Una c¨¦lula bajo sospecha desde los atentados del 7-J

Scotland Yard solicitar¨¢ esta semana permiso judicial para volver a prorrogar la detenci¨®n en comisar¨ªa de todos o parte del grupo de 23 j¨®venes brit¨¢nicos detenidos en la operaci¨®n antiterrorista del 10 de agosto. En sesiones a puerta cerrada, expondr¨¢ al juez los avances y perspectivas de la investigaci¨®n en torno al supuesto plan para "detonar explosivos en pleno vuelo, en aviones en ruta desde Reino Unido a EE UU", seg¨²n el n¨²mero dos del cuerpo, Paul Stephenson. Abogados de los sospechosos creen que la polic¨ªa agotar¨¢ los 28 d¨ªas de detenci¨®n que permite la legislaci¨®n antiterrorista tras su reforma de 2006.

"Hablan de conspiraci¨®n y de un pozo com¨²n de informaci¨®n. Por tanto, retendr¨¢n a todos el m¨¢ximo periodo de tiempo", dice Mahtab Aziz, del bufete londinense que defiende a Cossev Al¨ª, detenida en Walthamstow (Londres) con su marido, y cuyo hijo de seis meses permanece con ella.

La prensa brit¨¢nica asegura que Al Qaeda entren¨® a cinco de los detenidos

Se han registrado 49 viviendas y locales. La polic¨ªa a¨²n trabaja en 14 propiedades

Los medios de comunicaci¨®n brit¨¢nicos van hilando informaciones procedentes de fuentes an¨®nimas sobre los pocos detalles desvelados oficialmente. La sequ¨ªa de datos confirmados por el Gobierno de Tony Blair, la polic¨ªa y los servicios secretos se justifica en la necesidad del respeto a los procedimientos judiciales y evitar una anulaci¨®n del juicio.

De los 24 detenidos en Londres, Birmingham y High Wycombe (Buckinghamshire) se conoce la identidad de 19 -con edades entre 17 y 35 a?os-, cuyos nombres y domicilios aparecieron en la web del Banco de Inglaterra con una orden de congelaci¨®n de sus cuentas bancarias. No se ha informado del porqu¨¦ de la excepcional medida que, seg¨²n la prensa, puede ser consecuencia de una transferencia de dinero enviada desde Pakist¨¢n para financiar el supuesto atentado.

Uno de los detenidos qued¨® en libertad sin cargos el pasado fin de semana. Tambi¨¦n se ha liberado a otro sospechoso que la polic¨ªa detuvo el 15 de agosto. Se da por supuesto, aunque no se ha confirmado oficialmente, que los 23 detenidos son brit¨¢nicos musulmanes, la mayor¨ªa de origen paquistan¨ª. Se piensa que entre ellos hay tres mujeres y tres conversos al islam. Sus respectivas familias proclaman su inocencia.

"Hemos vigilado las reuniones, movimientos, viajes, gastos y aspiraciones de un grupo muy numeroso de personas", admiti¨® Peter Clarke, jefe de la brigada antiterrorista de Scotland Yard, la ma?ana de las redadas. La polic¨ªa guarda desde entonces silencio y solo ha dado a conocer que se han registrado 49 viviendas y locales, adem¨¢s de 20 veh¨ªculos, en busca de pruebas. Agentes forenses siguen rastreando 14 propiedades y una zona arbolada pr¨®xima a High Wycombe. Seg¨²n la BBC, en los registros se han descubierto una maleta con componentes para fabricar bombas y, al menos, una pistola y un rifle. El ente p¨²blico de televisi¨®n y radio asegura que tambi¨¦n se han encontrado mensajes de martirio grabados en varios ordenadores. Fuentes policiales aseguran que se ha requisado "material interesante" o, en palabras de John Reid, ministro del Interior, "de sustancial naturaleza".

Londres tampoco ha aclarado cu¨¢l fue el detonante de las redadas ni el tiempo durante el que se vigil¨® a los detenidos. El Gobierno de Pakist¨¢n sugiere que la alarma se activ¨® tras la detenci¨®n en Bahawalpur, a principios de agosto, del brit¨¢nico Rashid Rauf, "pieza clave" de la supuesta trama y "con conexiones con Al Qaeda", seg¨²n Tasnim Aslam, portavoz del ministerio del Exterior. Islamabad no ha aportado pruebas sobre el papel que atribuye a este joven de doble nacionalidad, al que la prensa brit¨¢nica relaciona con dos de los detenidos en Inglaterra.

Medios brit¨¢nicos y paquistan¨ªes sugieren que los presuntos terroristas se dispon¨ªan a hacer un simulacro de atentado en aeropuertos brit¨¢nicos y que hab¨ªan recibido un mensaje de Pakist¨¢n para "atacar ahora". La intercepci¨®n de la comunicaci¨®n habr¨ªa precipitado la actuaci¨®n policial.

Se desmantelaba as¨ª una c¨¦lula que llevaba m¨¢s de un a?o en el punto de mira de los servicios secretos. De acuerdo con la prensa, la primera pista se remonta al 7 de julio de 2005, fecha de los atentados en el transporte p¨²blico de Londres. Una persona pr¨®xima a uno de los detenidos la semana pasada le denunci¨® por comportamiento sospechoso, dando pie a la apertura de la investigaci¨®n. Tambi¨¦n aseguran los medios que cinco presuntos implicados en la trama terrorista han visitado campos de entrenamiento de Al Qaeda en Pakist¨¢n, donde habr¨ªan coincidido con dos suicidas del 7-J: Sidique Khan y Shazad Tanneer.

Ni la polic¨ªa ni el Gobierno han confirmado los lazos entre los protagonistas de la matanza del a?o pasado y los que pretend¨ªan, seg¨²n Stephenson, "cometer asesinato en masa a una escala inimaginable". Tampoco avalan informes que apuntan a la infiltraci¨®n en la desbaratada c¨¦lula de un agente musulm¨¢n.

El jefe de Scotland Yard aport¨® pocas pistas sobre la metodolog¨ªa de la supuesta oleada de ataques en vuelos. "Creemos que la intenci¨®n de los terroristas consist¨ªa en introducir explosivos en los aviones en el equipaje de mano y detonarlos en pleno vuelo", dijo Stephenson el pasado 10. Fuentes policiales hablan de explosivos l¨ªquidos -TATP, triacetona triperoxido- camuflados en botellas de refresco. Los detonadores estar¨ªan insertos en reproductores de m¨²sica MP3 o en tel¨¦fonos m¨®viles. Ambas partes de la bomba se montar¨ªan a bordo del avi¨®n, seg¨²n las mismas fuentes. Sobre la cadena de atentados, los medios divergen: unos hablan de cinco, otros de 10 y algunos de hasta 12 aviones que se pretend¨ªa hacer estallar sobre el Atl¨¢ntico o sobre territorio estadounidense. La versi¨®n m¨¢s extendida apunta a oleadas de tres aviones con destino a Los ?ngeles, Nueva York o Washington que explotar¨ªan simult¨¢neamente en pleno vuelo.