Fernando Torres, peor que nunca

"Estoy satisfecho del rendimiento de Fernando. Es el capit¨¢n, es solidario y se le nota comprometido con la causa. Ahora s¨®lo nos falta vencer o morir". Horas antes de partir hacia Valencia "para remontar" el 0-1 de la ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey contra el Levante, el entrenador del Atl¨¦tico, Javier Aguirre, respondi¨® con dramatismo a la afrenta de la mala racha de Fernando Torres, que ha firmado su peor arranque liguero desde su estreno en Primera. El Ni?o s¨®lo ha cosechado dos goles en nueve partidos, el primero en la jornada inicial, ante el Racing (0-1), y el otro de penalti contra el Recreativo (2-1). Un bagaje muy pobre que, unido al marem¨¢gnum de atacantes lesionados -Maxi Rodr¨ªguez, Petrov y Mista-, ha repercutido negativamente en el equipo.

Torres, el portaestandarte del Atl¨¦tico, "un equipo dise?ado para jugar en Europa" seg¨²n Aguirre, jam¨¢s hab¨ªa logrado menos goles en las nueve primeras jornadas de la Liga en sus cinco a?os en Primera. Si en su primera campa?a, la 2002-03, anot¨® cuatro, en las dos siguientes temporadas registr¨® cinco. El curso pasado, por estas fechas, sumaba tres. El punta pecoso es la ¨²ltima carta de un cuerpo t¨¦cnico que en el verano neg¨® una oportunidad a Del Moral, punta del Atl¨¦tico B que ahora est¨¢ enrachado en el Getafe -ayer se dej¨® caer por el campo de entrenamiento, en el cerro del Espino, en Majadahonda-, en el que acumula tres goles en cinco partidos.

"Fernando trabaja mucho", reiter¨® ayer Aguirre, que apunt¨® a su gente que deben "ser inteligentes arriba si quieren solventar la eliminatoria copera". Parte de la respuesta a la sequ¨ªa de 373 minutos del club madrile?o -el club ya ha pasado por semejante apuro en las temporadas 1968-69 (409 minutos), la 1987-88 (494) y la 1994-95 (407)- est¨¢ en los remates, uno a puerta por partido, de su artillero insignia, que cada vez recula m¨¢s metros para entrar en contacto con el bal¨®n. Tanto que es m¨¢s corriente verle escorado en la banda derecha presionando que rondando el ¨¢rea. Los m¨¢s cr¨¦dulos lo achacan a la maldici¨®n del Kun, al gol del triunfo de Ag¨¹ero con el guante izquierdo ante el Recreativo. Desde ese momento nadie ve puerta. Los m¨¢s realistas lo achacan al escaso n¨²mero de oportunidades generadas.

Frente al Mallorca, el Atl¨¦tico tuvo dos ocasiones: un disparo lejano de Luccin y un remate de Ag¨¹ero. El equipo no crea juego y Torres se resiente de su traves¨ªa del desierto. Por algo el Atl¨¦tico tiene los peores registros goleadores de los ¨²ltimos ejercicios. Lleva s¨®lo diez goles en nueve jornadas, de los que cuatro fueron en la goleada en Bilbao (1-4). La ¨²ltima vez que estuvo cuatro partidos sin marcar fue en el ejercicio 2004-05. Entonces perdi¨® ante el Numancia y Osasuna por dos veces, una en Copa, y empat¨® con el Espanyol. Torres y Salva eran el d¨²o atacante.