200 voluntarios se apuntan en el tel¨¦fono de la Xunta a vigilar el bosque

La Vicepresidencia de la Xunta de Galicia puso ayer en marcha el tel¨¦fono del voluntariado para la Defensa del Monte Gallego (900 400 800), una l¨ªnea 24 horas a la que llamar para denunciar incendios, solicitar informaci¨®n y, sobre todo, ofrecerse para colaborar en tareas auxiliares. Desde las nueve de la ma?ana, 20 personas atienden ocho l¨ªneas telef¨®nicas en lo que antes eran las dependencias de Voluntariado de la Direcci¨®n General de Juventud. Al finalizar el primer turno, a las tres de la tarde, se hab¨ªan apuntado 200 voluntarios, "de todo tipo, desde estudiantes en vacaciones a jubilados con experiencia en el campo".

El citado tel¨¦fono ya funcionaba antes como punto de atenci¨®n para voluntariado social. "A diferencia de otros, este Gobierno considera que, ante una situaci¨®n de cat¨¢strofe nacional, la sociedad en su conjunto debe dar una respuesta e implicarse, y ¨¦sta es una de las v¨ªas por las que puede hacerlo. La Administraci¨®n tiene la responsabilidad de extinguir los incendios, y la ciudadan¨ªa, la de denunciar las situaciones que los originan", asegura Rub¨¦n Cela, director general de Juventud.

En el tel¨¦fono se puede alertar de conatos de incendio, comunicar sospechas sobre actividades incendiarias y pedir informaci¨®n sobre carreteras cortadas. Tambi¨¦n act¨²a un poco como tel¨¦fono de la esperanza. "En todas partes hay malas personas, se?or", consolaba ayer a su interlocutor Mar¨ªa Montero, una de las telefonistas que estrenaba turno por la ma?ana.

Tres tipos de tareas

Tambi¨¦n hay quien recuerda la situaci¨®n de emergencia de la marea negra del Prestige: los propietarios de una panader¨ªa llamaron para ofrecerse a distribuir 200 barras de pan diarias a los equipos de extinci¨®n, en cualquier punto de Galicia. Una cooperativa de camioneros ofreci¨® su flota de veh¨ªculos. "Tambi¨¦n hay quejas, y gente que nos pone verdes", reconoce Cela, que recuerda como en una de las primeras comunicaciones, la telefonista escuch¨® en silencio largo rato y contest¨® "no se preocupe se?ora, si de esta forma se ha tranquilizado, por m¨ª no hay ning¨²n problema, es mi trabajo".

La mayor¨ªa, sin embargo, se interesa por el voluntariado. Despu¨¦s de pedir los datos (incluidos los de disponibilidad de tiempo y si han tenido alguna experiencia previa con fuego), en el 900 400 800 ofrecen a los que llaman tres alternativas: vigilancia, intendencia o repoblaci¨®n. Vigilancia es patrullar por aquellas zonas boscosas en posible peligro, pero a¨²n no afectadas. Intendencia son las tareas de ayuda a los equipos de extinci¨®n. Repoblaci¨®n es colaborar en la futura reforestaci¨®n de las zonas quemadas.

"En ning¨²n caso los voluntarios participar¨¢n en trabajos de extinci¨®n; son peligrosos y la presencia de gente no habituada da m¨¢s trabajo que otra cosa", dice Cela. Tampoco se trata de pedir gente de fuera de Galicia: "Se trata de generar un voluntariado de proximidad implicado en la conservaci¨®n del monte".