"Para la memoria y como ejemplo"

Uno de los organizadores del Tour, el diario franc¨¦s L'Equipe, sugiri¨® lo siguiente en un editorial publicado el pasado mi¨¦rcoles: (...) "El reglamento de la UCI prev¨¦ que en caso de descalificaci¨®n del primero, el segundo ser¨¢ designado como el ganador de la prueba concerniente. Es decir, el espa?ol Pereiro. Este punto del reglamente viene a responder a la evidencia del deporte, que quiere que toda competici¨®n tenga un vencedor final. Esta l¨®gica no impide, sin embargo, en el caso de una carrera en la que al margen de las normas la prenda es el s¨ªmbolo de la gloria, que nos preguntemos si de ah¨ª podr¨ªa desprenderse una excepci¨®n. ?Se puede heredar un maillot amarillo sin tenerlo, sin que sea en raz¨®n del desarrollo de una prueba y de sus estrategias, realmente conquistado, como lo habr¨ªa hecho un vencedor incontestable? ?Se puede considerar que este maillot, v¨ªctima ya de un enojoso desgarr¨®n, se encontrar¨ªa devaluado, sobre todo si sobreviene de otros rebotes originados por el desenlace de la clasificaci¨®n? ?Se puede poner en la balanza la gloria sin maillot para unos, y un maillot sin gloria para otros? La tentaci¨®n es grande, entonces, de defender la idea de una primera l¨ªnea de palmar¨¦s dejada en blanco. Para la memoria y como ejemplo. Para que vencedor no rime con tramposo. La soluci¨®n pudiera residir en un compromiso que, a la altura de este evento, velara tanto por el reglamento como por el car¨¢cter sagrado de la prenda: por ejemplo, elevar al segundo al rango de vencedor, puesto que debe ser as¨ª, pero sin que ¨¦l se pueda engalanar, incluso simb¨®licamente o retrospectivamente, con el privilegio de haber sido el ¨²ltimo maillot amarillo".

Para Jos¨¦ Miguel Echavarri, director del Caisse d'Epargne, en el que figura ?scar Pereiro, el ganador a¨²n no confirmado de la carrera de 2006, el positivo de Floyd Landis tuvo consecuencias irreparables. "Mi equipo es el gran perjudicado. El no haber subido al podio en los Campos El¨ªseos, el habernos privado de la emoci¨®n de la victoria, de escuchar el himno espa?ol y de poder compartir todo eso con nuestros conciudadanos, es una deuda impagable", dijo Echavarri.

Entre los da?os sufridos por el Caisse d'Epargne los econ¨®micos no son despreciables. En primer lugar, est¨¢ el premio: Pereiro recibi¨® 200.000 euros por ser segundo cuando el primero ingresa 450.000. Luego, los perjuicios derivados del patrocinio: las marcas que sustentan al equipo, Illes Balears y Caisse d'Epargne, no pueden hacer publicidad como campeonas.

?scar Pereiro se mostr¨® muy prudente y gallego sobre la propuesta de dejar desierto el caj¨®n m¨¢s alto del podio: "S¨®lo es un rumor al que no hay que darle cancha. Si fuera cierto estar¨ªamos ante una injusticia".