La resurrecci¨®n de Schwarzenegger
El gobernador de California es favorito a la reelecci¨®n tras dar un vuelco hacia el centro
Hace un a?o, parec¨ªa que Arnold Schwarzenegger estaba preparando las maletas, que iba abandonar su aventura pol¨ªtica en Sacramento, la capital de California, donde ha ejercido desde finales de 2003 como gobernador, y que iba a regresar a su vida de lujo y fama como actor en Hollywood. En noviembre de 2005 ten¨ªa uno de los ¨ªndices de popularidad m¨¢s bajos en la historia del Estado, y hab¨ªa perdido una elecci¨®n especial sobre reformas que ¨¦l mismo hab¨ªa convocado. Los cronistas afilaban sus l¨¢pices para escribir el obituario pol¨ªtico del hombre del m¨²sculo, de quien se lleg¨® a decir que si no hubiese nacido en el extranjero, podr¨ªa llegar a ser candidato republicano a la presidencia de EE UU.
Hoy Schwarzenegger est¨¢ de vuelta. La verdad, nunca se fue. En esa misma noche en que el electorado le dio una paliza, el actor y culturista comenz¨® a cambiar. En lugar de pelearse con los dem¨®cratas, con los sindicatos de bomberos, enfermeras y otros servidores p¨²blicos y de intentar gobernar desde la derecha como un republicano t¨ªpico, Schwarzenegger se movi¨® al centro. A ocho d¨ªas de las elecciones a gobernador que se celebrar¨¢n en 36 Estados y de las legislativas, Schwarzenegger lleva una ventaja de 18 puntos a su rival dem¨®crata, Phil Angelides. Pocos dudan de que ser¨¢ reelegido.
"Es incre¨ªble", se?al¨® Mark Baldassare, investigador del Instituto de Pol¨ªtica P¨²blica de California, en referencia al espectacular repunte. "Especialmente en un a?o electoral como ¨¦ste, en donde el clima nacional indica que el pa¨ªs se mueve hacia los dem¨®cratas".
California es uno de los Estados que m¨¢s votan por los dem¨®cratas, y donde la impopularidad del presidente, George W. Bush, es m¨¢s alta. El candidato dem¨®crata ha martilleado en los anuncios la idea de que Schwarzenegger apoya a Bush y viceversa. El gobernador -casado con Maria Schiver, sobrina de John Fitzgerald Kennedy- ha recordado su colaboraci¨®n de este a?o con el congreso estatal, de mayor¨ªa dem¨®crata. Este verano se aprob¨® una ley de incremento del salario m¨ªnimo que el Schwarzenegger duro y arrogante de la mayor parte de 2005 nunca hubiese firmado. El actor nacido en Austria dej¨® adem¨¢s de utilizar t¨¦rminos como "afeminado", con el que se refiri¨® a los legisladores dem¨®cratas cuando ¨¦stos no aceptaron una propuesta suya.
No es que Schwarzenegger se haya convertido en un radical. Sigue siendo republicano en lo pol¨ªtico -apoya a Bush-, moderado en lo social -acepta el aborto, no est¨¢ en contra de los homosexuales-, y progresista en ¨¢reas como el medio ambiente -este a?o se aprob¨® una de las leyes m¨¢s avanzadas para limitar las emisiones de di¨®xido de carbono-. Lo que le ha dado el 48% de las preferencias electorales es que gobierna desde el centro. "Se ha beneficiado por su liderazgo bipartidista", explic¨® Matthew Dowd, uno de sus principales estrategas. El ¨²nico grupo que no tiene a favor es el de los latinos, por sus posiciones sobre inmigraci¨®n.
As¨ª como Schwarzenegger cambi¨® en este ¨²ltimo a?o, nadie sabe qu¨¦ ser¨¢ del Schwarzenegger que gobernar¨¢ California los pr¨®ximos cuatro. Los que lo conocen revelan que basa muchas de sus acciones en su olfato pol¨ªtico. Tras la derrota de 2005, sus asesores le aconsejaron que no cediera un ¨¢pice. Para sorpresa de todos, opt¨® por tender puentes con sus adversarios. Se iniciaba as¨ª su resurrecci¨®n pol¨ªtica.
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