Diez 'piratas' controlan el 80% del correo basura que circula por Internet
El mayor 'spammer' del mundo es un ucranio que usa los alias de Alex Blood o AlekseyB
"Alargue su pene". "Invierta en BioMatrix Corp". "Prolongue sus relaciones amorosas". "Aplace su hipoteca". Los buzones de correo electr¨®nico de los internautas se llenan cada d¨ªa con mensajes publicitarios sobre milagrosos medicamentos, rentables inversiones o productos de lujo a precios de saldo. La recepci¨®n de spam se ha convertido ya en la primera preocupaci¨®n de los internautas espa?oles, muy por encima de los virus o el uso fraudulento de la tarjeta de cr¨¦dito, seg¨²n el informe eEspa?a 2006 de la Fundaci¨®n France Telecom. Y es que alrededor del 64% del correo que circul¨® por Internet en septiembre era publicidad no deseada.
Eso significa que el spam no es s¨®lo una molestia. Su abundancia est¨¢ atascando Internet. Unos 55.000 millones de correos no solicitados son enviados cada d¨ªa.
Los delincuentes entran en los PC y los usan como zombis para reenviar los correos
Cada mill¨®n de correos s¨®lo recibe 15 respuestas, pero es un negocio rentable
?Qui¨¦n crea y manda toda esta ingente cantidad de correo basura? La entidad sin ¨¢nimo de lucro Spamhaus, con sede en el Reino Unido y que lleva ocho a?os luchando contra esta actividad, ha publicado una lista con los 10 mayores spammers. Seg¨²n explica la entidad, ese reducido grupo es responsable de cerca del 80% del spam que se recibe en Europa Occidental y Estados Unidos. La FTC (Comisi¨®n Federal de Comercio) de Estados Unidos ya avisaba el pasado a?o: "Aunque hay cientos de miles de personas que causan este problema, la mayor parte del spam proviene de un grupo reducido de ellas".
Los nombres y alias de los piratas inform¨¢ticos han sido incluidos en la lista de Spamhaus despu¨¦s de que, al menos, tres proveedores de Internet hayan paralizado sus env¨ªos. A la cabeza de la clasificaci¨®n se encuentra un ucranio. Utiliza los alias de Alex Blood, Alexander Mosh, AlekseyB y Alex Polyako, aunque ninguno de ellos responde, posiblemente, a su verdadera identidad (Alex Polyakov es el nombre de un esp¨ªa sovi¨¦tico en la novela de John Le Carr¨¦ El topo). El n¨²mero dos el ruso-estadounidense Leo Kuvayev, apodado BadCow. Le siguen otros dos estadounidenses, un grupo de rusos, un israel¨ª, un canadiense y un hongkon¨¦s.
En la UE y en EE UU, el correo basura es ilegal. En Espa?a, enviar correos electr¨®nicos sin autorizaci¨®n de quien lo recibe est¨¢ expresamente prohibido por la Ley de Servicios de la Sociedad de la Informaci¨®n (LSSI) de 2002. Pero estos piratas cambian de redes y pa¨ªses con mucha frecuencia, y se aprovechan de la laxitud de las normas de Estados como Rusia o China y los para¨ªsos fiscales. Sobre todo, se aprovechan de la escasa colaboraci¨®n internacional. Seg¨²n reconoc¨ªa el pasado a?o la Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico (OCDE), "la legislaci¨®n no va a detener, por s¨ª misma, a los spammers que quieren obtener beneficios".
Y es que ¨¦ste es un buen negocio. Es cierto que el nivel de respuesta de los internautas es muy bajo; s¨®lo 15 personas por cada mill¨®n responde a un correo basura. Pero los spammers pueden llegar a enviar un mill¨®n de correos en menos de una hora, as¨ª que la rentabilidad que sacan con s¨®lo pulsar un bot¨®n es muy alta; e inmediata. Los delincuentes obtienen un porcentaje variable de cada suscripci¨®n o venta. Los productos m¨¢s populares son f¨¢rmacos (36%), financieros (19%) y pornogr¨¢ficos (14%), seg¨²n datos aportados por la compa?¨ªa de seguridad Ipswitch.
?D¨®nde encuentran los delincuentes las direcciones de correo? No necesitan grandes conocimientos de tecnolog¨ªa sino, m¨¢s bien, de psicolog¨ªa. Recopilan direcciones en p¨¢ginas personales y blogs, en p¨¢ginas trampa donde solicitan un correo para lograr alguna muestra
gratuita y en cadenas de bromas que los usuarios reenv¨ªan a sus amigos sin ocultar las direcciones electr¨®nicas de los dem¨¢s.
Una vez conseguidas, el spammer env¨ªa el mensaje publicitario, bien utilizando una sola direcci¨®n de correo o a trav¨¦s de diferentes direcciones y servidores. Pero los delincuentes est¨¢n perfeccionando sus t¨¦cnicas y est¨¢n comenzando a utilizar los ordenadores de sus v¨ªctimas. La idea consiste en penetrar en los PC conectados a Internet que no est¨¢n debidamente protegidos y utilizarlos como zombis que reenv¨ªan los correos a las ¨®rdenes del delincuente. Los expertos calculan que el 40% del correo basura ya se env¨ªa gracias a esta t¨¦cnica.
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