Landis da la batalla en Internet

Floyd Landis tiene un hueco en los libros de historia: es el primer ganador del Tour de Francia despose¨ªdo del t¨ªtulo por dopaje. Landis, por supuesto, piensa que su nombre merece otras muchas notas al pie de su p¨¢gina. Que es un hombre tenaz, por ejemplo. Una persona dispuesta a sacrificar sus creencias, la cultura menonita, persiguiendo su sue?o ciclista. Landis, lo dir¨¢n los libros de historia, creci¨® sin televisi¨®n, radio u ordenador hasta los 19 a?os. No pod¨ªa siquiera, lo ordenaban los mandamientos menonitas, llevar pantal¨®n corto. Pero todo ha cambiado. Landis ya sabe qu¨¦ es Internet. Los chats, o grupos de conversaci¨®n. Y los blogs, diarios cibern¨¦ticos donde sus seguidores comentan sus notas diarias. Landis, claro, tiene una p¨¢gina web (www.floydlandis.com). Y ayer la utiliz¨®, presentaci¨®n en powerpoint incluida, para publicar m¨¢s de 300 folios que demuestran, dice, que es inocente, que el Tour es suyo, que nunca se dop¨® con testosterona.

Los argumentos que Landis ofreci¨® ayer a los internautas resumen sus diferentes reacciones al esc¨¢ndalo de su positivo, que estall¨® en julio, cuando se supo que el cociente testosterona/epitestosterona de su control anormal era de 11:1, casi el triple del umbral m¨¢ximo permitido por el C¨®digo Mundial Antidopaje, 4:1. Aunque su web permaneci¨® la mayor parte del d¨ªa colapsada, pronto aparecieron los primeros mensajes de apoyo al ciclista estadounidense, en los que se le felicitaba por la buena argumentaci¨®n de su defensa.

Landis -que explic¨® su positivo por, sucesivamente, la ingesta de alcohol, la medicaci¨®n para sus problemas de tiroides, y la producci¨®n "natural" de la sustancia "desde que era juvenil"-, reclama que los n¨²meros de identificaci¨®n de las muestras con las que se realizaron el an¨¢lisis de la muestra A de su orina y su correspondiente contraan¨¢lisis con la muestra B, no se corresponden. Que la metodolog¨ªa aplicada "no es fiable". Que tres de los cuatro metabolitos que deben aclarar el positivo lo niegan "si se tiene en cuenta el margen de error". Y que, en general, el proceso "est¨¢ lleno de errores", como declar¨® Howard Jacobs, su principal abogado, junto a los espa?oles Jos¨¦ Mar¨ªa Buxeda y Luis Sanz. Jacobs ya present¨® alegaciones por estas incongruencias ante la Agencia Antidopaje Estadounidense (USADA), sin que le fueran admitidas. Landis planea apelar al Tribunal de Arbitraje deportivo.

No todo el mundo cree en el ¨¦xito en su defensa. "Landis tuvo representantes mientras se analizaba la segunda muestra de su orina", explic¨® a este peri¨®dico Richar W. Pound, presidente de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA). "No hay ning¨²n problema con ese resultado. Debe aceptarlo". El positivo de Landis fue detectado con la prueba del is¨®topo de carb¨®n, la IRMS, que prob¨® el origen ex¨®geno, sint¨¦tico, de la sustancia. Pese a que los abogados de Landis restan validez a esta prueba, se realiza rutinariamente en casi todos los laboratorios de la AMA. Los expertos de la lucha antidopaje, adem¨¢s, se?alan que es curioso que Landis produzca tales cantidades de testosterona desde que era un juvenil sin que hayan sido nunca detectados en 10 a?os.

A su favor, Landis cuenta con la experiencia de sus abogados espa?oles, que ya representaron a Aitor Gonz¨¢lez, Roberto Heras y otros corredores espa?oles sancionados por dopaje. Sanz y Buxeda conocen al detalle un antecedente que les llena de optimismo: el ciclista I?igo Landaluze cuenta con un certificado de abundante producci¨®n end¨®gena de testosterona, por la que result¨® positivo -detectado con una IRMS- en 2005. La federaci¨®n espa?ola, tras estudiar un informe del toxic¨®logo holand¨¦s Douwe de Boer, consider¨® dudosa la aplicaci¨®n de la IRMS y le exculp¨®. Su absoluci¨®n est¨¢ recurrida por la UCI ante el TAS. Es un argumento m¨¢s en la defensa de Landis. Y ya est¨¢ en Internet.