Disputa por los impuestos de Carlos
Los conservadores reclaman m¨¢s control sobre el heredero brit¨¢nico
Las finanzas del pr¨ªncipe Carlos han desatado una disputa entre el Tesoro y el Parlamento brit¨¢nicos. El Comit¨¦ Parlamentario de Cuentas P¨²blicas, que preside el diputado conservador Edward Leigh, ha reabierto la pol¨¦mica al cuestionar la legalidad de los acuerdos fiscales del heredero de Isabel II. El pr¨ªncipe contribuye, voluntariamente desde 1994, con una tasa en torno al 23% sobre las ganancias del Ducado de Cornualles, su principal fuente de ingresos. El Comit¨¦ demanda, sin embargo, un mayor control sobre la contabilidad del futuro rey y reclama que el ducado est¨¦ sujeto tambi¨¦n a impuestos de plusval¨ªa y corporativos.
Leigh y los diputados del poderoso comit¨¦ intentan, una vez m¨¢s, entrometerse en las finanzas del pr¨ªncipe Carlos. La ¨²ltima embestida, que se ha filtrado a la prensa brit¨¢nica, coincidi¨® con la visita del heredero a la sede del Ministerio de Hacienda, donde particip¨® en un debate sobre las responsabilidades sociales del mundo corporativo. Es un tema cercano a Carlos de Inglaterra. Su fundaci¨®n ben¨¦fica, The Prince's Trust, ayuda a miles de j¨®venes cada a?o a labrarse un futuro en la industria, comercio o actividades art¨ªsticas.
Los laboristas apoyan la situaci¨®n vigente, que "garantiza la independencia" econ¨®mica del pr¨ªncipe
Gordon Brown, ministro de Hacienda, evit¨® entrar en la pol¨¦mica, pero, seg¨²n sus portavoces, est¨¢ satisfecho con la situaci¨®n vigente, que garantiza "un nivel de independencia econ¨®mica" al heredero de la Corona. El Tesoro se reserva, por tanto, la "explicaci¨®n completa" que exigen los diputados respecto a "la favorable posici¨®n fiscal" del Ducado de Cornualles. La carta del comit¨¦ hace tambi¨¦n referencia al Ducado de Lancaster, cuya beneficiaria es la propia reina Isabel II.
El ducado de Cornualles se cre¨® en 1337 como fuente de financiaci¨®n de los pr¨ªncipes de Gales. Controla hoy 56.229 hect¨¢reas de terreno rural y urbano, principalmente en el suroeste de Inglaterra. Vendi¨® en 2005 el sector de su patrimonio de uso comercial, pero recibe rentas de vastas y variadas propiedades: desde el campo de cr¨ªquet Oval, en Londres, a Poundury, el pueblo dise?ado seg¨²n la visi¨®n de Carlos, o la prisi¨®n de Dartmoor. Gestiona tambi¨¦n inversiones financieras y la marca de productos naturales, Duchy Originals, que gener¨® mill¨®n y medio de euros el a?o pasado.
Con ingresos de 14,1 millones de libras (unos 20 millones de euros) declarados en el ¨²ltimo ejercicio, el pr¨ªncipe pag¨® 4,7 millones de euros en impuesto sobre la renta. Dio a conocer el monto de su contribuci¨®n para enfriar la presi¨®n del Comit¨¦ Parlamentario, que en julio recomend¨® m¨¢s control y transparencia sobre las finanzas regias.
Los diputados vuelven a la carga. Critican los privilegios de ambos ducados y cuestionan su impacto en los mercados inmobiliario y financiero. Para garantizar una mayor claridad, el Comit¨¦ propone que la Oficina de la Auditor¨ªa Nacional supervise los libros de contabilidad del Pr¨ªncipe Carlos. En el r¨¦gimen actual, el Parlamento recibe un informe anual de los resultados financieros del ducado de Cornualles. La Reina no desvela su contribuci¨®n fiscal.
Los portavoces del Pr¨ªncipe aclararon que el ducado no paga impuesto corporativo porque no es una empresa. "Todos los ingresos que deber¨ªan gravarse se incluyen en la declaraci¨®n de la renta que cotiza el Pr¨ªncipe de Gales".
Respecto al impuesto de plusval¨ªa, recordaron que el heredero de la Corona no tiene derecho a beneficiarse a t¨ªtulo privado de las ventas de su patrimonio. "Todas las recaudaciones de transacciones de activos deben reinvertirse en los negocios del ducado", precisan los asesores de Carlos. Respaldado por el Tesoro, Carlos de Gales ha ganado otra baza de una partida que dista mucho de haber concluido.
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