Jeanne Moreau: "Creo sinceramente en la resistencia creativa"

Jeanne Moreau, la gran dama del cine franc¨¦s, musa de directores como Orson Welles o Fran?ois Truffaut, mantiene intacto su esp¨ªritu rebelde. En lo personal y en lo profesional. Sigue fumando, a pesar del c¨¢ncer que a punto estuvo de costarle la vida; sigue revolvi¨¦ndose cuando escucha a pol¨ªticos como el primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair, tratando de justificar la guerra contra Irak. Y sigue tambi¨¦n abanderando la lucha ideol¨®gica contra una industria cinematogr¨¢fica que tiende a la uniformidad. "Hay que contar historias originales y que conmuevan", dijo ayer en San Sebasti¨¢n. "Creo sinceramente en la resistencia creativa. La minor¨ªa siempre acaba imponi¨¦ndose", sentenci¨®.

"Me siento parte del cine mundial. En la era de Internet no podemos hablar de Europa"

Moreau, premio Donostia en 1997 y presidenta del jurado de la secci¨®n oficial del 54 Festival Internacional de Cine de San Sebasti¨¢n, se prest¨® ayer a hablar unos minutos sobre su carrera, su vida -"siempre me he sentido prisionera de mi coraz¨®n, pero libre"- y su visi¨®n del cine actual. "Yo me siento parte del cine mundial", confes¨®. "Hoy, en la era de Internet, ya no podemos hablar de Europa o Am¨¦rica", sino de creatividad. Y el cine es hoy m¨¢s que nunca, a su juicio, testigo de su tiempo y, como tal, en la era de la globalizaci¨®n, tiende a reflejar problemas que afectan a todo el mundo, desde el sida a la liberaci¨®n de la mujer. Moreau apunta: "Ya no hay historias de amor puras, hay historias de amor preciosas, pero siempre dentro de un contexto", en un pa¨ªs determinado, en el marco de una guerra o una crisis.

La actriz, que se curti¨® en la comedia francesa y se descubri¨® al mundo con Les amants, de Malle, en 1958, fue la abanderada de la nueva ola francesa y trabaj¨® con Bu?uel, Antonioni y Renoir, entre otros grandes. Se siente afortunada de haber vivido aquella ¨¦poca, de haber representado un modelo determinado de mujer en el cine -siempre ha rechazado papeles indignos para las f¨¦minas-. Pero no le embarga la nostalgia. Moreau cree en el relevo generacional, en que el cine "no debe repetirse" a s¨ª mismo.