"Brasil s¨ª nos respeta"

"Somos viejos, pero pacientes", dice Raymond Dom¨¦nech con la vista puesta en Brasil. Entre Makelele y Vieira, el cemento de Francia, suman 63 a?os. Y mucha paciencia. Sobre todo, con el propio Dom¨¦nech. Vieira, a pesar de ser un c¨¢ncer, el signo predilecto del entrenador, ha jugado como interior derecho hasta el comienzo del campeonato. Y Makelele entraba y sal¨ªa del equipo sin que se supiera muy bien el grado de confianza que ten¨ªa en ¨¦l.

A ninguno de los dos les entretienen demasiado los aficionados que se agolpan en las pr¨¢cticas del equipo. La deslumbrante figura de Rib¨¦ry, el ¨²nico con m¨¢s camino por recorrer que recorrido, les permite acercarse a las vallas y bromear sin que nadie les incordie mucho. La prensa francesa tampoco ha sido muy devota de ninguno de los dos. A Makelele le ha ignorado. A Vieira, peor: le ha criticado con insistencia.

Makelele, el hombre capaz dar la vuelta al mundo en 90 minutos, advierte de que los brasile?os "s¨ª" les "respetan" y "no se van a tomar a la ligera a Francia": "Saben de lo que somos capaces". Lo dice, quiz¨¢, como un recuerdo del escaso valor que les otorgaron los espa?oles antes de perder contra ellos.

Francia ha ganado sus ¨²ltimos dos partidos. En ambos, la FIFA escogi¨® al medio del Juventus de origen senegal¨¦s como el mejor jugador. En ninguna de las dos ocasiones ha querido Vieira tomarse la revancha. "Ahora es nuestro momento, pero no conviene alzar la voz", susurra prudente. Tan prudente que renunci¨® a su brazalete de capit¨¢n en favor de Zidane cuando ¨¦ste decidi¨® regresar al equipo. Tampoco, pese a su veteran¨ªa y peso espec¨ªfico, es uno de los conspiradores del vestuario.

Sin embargo, Dom¨¦nech tiene una relaci¨®n ambivalente con ¨¦l. "Sostengo que va a ser uno de los mejores jugadores del Mundial", coment¨® cuando los medios criticaban al futbolista con mucha dureza. Despu¨¦s, no ha querido destacarle especialmente: "Siempre digo lo mismo: somos 23".

Vieira lleg¨® al Mundial lesionado y ha tenido que seguir un plan de entrenamientos espec¨ªfico con un fisioterapeuta. "Ahora es cuando me encuentro bien de verdad", anunci¨® el pasado jueves; "el equipo, adem¨¢s, se siente liberado despu¨¦s de la victoria contra Espa?a. Antes lo hemos pasado muy mal".

Ciertamente, la concentraci¨®n francesa, en Hamelin, no ha sido precisamente una balsa de aceite.

Claro que la liberaci¨®n puede que no alcance para derrotar a Brasil. Todos los futbolistas franceses han resaltado la fortaleza de su rival. "Cuando paran un rato en el autob¨²s, se ponen a jugar al f¨²tbol", dice de ellos Henry para describir hasta que punto "el juego es parte de su naturaleza". "Brasil hace so?ar, pero nosotros no estamos para sue?os", concluye el delantero del Arsenal.