de Z¨®bel se pueden ver en la exposici¨®n Filipiniana (Centro Cultural Conde Duque, de Madrid, hasta el 24 de septiembre).
Torner cree que el museo actual "est¨¢ mejor que nunca", con una colecci¨®n permanente que recuerda el primer montaje, "en una cronolog¨ªa que no es dogm¨¢tica", que para muchas generaciones ha sido su "bautismo" en el arte contempor¨¢neo, sin otra referencia que el Reina Sof¨ªa, de Madrid, en los a?os ochenta. La historia del museo que quer¨ªa Z¨®bel, "refinado pero no lujoso, con la sensibilidad italiana y la frialdad norteamericana", seg¨²n Torner, se refleja en los carteles, pinturas, fotos, cartas, documentos, objetos, audiovisuales, materiales de archivo y una selecci¨®n de la obra gr¨¢fica, una actividad pionera desde sus comienzos, con las entradas y carpetas de varios artistas de la colecci¨®n, una tradici¨®n que sigue en este aniversario con una carpeta de cuatro grabados de Corujeira, Ortega, Reguera y Verbis, y una edici¨®n limitada de facs¨ªmiles de ocho p¨¢ginas de algunos de los cuadernos de apuntes y dibujos de Z¨®bel. Tambi¨¦n figuran libros de artistas, de autores representados en las salas, como Saura, Torner, T¨¤pies y Chillida.
"La exposici¨®n es el museo", se?ala Manuel Font¨¢n, director del museo y de las exposiciones de la Fundaci¨®n Juan March, que ha montado una muestra de gabinete como pr¨®logo a la colecci¨®n permanente que recorre el laberinto de las tres plantas de las Casas Colgadas. "Es un museo muy singular, porque se crea por un coleccionista privado, un artista, hombre culto, mecenas y emprendedor, es tem¨¢tico de las corrientes abstractas e informalistas y est¨¢ impulsado por los artistas. Este proyecto sirve tambi¨¦n para investigar sobre la propia historia del museo, que cuenta de una forma discreta su singularidad en la Espa?a de los sesenta y que al cabo de 40 a?os conserva una serena juventud".
El director de la Fundaci¨®n Juan March, Javier Gom¨¢, tambi¨¦n destaca la originalidad de la propuesta del museo en tiempos de "sordidez" cultural. "La exposici¨®n pretende destacar las caracter¨ªsticas de modernidad y transgresi¨®n en la Espa?a de ese tiempo, que se convierte en un museo hist¨®rico que sigue vigente", declara. Los textos del cat¨¢logo completan la visi¨®n del museo, con ensayos de Santos Juli¨¢ sobre la Espa?a de 1966, de Mar¨ªa Bola?os sobre los comienzos de un peque?o museo moderno, de ?ngeles Villalba sobre la personalidad de Z¨®bel, de Juan Manuel Bonet sobre el arte de esos a?os, que se completa con un perfil testimonial de Z¨®bel por el pintor Antonio Lorenzo y una larga conversaci¨®n con el artista conquense Gustavo Torner, que cerca del museo tiene su propio Espacio Torner, en la iglesia de san Pablo. La exposici¨®n estar¨¢ abierta hasta el 17 de diciembre.
Javier Gom¨¢ cree que el museo (que el a?o pasado recibi¨® 39.542 visitantes) se podr¨¢ convertir en los pr¨®ximos a?os en la segunda sede de la metr¨®polis, con una ciudad m¨¢s cercana con el AVE y la autopista. El futuro incluye la ampliaci¨®n de las instalaciones hacia la zona subterr¨¢nea de la plaza de Ronda, seg¨²n la propuesta del consorcio de la ciudad tras un amplio debate ciudadano, en la misma zona del casco antiguo donde se situar¨¢ un ascensor para enlazar con la ciudad nueva. La ciudad abstracta defiende el futuro de un museo creado para amar el arte.
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