Las supersticiones de Zagallo

Zagallo est¨¢ seguro de que Brasil ser¨¢ campe¨®n del Mundial, no porque tenga a los mejores jugadores del mundo, y s¨ª porque su equipo empez¨® a jugar en un martes, 13 de junio, d¨ªa de San Antonio, de quien se confiesa devoto, hasta el punto de esgrimir una estampita suya ante los medios durante una rueda de prensa mientras avisaba: "San Antonio nos protege". Zagallo, que ya gan¨® cuatro Mundiales, dos como entrenador y dos como jugador, no tiene duda de que la canarinha gan¨® el primer partido porque la suma del n¨²mero de letras de las palabras Brasil, 6, y Croacia, 7, da 13. El n¨²mero 13 significa suerte y victoria para el veterano coordinador t¨¦cnico de la canarinha. El pasatiempo de Mario Lobo Zagallo, de 74 a?os, es combinar palabras y fechas que sumadas tengan 13 letras. M¨¢s que pasatiempo, la c¨¢bala es una obsesi¨®n supersticiosa.

Vive en en la 13? planta de un rascacielos, fue a la escuela 13 a?os y jug¨® con el n¨²mero 13

"Estoy aqu¨ª porque quiso san Antonio. Fui a verle y me dijo: 'Ya est¨¢s bien, ve a Alemania"

Zagallo sigue al n¨²mero 13 como si fuera el Santo Grial de la suerte. Todo lo que lleve el 13 le da buenos augurios. Por eso vive en la 13? planta de un rascacielos en R¨ªo de Janeiro, su coche favorito tiene la matr¨ªcula 0013, fue a la escuela durante 13 a?os para formarse como t¨¦cnico de contabilidad y siempre jug¨® con el n¨²mero 13, tanto en sus clubes como en la selecci¨®n brasile?a, desde que se cas¨® con Alcina el 13 de enero de 1955, y ¨¦sta le pidi¨® que cambiara la zamarra n¨²mero 6 del Flamengo por la del 13. Hasta entonces la carrera de Zagallo fue renqueante y sin t¨ªtulos, pero todo cambi¨® con el 13 a cuestas. Llegaron los t¨ªtulos, tantos que Zagallo es el hombre con m¨¢s historia en el f¨²tbol brasile?o. Excelente extremo izquierdo y despu¨¦s t¨¦cnico aguerrido, ha participado de la conquista de los cinco t¨ªtulos mundiales, de una u otra manera. Seleccionador en Francia 98, cuando Brasil perdi¨® con el cuadro anfitri¨®n, Zagallo habl¨® ayer de que ahora las cosas han cambiado mucho: "Jugamos petrificados por el problema que afect¨® a Ronaldo. Ahora, Ronaldo est¨¢ bien y Zidane est¨¢ bien. Veremos qui¨¦n gana", dijo el amante de los n¨²meros a quien Ronaldo trae suerte: Su nombre suma siete letras.

En Alemania, la FIFA ten¨ªa previsto que el partido de estreno de Brasil fuera el d¨ªa 9 de junio pero lo cambi¨® para el d¨ªa 13. El retraso del partido alegr¨® a Zagallo que empez¨® autom¨¢ticamente a acordarse de las victorias de Brasil en Mundiales en el d¨ªa 13: 6-1 contra Espa?a (13 de junio de 1950), 4-2 contra Chile (13 de junio de 1962), 1-0 contra Suecia (13 de julio de 1994) y el 5-2 contra Costa Rica (13 de junio de 2002). En este ¨²ltimo partido del Mundial de Jap¨®n y Corea, debut¨® con la selecci¨®n brasile?a un jovenc¨ªsimo Kak¨¢, con 19 a?os. Cuatro a?os despu¨¦s, el d¨ªa 13 de junio de 2006, Zagallo no ten¨ªa dudas que Kak¨¢ iba a ser la gran figura del Mundial. En la ya famosa v¨ªdeo conferencia del presidente de Brasil Lula da Silva con su selecci¨®n, donde Lula preguntaba si Ronaldo estaba gordo, Zagallo pirope¨® a su presidente. Le dijo que Brasil iba ser campe¨®n porque "el PT es 13 y Santo Antonio tambi¨¦n es 13" en referencia al n¨²mero que identifica el Partido de los Trabajadore en las papeletas electorales.

El profesor Zagallo, como le llaman los jugadores, es el coordinador t¨¦cnico de la selecci¨®n, pero no participa activamente de los entrenamientos. Su cuerpo qued¨® muy debilitado despu¨¦s que le extirparan, hace un a?o, un tumor benigno en el aparato digestivo. Desde entonces suele decir que el 7 tambi¨¦n le trae suerte. No en vano, su nombre Zagallo, tiene siete letras. Estuvo muy cerca de la muerte. En los 39 d¨ªas que estuvo hospitalizado, Zagallo recibi¨® un sinf¨ªn de homenajes, pero el que m¨¢s le emocion¨® fue en el Maracan?. El modesto equipo Treze (13 en portugu¨¦s), club del pobre estado de Para¨ªba, antes de jugar contra el Fluminense, se pase¨® por el campo con una pancarta "El Trece est¨¢ contigo".

El viejo Lobo, con 74 a?os, cuatro hijos y cinco nietos, asegur¨® que entr¨® en el estadio de Berl¨ªn "con la misma emoci¨®n que cuando vest¨ª por primera vez la camiseta de Brasil en el 4 de marzo de 1958". Y no pierde la oportunidad de recordar que fue campe¨®n mundial por primera vez en 1958 porque "5 + 8 son 13".

En su vida, s¨®lo una cosa no consigui¨® Zagallo: ense?arle a Ronaldo a dar el ¨²ltimo pase, su obsesi¨®n en el Mundial de los Estados Unidos. "No s¨®lo tiene calidad para el gol. Si aprende a relacionarse con los compa?eros ser¨ªa a¨²n m¨¢s grande", repet¨ªa cuando a¨²n estaba a tiempo de moldear a quien todav¨ªa era Ronaldinho. No lo logr¨®. Ronaldo prefiri¨® dedicarse s¨®lo al gol. Pero el martes se abraz¨® emocionado al fen¨®meno al final del partido en el que logr¨® batir el r¨¦cord de M¨¹ller. Ronaldo tiene siete letras y como suele decir el viejo Lobo "para meter goles, hay que tener suerte".

"Estoy aqu¨ª porque quiso San Antonio", explica Mario Lobo, hombre de car¨¢cter imprevisible, a veces tierno, en ocasiones excesivamente temperamental. "Fui a verle dos veces y me dijo: 'ya est¨¢s bien, puedes viajar para Alemania". Cree que la selecci¨®n brasile?a le da fuerzas para seguir adelante y garantiza que la ¨²nica diferencia respecto a otros mundiales es que tiene una cicatriz "con trece puntos de sutura en la barriga".