Los fabricantes urgen a la UE a que apruebe el recargo a la importaci¨®n de calzado chino
La Comisi¨®n estudia aplicar aranceles especiales para frenar la competencia desleal
Los empresarios del calzado de Elche conf¨ªan en que el Consejo de Ministros de la Uni¨®n Europea (UE) atienda las consideraciones t¨¦cnicas de la comisi¨®n y aprueben los aranceles por venta por debajo de costes a las importaciones de calzado chino y vietnamita. La ¨²ltima propuesta efectuada por el comisario de Comercio, Peter Mandelson, grava con un arancel adicional del 16,5% las importaciones de calzado chino, y del 10% las de Vietnam por lo que teniendo en cuenta el precio de un par de zapatos, el recargo ser¨¢ de 1,4 euros para China y de 0,8 euros por par para Vietnam.
Los importadores chinos radicados en Elche declinan opinar sobre la iniciativa
Finalmente, tal y como ped¨ªa Espa?a, la propuesta de la Uni¨®n Europea para frenar la competencia desleal de los pa¨ªses asi¨¢ticos incluye tambi¨¦n al calzado infantil.
Pedro M¨¦ndez, secretario de la Asociaci¨®n de Industriales del Calzado de Elche, (AICE), manifest¨® que desde el punto de vista t¨¦cnico "se ha atendido nuestras demandas por que lo que pedimos es justo" y dijo que ahora entran en consideraci¨®n "otros intereses pol¨ªticos y econ¨®micos de las grandes multinacionales a las que sabemos que est¨¢n defendiendo algunos pa¨ªses del Norte de Europa que se oponen a estas medidas y se escudan en que defienden el inter¨¦s de los consumidores".
M¨¦ndez explic¨® que a los productores les gusta vender su producto y quieren encontrarse abiertas las puertas de todos los mercados. "Por eso entendemos las reticencias", asegur¨®, "pero lo que no podemos consentir es que las condiciones peculiares de la producci¨®n en China alteren artificialmente el mercado". El secretario de la AICE denunci¨® que, a la barata mano de obra en China, se le suman subvenciones y ayudas encubiertas de su Gobierno. "Queremos un mercado libre pero en el que todos juguemos con las mismas reglas", afirm¨® este empresario, respondiendo as¨ª a los que tildan de proteccionista esta postura.
A pesar de todo conf¨ªan en que en un mes los 25 aprueben la propuesta de Mandelson ya que, aseguran tener ya dos batallas ganadas, al haber conseguido que desde abril se apliquen ya unas medidas antidumping provisionales y ahora, que la Comisi¨®n de Comercio haya hecho una propuesta para imponer aranceles fijos al calzado de China y Vietnam. De opini¨®n similar es el presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Componentes para el Calzado, (AEC), Jos¨¦ Antonio L¨®pez Robles, que asegura que a pesar de los intereses encontrados y las fuertes presiones que va a haber, la propuesta "puede salir porque por primera vez se han establecido unas medidas provisionales y eso ya ha sido un logro". La industria de componentes se ha visto perjudicada igual que los fabricantes por las importaciones masivas de calzado asi¨¢tico, ya que si se dejan de fabricar zapatos, no se hacen pedidos de pieles o suelas. "Los chinos tienen sus propios proveedores y nosotros no vendemos all¨ª", dijo el presidente de AEC.
Los importadores chinos asentados en Elche, b¨¢sicamente en el pol¨ªgono de Carr¨²s, prefieren no opinar sobre la propuesta de Comisi¨®n Europea o la consideran injusta.
En el recinto de Carr¨²s existen casi un centenar de peque?as y medianas comercializadoras de calzado regentadas por ciudadanos chinos que importan calzado. La mayor¨ªa de los fabricantes del pa¨ªs asi¨¢tico aseguran desconocer el asunto y se escudan en su desconocimiento del idioma para mantener silencio. S¨®lo en un par de casos se atrevieron a pronunciar la palabra "injusto". Un argentino amigo de un empresario chino explic¨® que lo que ellos piden es la liberalizaci¨®n total del comercio; "un mercado libre fruto de la globalizaci¨®n", asegur¨® y explic¨® adem¨¢s, que los fabricantes europeos "deben ver la calidad de sus productos y mejorar su competitividad". Niegan cualquier tipo de competencia desleal.
Espa?a export¨® el a?o pasado 126,2 millones de pares de zapatos por valor de dos mil millones de euros, lo que supuso un descenso del 11% de las exportaciones. Sin embargo, las importaciones crecieron un 29% y en concreto las procedentes de China, dos tercios del total, se incrementaron en un 74%. La diferencia es que los productores espa?oles exportaron a un precio medio el par de 17 euros, mientras que el calzado chino llega a los mercados nacionales a un precio muy inferior, de 2,8 euros el par.
El a?o 2005 se cerr¨® con una perdida de empleo de un 11,8% en este sector que acab¨® con un total de 36.000 trabajadores y 2.341 empresas, un 14% menos que el a?o anterior. El 65% de la producci¨®n de calzado se concentra en la Comunidad Valenciana con 1.542 empresas en 2005.
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