El esc¨¢ndalo sexual del congresista ahoga a los republicanos de EE UU

El esc¨¢ndalo del congresista que dimiti¨® el viernes al publicarse el intercambio de mensajes de contenido sexual con adolescentes que hab¨ªan trabajado como mensajeros en la C¨¢mara desata una fuerte presi¨®n sobre la direcci¨®n republicana, que no despeja las dudas sobre la informaci¨®n que ten¨ªa del asunto. La presi¨®n procede de la oposici¨®n dem¨®crata y de conservadores nerviosos con la repercusi¨®n del esc¨¢ndalo en las elecciones de noviembre.

"El esc¨¢ndalo Foley es el ¨²ltimo clavo en el ata¨²d del Partido Republicano", seg¨²n el pol¨¦mico Dick Morris, que fue asesor de Bill Clinton -puesto que tuvo que dejar en 1996 acuciado por otro esc¨¢ndalo personal- y que escribe en The Hill que lo que est¨¢ ocurriendo con el republicano Foley "ser¨¢ para la direcci¨®n del partido en el Congreso lo mismo que fue el l¨ªo de M¨®nica Lewinsky para la presidencia de Clinton".

Dennis Hastert, presidente de la C¨¢mara, es el que recibe las iras de propios y extra?os, porque es blanco de las preguntas que, despu¨¦s de Watergate, se plantean con cada esc¨¢ndalo: ?Qu¨¦ es lo que supo del caso y cu¨¢ndo? Su situaci¨®n se complic¨® anoche, cuando Kirk Fordham, jefe de gabinete del tambi¨¦n republicano Thomas Reynolds, revel¨® a AP que hace dos a?os, cuando tuvo noticia del "inapropiado comportamiento" de Foley, lo comunic¨® al equipo de Hastert. ?Nunca se lo dijeron al presidente de la C¨¢mara o lo supo y call¨®? A¨²n no est¨¢ claro. Fordhan acus¨® a los dem¨®cratas de querer complicar la reelecci¨®n de su jefe, Reynolds, con el caso Foley, y anunci¨® ayer su dimisi¨®n.

El republicano Ray LaHood ha admitido que "la gente est¨¢ muy preocupada" y es partidario de "hacer algo distinto, un poco m¨¢s radical, porque alguien tiene que asumir responsabilidades". El senador John McCain ha pedido "gente con credibilidad" para abordar el asunto, en un claro pescoz¨®n a Hastert. Otros republicanos de la C¨¢mara se han distanciado del presidente de la C¨¢mara, como el l¨ªder de la mayor¨ªa, John Boehner: "Es un asunto suyo, es una responsabilidad que le compete". Lo que precisamente intenta Hastert es difuminar responsabilidades; ha dicho que no dimitir¨¢ y que espera seguir siendo presidente de la C¨¢mara en 2007, objetivo dif¨ªcil: aunque los dem¨®cratas no ganaran, no est¨¢ nada claro que los republicanos quieran que siga en el puesto.

George W. Bush, silencioso durante unos d¨ªas, no ha tenido m¨¢s remedio que hablar para expresar su desagrado y aplaudir la investigaci¨®n. Por ahora, Bush -que ayer intentaba en Arizona cambiar de conversaci¨®n hablando de terrorismo, seguridad nacional e impuestos- respalda a Hastert, igual que la Coalici¨®n Cristiana -un bloque decisivo en ciertos Estados- y la mayor¨ªa de sus compa?eros en la C¨¢mara.

Pero el nerviosismo crece entre los republicanos ante la posibilidad de perder las elecciones, y se?alados conservadores como Richard Viguerie aprovechan su enfado por otros asuntos como Irak, el exceso de gasto p¨²blico: "Hastert tiene que dimitir", porque, dijo a la Fox, "da la impresi¨®n de que trat¨® de proteger a uno de los suyos en lugar de proteger a esos adolescentes". La medida de la irritaci¨®n con Hastert la da tambi¨¦n The Washington Times, el diario conservador que ha pedido su cabeza.

Mientras, el abogado de Foley dijo en Florida el martes que el ex congresista hab¨ªa sido objeto de acoso sexual por un religioso cuando era adolescente, aunque "¨¦l no justifica sus mensajes, completamente inapropiados, en aquel trauma sufrido". El abogado dijo lo que se sab¨ªa desde hace a?os (que Foley, soltero y de 52 a?os, es gay) e insisti¨® en que "nunca ha tenido relaciones sexuales con un menor".