"El Estado ruso sufre hoy una grave enfermedad"

El popular escritor de novelas policiales ruso Bor¨ªs Akunin, seud¨®nimo de su verdadero nombre, Grigori Chjartishvili, tiene la mala suerte de poseer un apellido georgiano. Eso ha bastado para que en el marco de la campa?a antigeorgiana que se desarrolla en Rusia, agentes del Servicio de Impuestos fueran a la editorial Zaj¨¢rov, que publica sus novelas, y se interesaran por sus honorarios.

Akunin, nacido en Tbilisi en 1956, aunque vive en Mosc¨² desde que ten¨ªa dos a?os, salt¨® a la fama con su serie de novelas protagonizadas por el investigador y esp¨ªa Erast Fandorin, como El ¨¢ngel ca¨ªdo o Gambito turco, publicadas en Espa?a por Salamandra. El escritor ha respondido brevemente por correo electr¨®nico a algunas preguntas relacionadas con la actual crisis.

Pregunta. ?Qu¨¦ piensa de la campa?a antigeorgiana en Rusia?

Respuesta. Es una se?al de que el Estado ruso hoy sufre una grave enfermedad. El ataque de histeria que le ha dado a las autoridades rusas est¨¢ afiebrando a toda la sociedad. Esta enfermedad puede tener para mi pa¨ªs consecuencias muy graves.

P. Usted se cri¨® en Mosc¨². ?Conserva alg¨²n tipo de relaci¨®n con Georgia?

R. Mi apellido es georgiano, pero no conozco esa lengua y tengo una impresi¨®n muy vaga de lo que sucede en Georgia. S¨®lo ahora me han obligado a acordarme de que ¨¦tnicamente soy de origen georgiano. Pero no hay mal que por bien no venga. De ahora en adelante me interesar¨¦ m¨¢s por la patria de mis antepasados.

P. ?En qu¨¦ medida este conflicto pol¨ªtico entre Rusia y Georgia puede influir en las relaciones entre ambos pa¨ªses y en sus relaciones culturales, tradicionalmente muy buenas?

R. ?sta no es cuesti¨®n de las relaciones ruso-georgianas. Lo que est¨¢ realmente en juego es el destino de la sociedad rusa. Esto que digo no es una exageraci¨®n. ?Podr¨¢ nuestro pa¨ªs vencer al virus de la xenofobia? ?No provocar¨¢ esta limpieza ¨¦tnica en curso, que no tiene precedentes en la Rusia poscomunista, la met¨¢stasis de guerras inter¨¦tnicas? Para un pa¨ªs grande en el que vive gente de muchas nacionalidades esto equivaldr¨¢ a un aut¨¦ntico suicidio.

P. ?Piensa usted que las relaciones ruso-georgianas pueden seguir empeorando? ?Hay un l¨ªmite a la escalada de tensi¨®n?

R. Poco me importan las relaciones diplom¨¢ticas y de otro tipo entre la Federaci¨®n de Rusia y Georgia. De alguna forma se las arreglar¨¢n. Pero mucho m¨¢s serias y preocupantes son las heridas y los traumas que dejar¨¢ este conflicto en el cuerpo de la sociedad rusa.

Lo m¨¢s peligroso es que como resultado de esta repugnante campa?a, la popularidad del presidente Putin ha aumentado sustancialmente. Los nacionalistas extremistas han reconocido en ¨¦l a su l¨ªder. Si Putin no reniega pronto de semejantes partidarios, a todos les quedar¨¢ claro que la pol¨ªtica del actual r¨¦gimen conscientemente ha dado un viraje hacia el nacionalismo pan-ruso. En su reciente intervenci¨®n, Putin us¨® la expresi¨®n "los intereses de la nacionalidad aut¨®ctona", con lo que dividi¨® a la poblaci¨®n del pa¨ªs en ciudadanos de primera y segunda categor¨ªa. Esto es, en mi opini¨®n, lo m¨¢s terrible.