Juegos de romanos

Los romanos jugaban al tres en raya, entre otras diversiones muy parecidas a las actuales. Esta conclusi¨®n, aparentemente intrascendente, ha constituido todo un descubrimiento para algunos de los 30 j¨®venes que desde el 15 de julio trabajan en la limpieza y mejora de los yacimientos arqueol¨®gicos de la ciudad latina de It¨¢lica (Sevilla).

"Vimos el tablero grabado en la piedra del anfiteatro y nos caus¨® mucha impresi¨®n", afirma Mar¨ªa Jes¨²s Rodr¨ªguez, estudiante de 19 a?os llegada de Badajoz, mientras se seca la frente del sudor y deposita su pala en el suelo. "He venido porque quiero dedicarme a esto algo que, despu¨¦s de pasar por aqu¨ª, tengo mucho m¨¢s claro".

Hasta el pr¨®ximo 31 de julio estos j¨®venes participar¨¢n en el campo de trabajo arqueol¨®gico que la Junta de Andaluc¨ªa, a trav¨¦s del Instituto de la Juventud, con la colaboraci¨®n del Ayuntamiento de Santiponce (Sevilla), organiza desde hace cinco a?os en las ruinas romanas. Este es el segundo a?o en que el campamento admite a extranjeros en su lista: adem¨¢s de espa?oles de distintas comunidades aut¨®nomas, en el campo se oye el checo, turco, italiano y franc¨¦s. "Aunque aqu¨ª el idioma para entenderse es el ingl¨¦s", asegura Mar¨ªa Jes¨²s Rodr¨ªguez.

Para estos voluntarios, de entre 18 y 26 a?os, la estancia en Santiponce, el pueblo donde se encuentran las ruinas y donde se aloja el grupo, ha supuesto una buena elecci¨®n para divertirse y jugar con la arqueolog¨ªa y el ocio.

All¨ª, adem¨¢s de realizar tareas de limpieza y catalogaci¨®n en el yacimiento de 8.30 a 13.00, se reservan para la tarde ofertas de entretenimiento como talleres (malabares, educaci¨®n sexual, restauraci¨®n de cer¨¢micas y mosaicos y revelado fotogr¨¢fico, entre otros), excursiones, actividades deportivas (rapell, senderismo y pirag¨¹ismo), encuentros con la naturaleza y din¨¢micas de grupo.

"Los talleres de sexualidad han sido curiosos: nos han hablado de m¨¦todos anticonceptivos e, incluso, hemos realizado din¨¢micas sobre las posturas del coito", explica entre risas Cristina L¨®pez, de Puerto Real (C¨¢diz), estudiante de Historia de 21 a?os.

"Me encant¨® la visita a las ruinas de Baelo Claudia -Bolonia, C¨¢diz-", dice en un perfecto ingl¨¦s Muhammet Damar, de Izmir (Turqu¨ªa). "Para m¨ª, es importante conocer la historia de esta zona, donde hay restos musulmanes tan importantes como los de Sevilla, Granada o C¨®rdoba", a?ade este joven turco, de 23 a?os. El grupo ya conoce la catedral y el centro de Sevilla, aunque todav¨ªa tiene pendiente la visita a los Reales Alc¨¢zares el s¨¢bado y al castillo de Zahara de la Sierra (C¨¢diz) el domingo.

Dos equipos de monitores; uno para la arqueolog¨ªa y otro dedicado a las labores de ocio; se encargan de guiar a los participantes en sus labores. "Este a?o hemos terminado la limpieza del anfiteatro. Ahora nos falta hacer un cat¨¢logo sobre las piezas arquitect¨®nicas y concluir el trabajo en las ruinas del Traianeum, el templo dedicado a Trajano", explica Juan Bosco Mart¨ªnez, licenciado en Historia y arque¨®logo habitual del recinto arqueol¨®gico sevillano.

Bosco ha participado ya tres a?os en este campamento. "Es una experiencia muy buena. Conoces mucha gente de diversos lugares, adem¨¢s de continuar con una labor tan intersante como ¨¦sta en un lugar tan grande y maravilloso como It¨¢lica. Aqu¨ª hay tanto por estudiar, que es preferible terminar con lo que hay antes de seguir excavando", a?ade el historiador.

Como ¨¦l, su compa?ero, el arque¨®logo Miguel ?ngel Rogerio, inicia a los j¨®venes en el trabajo de campo. Para ¨¦l, es la primera experiencia como monitor en este yacimiento, aunque ya ha trabajado con j¨®venes en otras ocasiones "Descontando el calor, la experiencia es interesante. Los chicos muestran muchas ganas de aprender. Hemos conseguido dejar toda la zona limpia de vegetaci¨®n, gracias a su dedicaci¨®n", afirma Rogerio, quien lleva un perenne sombrero durante las obras para protegerse del intenso sol de julio.

La jornada de ayer fue particular para todos. Despu¨¦s de trabajar en com¨²n durante semana y media, los voluntarios han conseguido varios de los objetivos fijados, algo que pudieron mostrar al delegado provincial de Cultura, Bernardo Bueno, quien hizo una visita al yacimiento.