Raica Oliveira
Aunque el t¨®pico y el cine digan lo contrario, en los concursos de belleza no s¨®lo triunfa quien gana. Las finalistas pueden acabar teniendo carreras mucho m¨¢s rentables que las que se llevan el primer premio. Raica Oliveira fue segunda en el Elite Model Look internacional de 1999. ?Alguien se acuerda de Vika Semenstova? Pues fue la ucrania de 14 a?os que le arrebat¨® el cetro a esta brasile?a que entonces ten¨ªa 15. Escapando al destino de segundona, Raica fue la revelaci¨®n de las pasarelas y alcanz¨® la fama al protagonizar la campa?a publicitaria de Dior al a?o siguiente. Le siguieron las de D&G o Victoria's Secret. Hasta que, en 2001, decidi¨® parar.
"Quise tomarme un respiro. Llevaba un ritmo absurdo y empec¨¦ a trabajar muy joven, as¨ª que decid¨ª escoger m¨¢s los trabajos y gestionar mi tiempo pensando en m¨ª", explica, ya veterana, con 22 a?os. Su aparici¨®n coincidi¨® con la explosi¨®n de las modelos de su pa¨ªs. Liderada por Gis¨¨le B¨¹ndchen, una generaci¨®n de chicas voluptuosas, carnales y atl¨¦ticas apart¨® de un caderazo a las l¨¢nguidas belgas. Y aunque en 2005 las modelos del Este declaraban triunfales en Vanity Fair que hab¨ªan acabado con las brasile?as, Raica, Gis¨¨le, Fernanda Tavares o Isabeli Fontana siguen trabajando tanto como quieren. "Nunca me he fijado en estas cosas", dice Raica acerca de las hornadas de la belleza. "Es cierto que somos un mont¨®n de modelos brasile?as, pero es un pa¨ªs enorme. Hay mucha gente guapa y mucho culto al cuerpo". Raica defiende la potencia de moda de su pa¨ªs m¨¢s all¨¢ de las perchas: "Me encanta la filosof¨ªa de la moda en Brasil. Es c¨®moda y alegre. Por eso, accesorios tan simples como las sandalias havaianas est¨¢n en las calles de todo el mundo".
En su pa¨ªs, Raica ya era una celebridad antes de Ronaldo. En Espa?a, muchos la han conocido por su relaci¨®n con el futbolista. Y, si bien es cierto que Raica sigue ocupando portadas de moda, ahora tambi¨¦n sale en las del coraz¨®n. ?Beneficioso o perjudicial? "Soy modelo, as¨ª que me gusta aparecer en las revistas de moda. Las del coraz¨®n no me interesan y procuro que se respete mi vida privada", remata.
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