La caspa
Lo admirable de Clara Campoamor, dejando a un lado el hist¨®rico logro real de llevar a la mujer a las urnas, es el coraje que debi¨® reunir para hacer frente a las cr¨ªticas de lo que para muchos y algunas era un paso que acarrear¨ªa desastrosos resultados electorales. Todav¨ªa est¨¢ por ver si el voto de la mujer contribuy¨® a engrandecer las filas de la derecha, pero ah¨ª, en esa dial¨¦ctica entre el que antepone los derechos ciudadanos y el que se cuestiona la oportunidad de su ejercicio, est¨¢ la esencia de los grandes debates pol¨ªticos.
Setenta y cinco a?os se cumplen de la gran haza?a de esta mujer que sab¨ªa, por experiencia propia, la fuerza de la que tiene que hacer acopio una mujer para hacer frente a sus enemigos frontales y a sus defensores paternalistas. Setenta y cinco a?os que coinciden en estos d¨ªas con algunos reportajes que la prensa extranjera ha dedicado a los cambios que se est¨¢n produciendo en nuestro pa¨ªs, el pa¨ªs del Macho, para la integraci¨®n de la mujer en la vida activa. Aun compartiendo el optimismo con que The Washington Post hablaba de la presencia fundamental de la mujer en la nueva vida pol¨ªtica espa?ola, hay todav¨ªa algo que probablemente se escapa al o¨ªdo del periodista extranjero: ese plus de cr¨ªtica sobre el aspecto y la edad al que siempre se somete a las mujeres. No son m¨¢s dolorosos los comentarios m¨¢s rudos, a veces en el paternalismo educado que practican columnistas, analistas o cr¨ªticos late la idea de que la mujer est¨¢ en un lugar que no le corresponde. La gorda, la vieja, la pija, la que se lo gasta todo en ropa, la que va hecha un adefesio, la que sonr¨ªe demasiado, la amargada, la que tiene furor uterino, la que no se come una rosca, la bruja, la ambiciosa, la tonta del culo. Adjetivos que inconscientemente se relacionan con la naturaleza femenina.
No es maltrato f¨ªsico, no mata, se puede vivir con ello y no hay ley que pueda controlarlo. Es falta de educaci¨®n. La gran esperanza es que sean nuestros hijos los que marquen la diferencia en el trato, sobre todo los varones, que se hagan adultos sin tener los hombros llenos de caspa.
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