Cine pol¨ªtico como la vida
El segundo festival dedicado al g¨¦nero, que se celebra en Barcelona, homenajea al director Istv¨¢n Szab¨®
Hasta este domingo, 1 de octubre, se proyectan las pel¨ªculas del II Festival de Cine Pol¨ªtico de Barcelona. Se le puede seguir el rastro, al festival, por el Instituto Franc¨¦s, por el Macba, por el FNAC-El Triangle y por los cines Renoir Floridablanca (donde se inaugur¨® el programa con el largometraje La raison du plus faible y con la presencia de su director, el belga Lucas Belvaux). Si hay algo m¨¢s pobre que un ni?o, escribi¨® un poeta, es la madre de un ni?o. M¨¢s que entender que la pol¨ªtica tenga una l¨ªrica y una cinematograf¨ªa, que a lo mejor s¨ª, lo que a este cronista le parece es que en la l¨ªrica inexpresable de la palabra, y en la l¨ªrica di¨¢fana de las im¨¢genes, y hasta en la l¨ªrica ahogada del ensimismamiento, en todos los lirismos del mundo exterior y del mundo interior, se encuentra exiliado un poeta pol¨ªtico, o dos, o tres, o centenares. El m¨¢s grande de los muchos que fueron en el siglo XX ha sido Pasolini.
"El Festival de Cine Pol¨ªtico de Barcelona es el ¨²nico de este tipo que se celebra en el mundo", as¨ª lo explica su director, el turco Kerem Ayan, que es un hombre de 37 a?os, que a los 20 dej¨® su tierra para estudiar cine en Par¨ªs. Kerem Ayan tiene los ojos casta?os, como hechos de los bosques, de la le?a remota de su pa¨ªs, y muestra ya las primeras canas en su barba de pocos d¨ªas. Kerem Ayan anda con sandalias y vaqueros y con una pulsera de santos y v¨ªrgenes cat¨®licas. A Kerem Ayan, que ha colaborado en los festivales de Estambul y de Cannes, y en el f¨®rum de M¨®naco, le fascina la independencia que existe en Estados Unidos para rodar thrillers pol¨ªticos en los que el presidente de la naci¨®n es pintado como el principal traficante de armas ("ning¨²n pa¨ªs europeo se atrever¨ªa hacer una pel¨ªcula as¨ª", repite), y le fascinan tambi¨¦n las escuelas de cine de los extintos pa¨ªses comunistas, y la capacidad para intelectualizar, para condensar de una manera pol¨ªtica el vapor de la vida que desarrollaron los directores de cine de aquellas regiones de triste, rojo acero. El pa¨ªs invitado a esta segunda edici¨®n del festival es Polonia, que viene con un buen pu?ado de pel¨ªculas sobre las minas de Silesia y sus mineros en huelga, y sobre los d¨ªas en el campo de Auschwitz, y sobre las listas negras del partido, y sobre el 25? aniversario de Solidarnosc... Y el h¨²ngaro Istv¨¢n Szab¨®, que es el director homenajeado en el festival, trae seis de sus pel¨ªculas y ma?ana participa en los debates.
Si hay algo m¨¢s pobre que un soldado, segu¨ªa el poeta, es el perro de un empleado de banca. Cuando se le pregunta a Kerem Ayan qu¨¦ diferencia existe, a su juicio, entre el cine pol¨ªtico de los ¨²ltimos a?os pol¨ªticos, que, claro, fue la d¨¦cada de 1970, y el cine pol¨ªtico actual, Ayan sonr¨ªe y reflexiona y de nuevo sonr¨ªe, y finalmente se decide, y al principio considera que en lo esencial se trata de una diferencia art¨ªstica, pero contin¨²a hablando, y moldea su opini¨®n, y ahora considera que en aquellos a?os la gente estaba m¨¢s comprometida y que ahora no existe el mismo entusiasmo. A Kerem Ayan lo que le cautiv¨® de la primera edici¨®n de este festival, en el a?o pasado, fue la enorme afluencia de gente joven y la mucha participaci¨®n de la misma. "Barcelona es una ciudad m¨¢s joven que Par¨ªs", a?ade al respecto. "El p¨²blico joven de Barcelona es muy consciente pol¨ªticamente". Barcelona es una ciudad que ha cambiado la vecinal, multitudinaria silla plegable de la pol¨ªtica, por la mesa camilla del civismo, y as¨ª, entre conversaciones sobre urinarios, y sobre el ruido de la calle y sobre lo bonito de las banderas, se va distrayendo. En la secci¨®n de pel¨ªculas que entran en competici¨®n en esta edici¨®n del festival participan, junto con Lucas Belvaux, el italiano Roberto Faenza, el bosnio Ahmed Imamovi, el iran¨ª Sepideh Farsi, el alem¨¢n Benjam¨ªn Heisenberg, el brit¨¢nico Jan Dunn, y el polaco Robert Gliski.
"La vida es pol¨ªtica", piensa Kerem Ayan, y argumenta con picard¨ªa: "Todo tiene un inter¨¦s pol¨ªtico. La ¨²ltima Star Wars, por ejemplo, es una pel¨ªcula muy pol¨ªtica". Y entonces, si se le pregunta si ha asumido una militancia pol¨ªtica, explica que, para ¨¦l, la vida primero es cine, y que, por tanto, la suya es una elecci¨®n esencialmente art¨ªstica, pero que adem¨¢s tiene un pensamiento pol¨ªtico de izquierdas, y por eso se dedica al cine pol¨ªtico. Y as¨ª, durante esta conversaci¨®n, la lluvia, y la pol¨ªtica, y el oto?o se extienden en busca de todo como un viejo avaro.
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