Fin de verano con Silvio Rodr¨ªguez, Julieta Venegas y Raphael
Figuras veteranas cantan en la capital y sonidos nuevos invaden la calle de Fuencarral
La cartelera musical se trufa de nombres de post¨ªn, como los de Silvio Rodr¨ªguez, Julieta Venegas, Antonio Vega y Raphael, en una semana que Madrid, adem¨¢s de despedir el verano, va a cortar el tr¨¢fico a una de sus calles m¨¢s c¨¦ntricas, la de Fuencarral, para dedicarla tambi¨¦n a la m¨²sica en directo. Casi sin anunciar, aparece en un peque?o club una de las figuras del jazz, Barry Harris. Baja la intensidad de las fiestas en la periferia, donde destaca Villaviciosa de Od¨®n, con Rev¨®lver, Rosario y Coti.
- La calle con vida. Como el a?o pasado, el tramo de la calle de Fuencarral que va desde Gran V¨ªa a Barcel¨®, se va a cerrar el s¨¢bado por la tarde al tr¨¢fico rodado para celebrar el segundo Festival Pura Vida. En varios escenarios, sonar¨¢ la m¨²sica en directo gracias a bandas como Sidonie, Hidden Cameras o Vive La F¨ºte, adem¨¢s de la grabada y electr¨®nica que proponen un buen n¨²mero de DJ nacionales y europeos.
La fiesta de la calle sirve de comienzo a La Noche en Blanco. En Madrid se han apuntado un buen n¨²mero de clubes, como Clamores o Bar & Co, entre otros muchos. Hay, adem¨¢s, una sesi¨®n con el piano flamenco de Javier Coble en el Planetario y un encuentro con la cultura hip-hop, Animo.3, en el Matadero de Legazpi.
- El cantautor. Acaso sea el cubano Silvio Rodr¨ªguez el m¨¢s (o uno de los m¨¢s) influyente cantautor en castellano de todos los tiempos. Su tesitura inconfundible de voz, la hermosura de sus letras y sus sencillas pero espl¨¦ndidas armon¨ªas han influido a una buena cantidad de cantautores que no dudan en reconocerlo. Autor de piezas tan bonitas como Rabo de nube o Unicornio azul, Rodr¨ªguez pasa dos noches en Madrid para presentar el disco ?rase que se era, con canciones compuestas por ¨¦l en los setenta que no se hab¨ªan publicado antes.
Sin ¨¦l, posiblemente ni existir¨ªa un tipo tan grande (en lo f¨ªsico y en lo art¨ªstico) como Caco Senante, el artista canario que se va a encerrar una noche a solas con el pianista paname?o Vicente Borland, para desgranar a su aire, lo m¨¢s selecto del cancionero iberoamericano de siempre, donde, entre bolero, rancheras y sones, tambi¨¦n hay alguna canci¨®n de Silvio.
- ?nico y personal. Pero si hay alguien imitado en Espa?a de forma deliberada, ese es Raphael, el gran cantante de Linares (Ja¨¦n) que ocupa buena parte de la historia popular espa?ola del ¨²ltimo medio siglo. ?nico y personal en su g¨¦nero, Raphael va a pasar la semana entera en el teatro de la Gran V¨ªa, donde desde hace varios d¨ªas ya no queda un asiento sin reservar.
Otro gran artista es el madrile?o Antonio Vega, tan querido por el p¨²blico de su ciudad. El ex componente de Nacha Pop propone dos noches ¨ªntimas en Clamores a cuenta de ese repertorio inconfundible que le ha aupado a ser uno de los mejores autores del pop espa?ol. Adem¨¢s, ya consagrada como reconocida cantante, esta semana se presenta en Madrid la popular y querida Rosa, salida de la primera hornada de Operaci¨®n Triunfo.
- Desde M¨¦xico. Dos de los artistas m¨¢s representativos de la nueva m¨²sica mexicana coinciden esta semana en Madrid, aunque de forma muy distinta. En La Riviera va a estar la peculiar Julieta Venegas, una mujer que ha dado al pop otra dimensi¨®n al aproximarlo a ciertos folclores tradicionales de su pa¨ªs, sin resultar por ello una cantante tradicional. Su ¨²ltimo disco Lim¨®n y sal, plagado de grandes canciones, es uno de los ¨¦xitos de estos ¨²ltimos meses, y, a la postre, el causante de que la gente vaya a acudir en masa a su concierto, pues ya se anunciaban las ¨²ltimas entradas. Con esa obra, opta ahora a un mont¨®n de premios en el ¨¢mbito discogr¨¢fico latino.
La otra representaci¨®n mexicana la trae Man¨¢, con una gran proyecci¨®n comercial, aunque vienen casi de manera privada para ofrecer un concierto al que s¨®lo se podr¨¢ acceder mediante las invitaciones que se reparten en Cadena 100.
- Y el jazz. La figura a destacar esta semana es la de Barry Harris, el pianista neoyorquino que acompa?¨® en muchas ocasiones a artistas como Miles Davis, Charlie Parker o Dizzy Gillespie. Act¨²a una noche en el peque?o Boguijazz, un club de jazz de referencia inevitable.
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