Arranca la Liga
Comienza la Liga y nada de lo que ha sucedido tiene demasiado valor. El torneo sirve para muchas cosas, pero tambi¨¦n como coartada para el olvido. Hace poco m¨¢s de un mes termin¨® el Mundial, con la acostumbrada frustraci¨®n de los aficionados espa?oles. Ahora retornan a sus viejas fidelidades, a sus equipos, en un pa¨ªs decididamente tribal en cuestiones futbol¨ªsticas. Pero lo tribal no impide el ¨¦xito. Los equipos espa?oles funcionan mejor que la selecci¨®n.
El campeonato se inicia con novedades: despu¨¦s de cinco a?os de crisis, el mercado ha mejorado su actividad. En Primera se han gastado 270 millones de euros en fichajes, muy lejos todav¨ªa de los 450 millones que se invirtieron en la temporada 2000-2001, primer a?o de Florentino P¨¦rez como presidente del Real Madrid y de Joan Gaspart al frente del Bar?a. Ninguno de los dos ha sobrevivido al belicoso escenario del f¨²tbol. A Ram¨®n Calder¨®n, nuevo presidente del Real Madrid, le corresponde gestionar un tiempo dif¨ªcil. La masa social est¨¢ dividida, tal y como se vio en las recientes elecciones, y el equipo no ha ganado t¨ªtulos en las tres ¨²ltimas temporadas. Calder¨®n ha confiado su mandato a Fabio Capello, t¨¦cnico con fama de ganador que aterriza en el Madrid tras el esc¨¢ndalo que ha desembocado en el descenso imperativo del Juventus a Segunda. Cuatro jugadores de la Juve -Zambrotta, Thuram, Cannavaro y Emerson- llegan a Espa?a. Los dos primeros, al Bar?a; los otros, al Real Madrid, donde Capello tendr¨¢ un enorme poder y no dudar¨¢ en ejercerlo ante el presidente, cuyo futuro depender¨¢ m¨¢s que nunca de los resultados.
El Bar?a saldr¨¢ como favorito por dos razones: ha ganado los dos ¨²ltimos campeonatos con un juego exquisito. Es el triunfo de una idea bastante nueva. De los 18 t¨ªtulos de Liga en su historial, el Bar?a ha ganado ocho en los ¨²ltimos 16 a?os. En este mismo periodo, el Madrid ha conquistado cuatro. La escuela holandesa ha ofrecido grandes resultados con Michels, Cruyff, Van Gaal y Rijkaard. A ¨¦ste le corresponde un enorme m¨¦rito a?adido: la moderaci¨®n, el talante discreto y el aprovechamiento m¨¢ximo de sus jugadores.
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