Los sondeos refuerzan la tendencia a favor del cambio pol¨ªtico

?A qu¨¦ partido apoyar¨¢ en las elecciones del 7 de noviembre? La pregunta es clara, y la respuesta tambi¨¦n: el 44% a los dem¨®cratas y el 33% a los republicanos. En el mismo sondeo de Reuters y Zogby de hace un mes, la diferencia era de 9 puntos; ahora es de 11. Pero todav¨ªa hay casi un 20% de estadounidenses que, a menos de dos semanas de las elecciones, no han tomado una decisi¨®n. Hay margen para cualquier resultado, aunque, con los soldados muertos en Irak este mes acerc¨¢ndose al centenar, la guerra sigue siendo un poderoso factor a la hora de tomar la decisi¨®n.

Esta ¨²ltima radiograf¨ªa del estado de ¨¢nimo del electorado coincide con todas las encuestas recientes en las que es evidente la ventaja global dem¨®crata y el papel que Irak juega en el malestar del pa¨ªs. El 57% dice que la guerra no merece la p¨¦rdida de vidas justo cuando octubre se convierte en uno de los peores meses desde que empez¨® la ocupaci¨®n, con 96 soldados muertos. [Una emboscada en Baquba, al norte de Bagdad, caus¨® la muerte de 28 polic¨ªas iraqu¨ªes, informa Reuters]. El 50% cree que no deber¨ªa haber tropas en Irak cuando acabe 2007, y el porcentaje de los que creen que la retirada deber¨ªa ser inmediata asciende al 15%. A pesar de su responsabilidad en el desaguisado de la posguerra, el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, no sale mal parado: el 49% cree que no deber¨ªa dimitir, frente al 42% que s¨ª.

El 57% de los estadounidenses opina que el pa¨ªs no avanza en la direcci¨®n adecuada. Los dem¨®cratas reciben mejores notas que los republicanos en nueve de los 13 temas consultados, entre ellos inmigraci¨®n, pol¨ªtica exterior y ¨¦tica. Los republicanos mantienen ventaja en la lucha contra el terrorismo y la proliferaci¨®n nuclear, y en reducci¨®n de impuestos. El sondeo, hecho a 1.013 personas, tiene un margen de error del 3,1%

Los independientes favorecen a los dem¨®cratas con una ventaja de 12 puntos, menor que la que indicaba el ¨²ltimo sondeo de The Washington Post y la televisi¨®n ABC. Y sigue habiendo m¨¢s entusiasmo en las bases dem¨®cratas (el 81% apoya a los candidatos) que en las republicanas (el 68%, por ahora, tiene claro que votar¨¢ a los conservadores). Los republicanos disputan estas cifras y dicen que el 80% de la base est¨¢ "entusiasmada".

Que estos datos sean muy similares a los de otros sondeos indica que hay una tendencia consistente a favor del cambio, pero el n¨²mero de indecisos es elevado. Y aunque sean unas elecciones legislativas con una dimensi¨®n de pol¨ªtica nacional elevada, por la guerra de Irak, la clave no est¨¢ en los sondeos nacionales, sino en la apretada pugna que hay en medio centenar de competiciones en las que es muy dif¨ªcil aventurar resultados.

Reacci¨®n de ¨²ltimo momento

Por eso sigue abierta la cuesti¨®n de si esa tendencia a favor del cambio va a traducirse en una gran ola que d¨¦ a los dem¨®cratas el control del Capitolio, en una ola mediana que desemboque en un resultado mixto -la C¨¢mara para los dem¨®cratas, el Senado retenido por los republicanos por uno o dos esca?os- o si va a haber, como sostienen el presidente Bush y su asesor, Karl Rove, una reacci¨®n de ¨²ltimo momento en la base republicana que contenga la cat¨¢strofe.

Esta reacci¨®n es posible, y en ese sentido trabaja la maquinaria electoral de Rove: identificaci¨®n inform¨¢tica de las reservas de votantes, presi¨®n telef¨®nica y personal para animar a los desanimados y un fuerte incremento en las campa?as publicitarias: los 2.600 millones de d¨®lares (2.065 millones de euros) gastados por los dos partidos hasta ahora suponen un r¨¦cord en unas legislativas. Pero es una batalla cuesta arriba. "El de 2006 es un a?o para los dem¨®cratas. Lo que los analistas y los observadores est¨¢n discutiendo es hasta qu¨¦ punto va a ser un gran a?o", dice en su p¨¢gina web la Bola de Cristal el experto Larry Sabato, que cree que el margen de maniobra republicano es cada vez menor. Sabato predice que los dem¨®cratas ganar¨¢n de 21 a 26 esca?os en la C¨¢mara (la mayor¨ªa depende de que ganen m¨¢s de 15) y entre cuatro y seis en el Senado (los republicanos perder¨ªan el control si son seis, pero no si son menos).

Otro de los analistas omnipresentes en la recta final, Charlie Cook, escribe en The Nacional Journal que aunque la campa?a puede a¨²n experimentar giros, "har¨ªa falta una enorme crisis nacional o internacional para distraer la atenci¨®n p¨²blica de los temas que est¨¢n haciendo mucho da?o a los republicanos". Cook no se aparta mucho del anterior pron¨®stico y calcula que "los republicanos parecen dirigirse hacia una p¨¦rdida de al menos 20 esca?os en la C¨¢mara, pero quiz¨¢ sean 30 o 35", y "cinco o seis en el Senado, aunque podr¨ªan quedarse en cuatro".