Denunciado un vigilante de Atocha por pegar a un marroqu¨ª

"Me empez¨® a llamar cabr¨®n, hijo de puta, moro de mierda y me cago en tu puta madre. Me dio tres pu?etazos y me tir¨® al suelo". Con esa corta frase, recuerda Morad Arabi, un marroqu¨ª de 31 a?os, la agresi¨®n que sufri¨® el pasado martes en la estaci¨®n de cercan¨ªas de Atocha.

La v¨ªctima, que ha denunciado los hechos, sufre rotura del tabique nasal, un fuerte hematoma facial y dolores de cabeza continuos. Renfe ha separado del servicio al vigilante de la empresa Eulen denunciado y ha abierto un expediente informativo interno, seg¨²n una portavoz de la compa?¨ªa ferroviaria.

La supuesta agresi¨®n se produjo el pasado martes a las 19.30 cuando Morad Arabi iba junto a su amigo Said a una oferta de trabajo en Vallecas. Estaba hablando en ¨¢rabe con su colega, cuando se acerc¨® el vigilante de seguridad, seg¨²n consta en la denuncia. Entonces le pregunt¨® qu¨¦ miraba y si iba a pegarle. Arabi no le dio la mayor importancia y se march¨® andando.

El empleado de seguridad le sigui¨® y comenz¨® a insultarle. Entonces, Arabi se par¨® y le pregunt¨® por qu¨¦ le insultaba. "En ese momento, el vigilante con una actitud provocativa se enfund¨® unos guantes de cuero que ten¨ªa y sin mediar motivo alguno le peg¨® tres pu?etazos al declarante en toda la cara, tir¨¢ndole al suelo y haci¨¦ndole sangrar por la nariz abundantemente", recoge la denuncia. Arabi a?ade que el vigilante era alto, corpulento y llevaba el pelo rapado. "Si no me llega a coger despistado, no me habr¨ªa pegado tanto", confiesa.

"Nadie nos ayudaba. Mi amigo cogi¨® su tel¨¦fono y llam¨® a la polic¨ªa, pero alguien nos dijo que ten¨ªamos la comisar¨ªa en la propia estaci¨®n y fui a denunciar", comenta Arabi

La v¨ªctima lleva siete a?os viviendo en Espa?a. Ha trabajado como limpiador del metro, pero ahora est¨¢ en el paro. Da la coincidencia, adem¨¢s, de que su hermano es presidente de la Asociaci¨®n Solidaria para la Integraci¨®n Sociolaboral del Inmigrantes (Asisi) y miembro del Observatorio contra el Racismo de la Comunidad de Madrid. "Nunca hab¨ªa sufrido un brote racista como el del martes. Siempre hay alguna tonter¨ªa, pero nunca con esta brutalidad y sin que uno se meta en ning¨²n problema", coment¨® Arabi.

La v¨ªctima llam¨® al Samur desde las dependencias policiales donde recibi¨® las primeras curas. Despu¨¦s fue al servicio de urgencias del hospital Cl¨ªnico donde fue tratado de la fractura del tabique nasal y una hemorragia en el rostro. Al d¨ªa siguiente denunci¨® la agresi¨®n en comisar¨ªa. Anoche tuvo que acudir a las urgencias de la cl¨ªnica de la Concepci¨®n, ya que sufr¨ªa fuertes dolores de cabeza motivados por la agresi¨®n. "A¨²n estoy pendiente de que me digan si me tienen que operar o puede que se cure por s¨ª solo".

La asociaci¨®n Movimiento contra la Intolerancia se encarga de la defensa jur¨ªdica de la v¨ªctima. "Existe preocupaci¨®n y alarma social por la reiteraci¨®n de hechos de violencia que protagonizan algunos vigilantes de seguridad", recuerda su presidente, Esteban Ibarra. ?ste ha pedido la colaboraci¨®n ciudadana, ya que a esa hora hab¨ªa mucha gente en la estaci¨®n de Atocha, pero nadie ha querido, hasta el momento, presentarse como testigo en el caso. Los interesados pueden llamar al tel¨¦fono de la asociaci¨®n (91 530 71 99).

"Entendemos que la gente pueda tener miedo por este tipo de agresiones, pero denunciarlas es la ¨²nica forma de acabar con la impunidad de algunos vigilantes de seguridad. Precisamente, esos que se supone que deben de defender los derechos de las personas", a?ade Ibarra.

?ste enlaza este caso con la agresi¨®n sufrida por una inmigrante angole?a hace 15 d¨ªas en las cocheras que tiene Renfe en la estaci¨®n de M¨®stoles-El Soto, cuando un vigilante de seguridad la peg¨® un tiro en una pierna con su arma reglamentaria. Supuestamente, se produjo una pelea entre los dos porque la v¨ªctima quer¨ªa dormir en un vag¨®n. La mujer fue ingresada en estado grave en el hospital de M¨®stoles.

Una portavoz de Renfe explic¨® anoche que el vigilante de seguridad ha sido apartado del servicio y se ha abierto un expediente informativo interno para esclarecer lo sucedido en la estaci¨®n de Atocha.