Marc Hodler, miembro del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional

En mayo de 1995, la ciudad mormona estadounidense de Salt Lake City arras¨® en el recuento de votos como sede de los Juegos Ol¨ªmpicos de Invierno. Un hombre cercano a la direcci¨®n de los Juegos Ol¨ªmpicos coment¨® cr¨ªtico: "Esto no es bueno para la imagen del Comit¨¦ Ol¨ªmpico". En noviembre de 1998 estall¨® el esc¨¢ndalo con el caso de Ren¨¦ Essomba. La prensa americana destap¨® entonces que el voto del representante africano habr¨ªa sido "comprado" con la promesa de estudios de ingl¨¦s pagados para su hija en una universidad americana. Pero s¨®lo era la punta del iceberg. Poco despu¨¦s, las investigaciones de la prensa descubrieron que el de Essomba no era un caso aislado sino que "numerosos favores, sobres sospechosos y empleos demasiado bien remunerados" estaban en el origen de la elecci¨®n de la ciudad americana como sede de los Juegos de Invierno. El mismo hombre decidi¨® tomar cartas en el asunto y tras consultar con Jos¨¦ Antonio Samaranch, presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional, puso manos a su obra de limpieza.

Ese hombre era el abogado y ex campe¨®n de esqu¨ª Marc Hodler, miembro prominente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico. En una hist¨®rica rueda de prensa en Lausana, en diciembre de 1998, Hodler denunci¨® ante periodistas de todo el mundo "sobornos por millones de d¨®lares" que afectaban a ciudades como Nagano, Atlanta o Sidney. A lo largo de un a?o, sus investigaciones sobre las irregularidades en el seno del COI arrojar¨ªan un resultado descorazonador: seis miembros del COI quedaron apartados de sus funciones, mientras que otros cuatro altos cargos se apresuraron a presentar su dimisi¨®n. La conclusi¨®n de Hodler fue dram¨¢tica: "Entre el 5 y el 7% de los delegados est¨¢n corrompidos", dijo entonces.

Comenz¨® as¨ª un proceso tendiente a lograr la transparencia en las decisiones del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional. Entre otros logros de Hodler cabe contar con la prohibici¨®n formal de los delegados a visitar las ciudades candidatas y enviar en su lugar "una comisi¨®n independiente de evaluaci¨®n" elegida por la direcci¨®n. Igualmente luch¨® en 1972 por eliminar la cl¨¢usula que impide a los atletas ol¨ªmpicos realizar publicidades y ganar dinero gracias a su imagen. "No puede ser que el deporte amateur s¨®lo sea prerrogativa de ricos", habr¨ªa declarado. Esta lucha fue "uno de sus mayores orgullos".

La prensa suiza le acus¨® hasta el ¨²ltimo momento de "torpedear" con su franqueza y obsesi¨®n por la honestidad la candidatura de la ciudad helv¨¦tica de Sion a los Juegos Ol¨ªmpicos de Invierno de 2006, ganada por la italiana Tur¨ªn. Hodler fue miembro del equipo nacional de esqu¨ª de Suiza hasta 1938 y presidente de la Federaci¨®n Ol¨ªmpica de Esqu¨ª desde 1951 hasta 1998. Los medios locales le han calificado en sus notas biogr¨¢ficas como "un hombre recto y con un profundo sentido de la justicia. Un hombre raro".