Viaje por la memoria gastron¨®mica de La Rioja
LAS DUELAS, buena bodega y recetas regionales de la mano de Juan Nales en Haro
Un claustro espectacular revestido de piedras centenarias y una lista de vinos de cierto relumbre constituyen los dos grandes se?uelos de este restaurante, situado en el hotel Los Agustinos de Haro (La Rioja), antiguo monasterio del siglo XIV.
Cuando el pasado mes de abril Juan Nales, cocinero jefe, cerraba su propio local para trasladar todos sus enseres a este entorno reci¨¦n remodelado, se compromet¨ªa a asumir mayores responsabilidades, incluidos los desayunos y las bodas. Un escenario solemne, de est¨¦tica contempor¨¢nea, donde sigui¨® elaborando su cocina de siempre. Recetas de corte regional al lado de otras tradicionales actualizadas. F¨®rmulas que no asumen ning¨²n tipo de riesgos ni incurren en excentricidades. Es decir, comida segura, que gusta a todo el mundo y revive los sabores de la tierra.
LAS DUELAS
Hotel Los Agustinos. San Agust¨ªn, 2. Haro (La Rioja). Tel¨¦fono 941 31 13 08. Cierra domingos noche y lunes. Precio medio por persona, entre 35 y 55 euros. Patatas a la riojana, 10 euros. Bacalao sobre pisto riojano, 12,50 euros. Lomito de cordero con piel crujiente, 19,50 euros. Helado de queso fresco y yogur, 6 euros.
Pan ... 6
Caf¨¦ ... 4
Bodega ... 6,5
Servicio ... 5,5
Aseos ... 7,5
Ambiente ... 8
No en vano Nales, profesional muy pragm¨¢tico que reconoce sus limitaciones, intenta no salirse de ese gui¨®n con el que ya triunf¨® en La Vieja Bodega (Casalarreina), restaurante donde ejerci¨® de jefe de cocina. Por eso la carta, absolutamente convencional, hace hincapi¨¦ en los platos marcados con asterisco, que corresponden a recetas riojanas cl¨¢sicas. Entre ellas, las famosas patatas con chorizo, ortodoxas, sin exceso de grasa ni abundancia de picante. O los callos y morros de ternera, poderosos, aunque sobrados de aceite y necesitados de mayor limpieza, como denota el insidioso tufillo a tripa del fondo del guiso.
Pimientos rojos del cristal asados
Tampoco se pueden olvidar los pimientos rojos del cristal asados, aut¨¦ntica joya, que se pueden degustar solos o en compa?¨ªa de unos lomos de bacalao con salsa de pimientos choriceros. Listado demasiado predecible en el que no faltan el bacalao a la riojana, la merluza rebozada y las chuletillas de cordero con patatas. En suma, un viaje por la memoria gastron¨®mica de La Rioja. Aunque en el resto de sus platos Nales mantiene la misma t¨®nica, se permite ciertos coqueteos con los sabores mediterr¨¢neos. Es correcto su bacalao sobre pisto; aceptable el tronco de rape con cintas de calamar, y recomendable el lomito de cordero, que acompa?a de unos tropezones crujientes de la falda que no escapan al t¨ªpico gustillo a lana.
MEDIAS RACIONES
LOS COMEDORES de Las Duelas se distribuyen en dos plantas. En la baja, cuatro mesas; en el piso de arriba, 10 adicionales, y en una esquina del claustro -rinc¨®n privilegiado-, otras 11 en las que se come disfrutando de la solemnidad del marco. En contra de lo habitual, Nales no ofrece a diario un men¨² degustaci¨®n de precio cerrado. Sin embargo, es posible optar por medias raciones en la mayor¨ªa de sugerencias de la carta, lo que permite componer men¨²s para compartir bastante interesantes.En el cap¨ªtulo goloso, la casa sigue la misma l¨ªnea que en el resto. Dulces sencillos (helado de queso y yogur con granizado de vino tempranillo, carpaccio de mango con su helado y crema de lima, torrija caramelizada) que intentan no desmerecer de los platos salados. Dos de ellos, justo los que deben pedirse con antelaci¨®n, suscitan opiniones contrapuestas. Est¨¢ bien el chocolate meloso con avellanas caramelizadas, y resulta muy vulgar la tartita caliente de hojaldre y manzanas. Para acompa?ar los postres, un listado de vinos dulces por copas que incluyen marcas excepcionales, desde un Chateau D'Yquem 1999 o el Tokaji Aszu (4 puttonyos) hasta un Matusalem oloroso de Gonz¨¢lez Byass.Destaca la bodega, que a pesar de estar acaparada por los vinos riojanos en el apartado de tintos, contiene una meditada recopilaci¨®n de marcas espa?olas de distintas procedencias. Falla el servicio, inexperto, que comete despistes imperdonables, y resulta p¨¦simo el caf¨¦, imbebible, amargo y requemado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.