"Fue un gran paso"

Mar¨ªa Rosa Ruiz Horn, de 101 a?os, ten¨ªa 27 en 1933 y fue a votar con su madre al colegio electoral de su barrio de Arg¨¹elles. Iban contentas, evoca. Se estrenaban ante las urnas y eran conscientes de que aquello "era un paso importante". Mar¨ªa Rosa Ruiz, descendiente de los condes de Horn, legendarios rivales del duque de Alba, forma parte de las ya exiguas supervivientes de aquel tiempo en el que la historia se palpaba en la calle.

Su alegr¨ªa al ir a votar demuestra que no es cierto que el sufragio fuera una reivindicaci¨®n minoritaria en Espa?a. Se hab¨ªa ganado ya en Estados Unidos, Inglaterra y otros pa¨ªses occidentales y era una asignatura pendiente. Mujeres de diversa ideolog¨ªa, aunque pertenecientes a las ¨¦lites culturales o econ¨®micas como la escritora Carmen de Burgos, la empresaria Mar¨ªa Espinosa de los Monteros, fundadora de la Asociaci¨®n Nacional de Mujeres Espa?olas (ANME), o las se?oras del Lyceum Club dirigido por Mar¨ªa de Maeztu, lo hab¨ªan pedido.

Mar¨ªa Rosa Ruiz era entonces profesora de m¨²sica del grupo escolar Carmen Rojas, situado tambi¨¦n en Arg¨¹elles, donde viv¨ªa. Su hija, Rosa Mar¨ªa Calvo-Manzano, reconocida arpista, considera que su madre y su abuela cre¨ªan en la igualdad entre hombres y mujeres y defend¨ªan el trabajo femenino.

Ni Mar¨ªa Rosa Ruiz ni su hija quieren entrar en el fondo pol¨ªtico ni hablar del sentido de su voto, argumentando que en su familia concurren opiniones diversas. La madre de Mar¨ªa Rosa Ruiz, hija del gobernador espa?ol de Manila hasta la revoluci¨®n de 1890, hablaba varios idiomas. Enviud¨® siendo joven y se empe?¨® en que su hija Mar¨ªa Rosa estudiara m¨²sica y bachillerato. Como las ursulinas de Aranjuez, donde estudiaba, dec¨ªan "pero por qu¨¦ va a estudiar tanto, que haga m¨²sica o bachillerato, no todo", su madre la cambi¨® a un instituto. Dotada para la composici¨®n, en nuestros d¨ªas hubiera hecho carrera en vez de limitarse a la ense?anza. A pesar de que su edad ha pasado ya el siglo, perdura la sensaci¨®n de alegr¨ªa al rememorar aquel d¨ªa en que fue a votar: "Hab¨ªa animaci¨®n. Iban tambi¨¦n monjas a votar y las abuchearon". Hay cierta sorpresa en esta imagen que expresaba el temor a que el clero utilizara el voto para tumbar las reformas. Por el contrario, la hija de Mar¨ªa Rosa Ruiz opina que la Iglesia apoy¨® el voto femenino porque cree "en la dignidad de la mujer".