"Espa?a tiene un complejo transatl¨¢ntico"

William J. R. Curtis (Birchington, Reino Unido, 1948) es uno de los cr¨ªticos de arquitectura m¨¢s incisivos de los ¨²ltimos a?os. Defiende la construcci¨®n por encima de la teor¨ªa y es autor de un libro clave, La arquitectura moderna desde 1900, cuya ¨²ltima edici¨®n Phaidon lanzar¨¢ en Espa?a el mes que viene. Ha estado en Madrid para hablar de On site, la exposici¨®n de arquitectura espa?ola que el MOMA inaugur¨® el pasado febrero en Nueva York y que, hasta el 14 de enero de 2007, puede visitarse en el Jard¨ªn Bot¨¢nico de Madrid.

Pregunta. Usted critica abiertamente On site, que tanto revuelo ha causado entre los arquitectos espa?oles. ?Qu¨¦ tiene de malo la ya llamada 'lista del MOMA'?

Respuesta. La arquitectura espa?ola tiene un problema de complejo transatl¨¢ntico. Esta muestra pretend¨ªa hablar de lo que se hace en Espa?a. Y termina siendo un endeble "por cierto, en Espa?a tambi¨¦n crece algo interesante al lado de los grandes nombres internacionales". Que Espa?a trate de justificarse a trav¨¦s del juicio de una cultura en declive, como la americana, me parece tr¨¢gico y est¨²pido. El MOMA lleva a?os con el norte perdido y esta exposici¨®n es el ¨²ltimo trabajo de un comisario que busca nuevas proyecciones y parece que las ha encontrado aqu¨ª, en Murcia, por cierto.

P. ?Qu¨¦ falla en la muestra?

R. Que Zaha Hadid construya en Espa?a no legitima lo que se hace a su alrededor. De hecho, puede impedir ver que lo que se hace a su lado es mejor que ella. La mitolog¨ªa transatl¨¢ntica es rid¨ªcula, vergonzosa. Pero puede ser muy da?ina. En la muestra hay muchos proyectos de Murcia. Eso sorprende. Luego supe que el comisario de la muestra es consultor para un Centro Internacional para la Arquitectura que, casualmente, se levanta en Murcia.

P. ?Qu¨¦ le parece adem¨¢s criticable de la exposici¨®n?

R. Sus dos pilares. Parte de la base de que la modernidad lleg¨® a Espa?a de la mano de la democracia. Eso es un absurdo. O una ignorancia. En la ¨¦poca de Franco en Espa?a se construy¨® una espl¨¦ndida arquitectura moderna. Coderch, por ejemplo. Es m¨¢s, hab¨ªa arquitectura moderna de izquierdas y arquitectura moderna de derechas. El tema es tan complejo que no se puede reducir a una falsedad. La exposici¨®n habla en t¨¦rminos paternalistas. El MOMA dice: "Les dejamos el Guernica cuando demostraron que eran dem¨®cratas".

P. ?La muestra no refleja la arquitectura espa?ola actual?

R. Refleja la arquitectura como objeto de consumo. Claro que tiene relaci¨®n con el problema mundial de las marcas. Si un alcalde provinciano quiere tener reconocimiento medi¨¢tico, hace como una bodega: piensa en la arquitectura como v¨ªa publicitaria. Yo puedo entender que un edificio de Gehry reciba atenci¨®n internacional inmediata. Pero no debemos olvidar que eso es s¨®lo una parte de lo que la arquitectura puede ser. Si consideras toda la arquitectura como una valla publicitaria tienes un problema como comisario. O todos, como sociedad. ?Por qu¨¦ teniendo a gente que ha sabido digerir la historia como Moneo o Navarro Baldeweg, Espa?a quiere apostar por el espect¨¢culo?

P. ?C¨®mo juzga las intervenciones de las estrellas?

R. Cuando el Reina Sof¨ªa era un espl¨¦ndido museo con dos ascensores marcando su entrada nadie hablaba de ¨¦l. Hoy todo el mundo tiene en boca la pieza de nouvelle cuisine que ha firmado Jean Nouvel. Pero ?alguien puede decir que eso funcione como un museo? ?En qu¨¦ ha quedado la plaza p¨²blica del concurso? ?En asfalto contaminado y ruidoso que se cierra por las noches? ?Qu¨¦ es lo que importa de ese museo, su uso o la foto?

P. ?Encuentra algo positivo en la arquitectura actual?

R. Hoy en la arquitectura hay espacios como supermercados, envoltorios espectaculares y trucos. Es fast arquitectura, pura imagen. Y es muy triste que Espa?a compre eso. No creo que promover el espect¨¢culo sea promover la buena arquitectura. Escuchar esto puede ser duro para un alcalde que cree que est¨¢ apostando por la arquitectura cuando conf¨ªa en un Premio Pritzker.