"Vendo los puntos del carn¨¦ de mi abuela"
Los infractores negocian en Internet con otros conductores la compra de puntos para conservar su licencia
"?Estoy desesperada! Necesito comprar urgentemente y a cualquier precio puntos del carn¨¦", suplic¨® hace pocos d¨ªas Kylie 29 en un foro de Internet. La ley de la oferta y la demanda hizo el resto. Rebeca ofreci¨® un punto a 400 euros y ocho de golpe por 2.900. Otro propuso un trueque: "Vendo seis puntos por un Citro?n C4. Urgente".
El mercado negro de puntos comenz¨® cinco d¨ªas antes de que el nuevo sistema entrase en vigor, cuando Jaws (mand¨ªbula) anot¨® en la p¨¢gina forocohes.com: "Vendo los puntos del carn¨¦ de mi abuela".
Algunos se lo tomaron en serio. Como el creador de la Tienda de los puntos en la Red: "?Necesitas puntos? Los tenemos. ?Quieres vender los tuyos? Te proporcionamos compradores. No lo dudes, ponte en contacto conmigo y te dar¨¦ m¨¢s informaci¨®n", anunci¨® en el foro euroresidentes.com. Al enviar un e-mail interes¨¢ndose por la venta, el dependiente contesta con rapidez explicando las condiciones: el cliente queda registrado en una base de datos (sexo, edad, puntos disponibles y lugar de procedencia) hasta que aparece un comprador o vendedor decidido a hacer el trato y se cierre la cantidad a pagar.
"Cuando te llega la denuncia, dices que conduc¨ªa yo y me pagas 'x' m¨¢s la multa"
La ley castiga con multas de hasta 1.500 euros no identificar verazmente al infractor
Como en cualquier otra subasta, el precio var¨ªa en funci¨®n de la demanda: desde los 100 euros por punto hasta los 6.000 por ocho de golpe -el m¨¢ximo que se puede perder en un d¨ªa -. Abrumado por la elevada cantidad, el cliente responde que tiene dudas de que la cosa salga bien. Tienda de puntos zanja con un reto: "Est¨¢ claro que todo conlleva su riesgo y nosotros estamos dispuestos a asumir el nuestro. ?Est¨¢s dispuesto t¨²?".
El mercado ya est¨¢ abierto aunque todav¨ªa ning¨²n conductor ha perdido puntos porque en el momento en el que se impone la denuncia se abre un proceso de alegaciones y recursos que dura varios meses. De momento hay 50.000 candidatos a perderlos y 170.000 puntos en juego, seg¨²n datos de la Guardia Civil (no incluyen polic¨ªas locales ni auton¨®micas) desde la entrada en vigor del nuevo permiso hasta el pasado seis de agosto. Los primeros en ver desaparecer su carn¨¦ de conducir lo har¨¢n a finales de septiembre, seg¨²n las previsiones de la DGT.
"Antes, lo primero que te preguntaban cuando parabas a alguien era: ?cu¨¢nto me va a costar? Ahora, lo primero que quieren saber es cu¨¢ntos puntos les vamos a quitar. Si es una infracci¨®n que s¨®lo conlleva una multa econ¨®mica, casi te dan las gracias", asegura una agente de la Guardia Civil.
En principio, los puntos del carn¨¦ no son intercambiables, pero algunos creen haber encontrado la trampa: "Te caza el radar fijo a 155 kil¨®metros por hora, y cuando te llega la denuncia dices que conduc¨ªa yo y me pagas equis, m¨¢s el importe de la multa. De esa manera los puntos me los quitan a m¨ª y no a ti", explica un internauta en forocoches.com.
Nada de esto es legal. Por eso eBay, la primera web de subastas por Internet, decidi¨® retirar de su p¨¢gina un anuncio en el que se ofrec¨ªan ocho puntos del carn¨¦ de conducir espa?ol al mejor postor. La ley que regula el nuevo carn¨¦ tipifica como falta "muy grave" el incumplimiento del deber de identificar verazmente al responsable de la infracci¨®n -antes era simplemente "grave"- y conlleva una multa de entre 301 y 1.500 euros, aunque no lleva aparejada la retirada de ning¨²n punto.
Todo eso, si le pillan. La Guardia Civil confirma la "relativa facilidad" con que los puntos pueden cambiar de due?o. "Sobre todo en las multas por exceso de velocidad en las que se fotograf¨ªa al coche, pero no al conductor. Este tipo de denuncias le llegan al titular del veh¨ªculo y bastar¨ªa con que el que fuera al volante se pusiese de acuerdo con un tercero para que se identificase como autor de la infracci¨®n", reconocen dos agentes.
La DGT afirma que todo entra dentro de lo previsto. El director general, Pere Navarro, declar¨® hace dos semanas que a¨²n no ten¨ªa conocimiento sobre ninguna mafia dedicada a la compraventa de puntos, pero a?adi¨® que si tal pr¨¢ctica ya se hab¨ªa dado en Francia e Italia, era "probable" que en Espa?a tambi¨¦n llegase a suceder.
"En Francia los primeros en perder el permiso de conducir fueron los abuelitos que no necesitaban su carn¨¦. Son picarescas que surgen siempre alrededor de un nuevo sistema, ?Lo esper¨¢bamos? S¨ª. ?Nos preocupa? Creemos que van a ser casos contad¨ªsimos", explica un portavoz de la DGT.
Los puntos se venden, se compran, pero tambi¨¦n se heredan. La prensa italiana bautiz¨® como "el abuelito sprint" a un hombre de 92 a?os, vecino de Pesaro, fotografiado en moto a las tres de la madrugada y a 126 kil¨®metros por hora en una carretera estatal en 2003. Hab¨ªa truco. Su nieto, el due?o de la moto y verdadero infractor, aleg¨® que era su abuelo quien hab¨ªa cogido el veh¨ªculo aquella noche para que le quitaran los puntos a ¨¦l.
Cuatro j¨®venes italianos fueron m¨¢s all¨¢ e implicaron en 2004 a un pariente que ya estaba muerto. Hab¨ªan sido multados por exceso de velocidad en distintos momentos y lugares pero no se resignaron a perder sus puntos y juntos decidieron inculpar a un anciano pariente, gravemente enfermo. Cuando la polic¨ªa le notific¨® d¨ªas despu¨¦s la infracci¨®n, se percat¨® de que el anciano ya hab¨ªa muerto y que todo era una estafa. Los j¨®venes pasaron a disposici¨®n judicial aunque nunca llegaron a ir a la c¨¢rcel.
La picaresca espa?ola es consciente de que en todo fraude lo m¨¢s importante es guardarse las espaldas, y por eso un internauta concluye recomendando lo siguiente: "Interesa m¨¢s guardar los puntos de pap¨¢, mam¨¢, abuelo o abuela que no necesiten conducir que venderlos a otro. Nunca sabemos cu¨¢ndo los podremos necesitar". El consejero no ve con buenos ojos la venta de puntos fuera del ¨¢mbito familiar porque teme que se convierta en un negocio demasiado grande, que la polic¨ªa lo persiga y que los hijos, nietos y sobrinos no puedan pedir y hacerse con esos puntos en casos de verdadera necesidad.
De prosperar estas pr¨¢cticas, quiz¨¢ el a?o que viene las autoescuelas est¨¦n llenas de ancianos que perdieron su permiso por pisarle demasiado (cuando conduc¨ªan el coche de sus nietos).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.