Antonio Enrique muestra el "corral de muertos" de la Guerra Civil en 'Santuario del odio'

"Espa?a es ahora un corral de muertos porque todos, de ambos bandos, nos hemos convertido en sepultureros", asegura el comandante D¨ªez Arellano, protagonista de la nueva novela del escritor granadino Antonio Enrique, titulada Santuario del odio, que ha sido publicada recientemente por Roca editorial. En Santuario del odio, Antonio Enrique presenta un recorrido por la Guerra Civil a trav¨¦s de la historia de su protagonista, que servir¨¢ de gu¨ªa desde que recibe la orden de reintegrarse a su regimiento en Granada.

D¨ªez Arellano, durante su periplo, ir¨¢ liberando a los asediados que se encuentra en aquellos cuarteles por los que pasa hasta llegar a su destino, donde se dar¨¢ cuenta de que el odio soterrado desde hace mucho tiempo en la ciudad ha saltado en mil pedazos originando un clima insostenible en el que los delatores y las purgas han cobrado un protagonismo que hace imposible la vida.

Pese a esta circunstancia, su condici¨®n militar obligar¨¢ al comandante a acatar las ¨®rdenes de sus superiores, a pesar de haber comenzado un duro dilema moral en su interior entre la vida y la ideolog¨ªa. Una vez resuelta esta pregunta a favor de la primera, ver¨¢ como su solidaridad no es bien recibida por parte de los mandos, partidarios del bando nacional.

Tras la toma del Alc¨¢zar de Toledo, la historia cambiar¨¢ por completo para el personaje creado por Antonio Enrique. Con una nueva personalidad, ser¨¢ infiltrado en el Madrid republicano, lo que le har¨¢ replantearse muchos de los motivos por los que luchaba.

"He tratado de escribir una novela equidistante situ¨¢ndome en el borde del conflicto. Se trata de un empe?o que en cierta manera debe de corresponder a mi generaci¨®n, ya que no vivimos ni la guerra ni los a?os m¨¢s duros de la posguerra", asegura Enrique, para quien "la novela debe basarse en una buena historia porque para el estilo y la reflexi¨®n ya existen otros g¨¦neros".

Setenta a?os despu¨¦s de su inicio, Santuario del odio retoma el tema de la Guerra Civil tratando de mostrar las m¨²ltiples caras con las que se presenta el conflicto fuera del ¨¢mbito ideol¨®gico. Enrique trata de mostrar la existencia de mitos referentes al comportamiento de cada uno de los bandos para terminar analizando las diferentes causas que llevaron a un enfrentamiento entre conciudadanos, en muchos casos incluso miembros de una misma familia.

"La Guerra Civil est¨¢ llena de mitos que en lugar de ayudarnos a comprenderla pueden llenarnos de dudas. El r¨¦gimen fue muy dado a la mitolog¨ªa y se mantuvo atento a la tarea de engrandecer hechos concretos, generalmente b¨¦licos, para sostenerse. Por el contrario, al otro bando se le neg¨® por completo cualquier heroicidad", opina el escritor, que ve en la ley de la Memoria Hist¨®rica una importante oportunidad "legal y leg¨ªtima, que no es m¨¢s que la obligaci¨®n de cualquier Estado, sea democr¨¢tico o no, de permitir a los familiares de las v¨ªctimas recuperar sus cad¨¢veres y darles el enterramiento que crean conveniente", asegura.

Los personajes escogidos por Enrique, que podr¨ªan pasar desapercibidos en la intrahistoria de cualquier conflicto, representan a aquellos que no importan ni interesan a los dirigentes, y que terminan pagando los platos rotos de la falta de entendimiento entre estos. "La novela tiene mucho de intrahistoria, indaga en hechos externos que pueden resultar insignificantes pero que fueron capaces de salvar vidas, de dignificar al pueblo, que es realmente lo heroico. Es el caso del comandante protagonista del libro, un hombre que realmente existi¨®, aunque fuera con otra identidad", confiesa.

Preocupaci¨®n

En los ¨²ltimos a?os se ha producido un importante aumento en las ventas de los libros que guardan relaci¨®n con la Guerra Civil. Este hecho, en opini¨®n de Enrique, es mucho m¨¢s complejo que la celebraci¨®n de un aniversario o un evento concreto. "Creo que este fen¨®meno es la consecuencia de que la situaci¨®n actual que atraviesa Espa?a guarda ciertos paralelismos con el final de la Rep¨²blica. Da la sensaci¨®n de que la sociedad est¨¢ cada vez m¨¢s dividida, lo que no deja de ser preocupante".

Antonio Enrique (Granada, 1953), ha publicado una amplia obra narrativa en la que destacan t¨ªtulos como La arm¨®nica monta?a (1986), La luz de la sangre (1997) o El disc¨ªpulo amado (2000). Adem¨¢s, como poeta ha editado Poema de la Alhambra, Retablo de la luna, Los cuerpos gloriosos, Reino Maya, La Quibla, Santo Sepulcro, Huerta del cielo y Silver Shadow.