Agbar, ACS y Suez se adjudican la desaladora de El Prat por 158 millones
La planta tratar¨¢ el 20% del agua que consume el ¨¢rea de Barcelona
Aguas de Barcelona (Agbar) se adjudic¨® ayer la construcci¨®n de la desaladora de El Prat por un importe de 158 millones de euros. La desaladora entrar¨¢ en funcionamiento en 2009 y podr¨¢ tratar 60.000 millones de litros al a?o, el 20% del agua que actualmente se suministra al ¨¢rea metropolitana de Barcelona. Agbar lidera un consorcio en el que participan filiales de ACS y de la francesa Suez, que explotar¨¢ la infraestructura los dos primeros a?os.
Aig¨¹es del Ter-Llobregat (ATLL), empresa p¨²blica de la Generalitat, adjudic¨® ayer la creaci¨®n del sistema de captaci¨®n de agua de mar, la instalaci¨®n de la desaladora y la estaci¨®n de bombeo, que empezar¨¢n a construirse "a principios de 2007" junto a la actual depuradora, en la desembocadura del Llobregat, explic¨® el gerente de ATLL, Antoni Sala. El presupuesto total de las obras rondar¨¢ los 200 millones de euros, de los que el 75% se financiar¨¢ con fondos europeos. El resto lo pagar¨¢ ATLL, que gestionar¨¢ la planta y prev¨¦ recuperar la inversi¨®n con la venta del agua que obtenga a las compa?¨ªas suministradoras de agua potable. Agbar (adjudicataria junto con Drace y Dragados, y Dreg¨¦mont, filial de Suez) ser¨¢, precisamente, el principal cliente de la desaladora.
La planta ser¨¢ la principal de este tipo -destinada al tratamiento del agua para consumo urbano- en Espa?a y una de las principales de Europa. Y es una de las piezas destacadas del programa de actuaciones alternativas al Plan Hidrol¨®gico Nacional para garantizar el suministro de agua potable y cumplir los requerimientos medioambientales que establece la directiva europea del agua.
El Ministerio de Medio Ambiente tambi¨¦n tiene previsto adjudicar este verano tres plantas m¨¢s, en Torrevieja (Alicante), ?guilas (Murcia) y Almanzora (Almer¨ªa), por un importe conjunto de 722 millones. Agbar explic¨® ayer que se ha presentado a los tres concursos, si bien "ser¨¢ dif¨ªcil repetir porque la Administraci¨®n ha avanzado ya que su objetivo es evitar concentrar en pocos grupos empresariales las adjudicaciones", afirm¨® Leonard Carcol¨¦, director general de agua y saneamiento de Agbar.
Carcol¨¦ explic¨® que la nueva planta permitir¨¢ evitar las "crisis recurrentes" en el suministro de agua al ¨¢rea metropolitana de Barcelona. La ¨²ltima data del pasado verano, pero tambi¨¦n en 2000 y 2002 se produjeron situaciones que amenazaron con provocar problemas de suministro por el bajo nivel de los embalses.
La desaladora permitir¨¢ reducir el volumen de extracci¨®n de agua procedente del Ter y, en menor medida, del Llobregat, y que los dos r¨ªos conserven un mayor caudal. Asimismo, junto con otras actuaciones, posibilitar¨¢ absorber los aumentos de la demanda de consumo, consecuencia del crecimiento demogr¨¢fico del ¨¢rea metropolitana. ATLL prev¨¦ un alza del consumo del 10% hasta 2020. La empresa p¨²blica realizar¨¢ directamente inversiones por valor de 600 millones de euros para asegurar el suministro de agua incluso en ¨¦poca de sequ¨ªa.
Para convertir un metro c¨²bico (un mill¨®n de litros) de agua salada en agua potable, la planta consumir¨¢ tres kilovatios de energ¨ªa. La desaladora captar¨¢ el agua mediante la toma en mar abierto, a trav¨¦s de un emisario submarino y de drenajes horizontales que se instalar¨¢n en el fondo marino. Una vez trasladada a la planta, se aplicar¨¢n procesos reactivos, de desinfecci¨®n, decantaci¨®n y filtraci¨®n. Posteriormente, por un sistema de ¨®smosis inversa, se obtendr¨¢ un 40% de agua dulce aprovechable para el consumo. El 60% restante se devolver¨¢ al mar junto con las salmueras (agua con alta concentraci¨®n de sal). Finalmente, una estaci¨®n de bombeo llevar¨¢ el agua hasta los dep¨®sitos por unos conductos de 11,5 kil¨®metros, a¨²n por adjudicar.
?Mejor o peor sabor?
El debate sobre la obtenci¨®n de agua dulce procedente del mar o de acu¨ªferos salobres se ha centrado hasta ahora en cuestiones de relacionadas con el medio ambiente: el coste biol¨®gico del retorno de la salmuera al medio y el del consumo energ¨¦tico necesario para desalar el agua. Sin embargo, lo primero que se pregunta un consumidor es si el agua de su grifo va tener mejor o peor sabor cuando se ponga en marcha la planta. Para los implicados en la construcci¨®n de la desaladora, no hay discusi¨®n: "La calidad mejorar¨¢. Los consumidores notar¨¢n un cambio de sabor cuando la planta entre en funcionamiento, especialmente los del ¨¢rea m¨¢s cercana al Llobregat, siempre para mejor", explic¨® ayer Leonard Carcol¨¦, director general de Agbar. A su juicio, la soluci¨®n t¨¦cnica aprobada por ATLL "es la mejor de las posibles". "Habr¨¢ un cambio de gusto para mejor, per a¨²n faltan dos a?os y medio para que los consumidores puedan verlo", concluy¨®.
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