Calurosa acogida en M¨¦rida a 'Calipso', un divertimiento basado en 'La Odisea'
Calipso, espect¨¢culo con el que se inaugur¨® el pasado jueves la 52? edici¨®n del Festival de Teatro Cl¨¢sico de M¨¦rida, fue lo que sus creadores ven¨ªan anunciando hace semanas: un divertimento o parodia mitol¨®gico-l¨ªrico-burlesca sobre un pasaje de La Odisea, texto que es pr¨¢cticamente un eje tem¨¢tico en la muestra emeritense, que ofrecer¨¢ cuatro visiones distintas sobre el viaje hom¨¦rico. El p¨²blico lo recibi¨® como tal y despu¨¦s de re¨ªrse durante toda la representaci¨®n y a pesar de fallos con el sonido, aplaudi¨® en pie calurosamente al director ?ngel Roger; al autor de la versi¨®n, Pedro V¨ªllora; a los actores, entre los que se encontraban Paco Valladares, Las Virtudes y Tonino, as¨ª como a la orquesta y al resto del equipo.
Calipso, tambi¨¦n llamado Aventuras y desventuras de una joven ninfa, es una recreaci¨®n contempor¨¢nea de El joven Tel¨¦maco, obra de Eusebio Blasco con m¨²sica de Jos¨¦ Rogel estrenada en 1866 y con la que se inaugur¨® el Teatro de los Bufos Madrile?os, situado en el Teatro Variedades de Madrid. Aunque la trama no es otra que el viaje que Tel¨¦maco, hijo de Ulises, realiza en busca de su padre y sus encuentros con ninfas y diosas, en el montaje emeritense se pone de relieve que Blasco se inspir¨® m¨¢s que en Homero en Fenel¨®n (quien recre¨® La Odisea en el siglo XIX), ya que se trufan dioses y mitos griegos con los romanos hasta el punto de que en la versi¨®n de V¨ªllora la diosa Calipso termina cas¨¢ndose con la diosa Minerva (un delicioso Valladares travestido) "ya que los tiempos lo permiten".
No es ¨¦se el ¨²nico aggiornamento del texto, que est¨¢ repleto de miradas ir¨®nicas sobre el entorno. Aunque tambi¨¦n se respetan cosas del original, a pesar de que muchos espectadores pensaban que eran cosecha del responsable de la versi¨®n. Y es que Blasco hac¨ªa referencias al aburrimiento que produc¨ªan los editoriales de los peri¨®dicos o apuntaba en un di¨¢logo: "Encontramos una tierra extra?a, no parec¨ªa Espa?a y era Catalu?a". Tanto entonces como ahora, la actualidad transformaba permanentemente este tipo de obras, algo comprobable en las cinco ediciones distintas que hizo el propio Blasco.
Quien no recogi¨® su ¨¦xito la noche del jueves fue la ausente figurinista Helena Kri¨²kova. Su vestuario, que emana aromas coloristas cercanos a los creados por Leon Bakst para Los Ballets Rusos de Diagilev, fue especialmente elogiado.
Roger, que agradeci¨® especialmente la acogida del p¨²blico pues era consciente de los fallos que hubo con el sonido, comentaba tras el estreno: "Lo que me gustar¨ªa es que se haya visto el intento de hacer una obra fuera de repertorio con un reparto extra?o, no l¨ªrico, con el objetivo de ahondar en ese sentido bufo y de divertimento". El director defiende defiende su reparto a medio camino entre lo cabaretero, la revista y lo estrictamente l¨ªrico. Tambi¨¦n ha contado con cantantes profesionales, entre otros Marco Moncloa y Susana Casas, en los papeles de Tel¨¦maco y Venus, respectivamente, a los que el p¨²blico dedic¨® ovaciones, al igual que a la orquesta de 38 profesores dirigida por Montserrat Font y que forma parte de la Compa?¨ªa Dolores Marco.
Roger, que debuta como director esc¨¦nico y posee un amplio curr¨ªculo como cantante l¨ªrico, actor, investigador teatral y traductor, deja claro que lo que ha hecho es un teatro musical que en su d¨ªa imitaba a las ¨®peras bufas tan de moda en la Europa de 1866: "Creo que mi generaci¨®n est¨¢ obligada a revisitar estas piezas y darles una nueva mirada, o una patada si hace falta, pero lo que no puede ser es la globalizaci¨®n cultural tem¨¢tica, no es sana y tenemos derecho y deber de mirarnos a nosotros mismos".
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